(EN EDICIÓN) Te Odio Como Nunca Quise A Nadie |Isco Alarcón|

Capítulo 56

EMMA POV

4 MESES DESPUÉS

Me detuve en la cera. Tenía que descansar un momento

¿Señora se encuentra bien? Pregunto Elena preocupada

Respire suave. Estoy bien, solo un poco agitada

Señora usted no está para estas cosas, déjeme llamar al joven William

¡No!. Espete de inmediato, estoy bien, es normal que me canse más rápido, pero yo quiero hacer esto, quiero distraerme

Está bien señora. Será como usted diga, ambas continuamos caminando

Era mi última semana de gestación y todo el mundo andaba como loco, llamándome cada tres minutos preguntando como me sentía, y William... William estaba más sobreprotector que nunca, aveces exageraba tanto que me enloquecia, pero al final el tenía la razón.
En cuanto a Mery y Nacho decidieron esperar que Liam estuviera en mis brazos para poder disfrutar de la pachanga, según Mery.
Debía aceptar que mi pequeño se hacía más pesado cada semana, aveces sus movimientos provocaban un gran dolor en mis costillas y llevarlo dentro de mi a veces era tedioso, pero pronto estaría conmigo y todo esto acabaría.

La doctora me aconsejaba muchas cosas, gracias a ella pude controlar mis antojos pesados. Mis padres me habían visitado muchas veces y no veían la hora de que Liam estuviera con ellos, realmente era maravilloso que todos estuvieran pendientes de ti, pero aveces, solo quería estar sola y dormir mucho tiempo, para volver a soñar, para volver a ver a Francisco en mis sueños, pero desde aquel día, no lo he vuelto a ver. Para mi sigue siendo un sufrimiento saber que me odia, que no me ama, y todo por un mal entendido que nunca acabaría.

Señora voy a la sección de quesos ¿quiere venir?

No, ve tú... iré por los vegetales, es importante que tengamos de sobra

Muy bien señora. Ambas nos dividimos

Comencé a escoger los más frescos. tomates, espárragos, brocoli, espinacas... Repetía en mi mente buscándolos

Observe las pacas de zanahorias y las imágenes de Francisco invadieron mi mente, recordé aquel día, ambos luchando por una de estas, forcejeabamos por zanahorias. Rei y acaricie una de ellas

¿EMMA? Hablo una voz que conocía perfectamente, sus ojos me miraban con tanto odio que retrocedí de inmediato.

¡No puede ser! Grito observándome completa, y entonces recordé que mi pequeño ya no se podía ocultar.

El miedo ahora se apoderaba de mi, mis manos comenzaron a temblar y mi corazón a latir con mucha más rapidez

No lo puedo creer Emma, estas embarazada. Soltó

¿Que quieres Pamela? ¿Como me encontraste? Solté fría

Aún me observaba sorprendida. Entonces si es verdad. Susurro

¿Que es verdad? Pregunte preocupada

Río con fuerza. Escuche a él estúpido de tu primo decirle a Mery que vendrían a visitarte cuando tu bebé naciera y claro, tenía que verlo con mis propios ojos.

Quiero que te vayas y me dejes en paz.

Río. Esto es una noticia Bomba querida. Quien creería que eres toda una zorra, tanto amor por Francisco y saliste embarazada de su mejor amigo. Volvió a reír

¡NO PAMELA! Grite. Este hijo no es... Reaccione pero me compuse de inmediato. no quiero que te metas en esto

Me observó fijamente. No es de William, espetó sorprendida y camino a mi alrededor