capitulo 3

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Entre la intensa oscuridad un insoportable ardor en todo mi  cuerpo me impide moverme desde donde estoy y para colmo de los males, el suelo está tan frío y mojado que conforme muevo los dedos de los pies se van resvalando rapidamente; a medida que mis ojos se van acomodando a la oscuridad divise una reja y al mirar al mi alrededor vi que solo habian paredes de concreto y una oleada de terror se apodero de mi.

¡Este maniático me ha encerrado en un calabozo, monstruo infeliz!

Mis ojos comienzan a empañarse mientras un sentimiento  de pánico me abruma la mente, lagrimas no tardan mucho en rodar por mi mejilla y labio hasta caer en el piso frío de la prisión ¿Tan cínico es éste hombre?, ¿Porque padres míos, me han dejado casar con está bestia?, esto no me lo esperaba, desde un principio se mostró relajado e incluso soportable ¿ Porqué ha cambiado su actitud? Nunca di muestras de sentirme mal a su lado en lo poco que llevamos ¿Será posible quererlo como esposo o aun peor como el padre de mis hijos? De solo pensarlo me tiembla el cuerpo. ¿ que horas son, cuánto tiempo llevo aquí? Me pregunto buscando algun punto donde pueda saber si es de dia o noche. 
Necesito salir de aquí, tanto de la celda como de la mansión. Entonces recuerdo que kloe está aún en la mansión, sola con klanformin; necesito ver algun guardia, el que sea para decirle que me dejen salir y alertar a kloe que se aleje de ese hombre, claro si antes no le ha hecho algo.

Dios mío, ojalá y esté bien mi amiga - rezo mentalmente por que sea así.

De pronto se escuchan pisadas de varias personas que se aproximan  más a la zona donde estoy.

Que sean guardia, que sean guardias, que sean guardias- rezo mentalmente mientras las pisadas se escuchan más sonoras.

Hasta que veo la larga capa de uno de los hombres que se mueve agraciadamente  sobre sus hombros; toda esperanza desaparece al ver a klanformin tan impecable con su vestimenta oscura, junto a él estan dos muchachos pero por la poca luz que emana las antorchas no puedo identificar sus rostros, dejo escapar un suspiro cansado antes de mirar sus ojos tan vacíos y poco vivaces cargados de enojo.

- Este es el castigo por levantarme la voz, tienes suerte de no haberte pegado tan fuerte- dice el en tono muy frio tanto que me estremese.

- ¿Qué hora es y donde esta mi sirvienta?- ignoro sus palabras y le pregunto descaradamente el paradero de mi amiga.

Ella no merece estos tratos, solo yo puedo- mi parte más pesimista sale a la luz cubriendo todo mi lado racional.

- No debería hablarme de esa manera señorita sahara, yo soy la autoridad y usted no es más  que una malcridad - dice en tono brusco.
La ira y rabia se incrusta momentáneamente en todo mi cuerpo pero a la vez un miedo aterrador por klanformin; me da miedo levantar la voz y saltar con unas cuantas palabras inapropiadas, aunque me mantengo al margen, no vaya hacer que me golpee de nuevo, así que  optó por bajar la mirada rendirme como suele suceder en estos casos.

- así es como tocara educarla señorita sahara a punta de castigos- dice serio.

Aunque me duela en el alma sentirme otra vez miserable no puedo huir de nuestro compromiso, es esto o sentir la ira de mi padre al saber que no soy digna de este hombre. No, prefiero esto, estar condenada a esto.

- Te dejare tres días aquí enserrada para que aprendas y seas una esposa educada- dice él, de golpe alzo los ojos incredula por lo que ha dicho. ¿!TRES DÍAS AQUÍ!? esta loco de remate.

- por favor no me deje aquí sola- solloso bajando la mirada a mis manos temblorosas- tres dias- ahogó un gemido de solo pensarlo.

- no sea llorona señorita sahara, solo son tres dias que estará meditando y cambiando de actitud en ese lapso de tiempo, además recibirá comida con la cuál sostenerse. Luego me dará las gracias por ese pequeño favor- dice volteando la mirada para que no lo vea pero aún así veo en sus ojos una chispa pequeña de compasion y mi corazon se agita como caballo desvocado. ¿Ha considerado mi alimentación? ¿se suponia que no debia comer? La idea de pasar hambre por mucho tiempo me hace templar.

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