A regocijarse, ¿o no?

31 7 0
                                    

10 días después

Hoy es día de paga wiiiiiiiiii, ajaja bueno, nos pagan la quincena, eso explica porque todos estamos muy alegres. Ya cuando termine la jornada laboral de hoy nos pagarán, veo que muchos empleados ya están planeando alguna reunión con sus amigos. Pero, ¿no deberían estar trabajando? Pff ya que, solo déjenlos ser.

Más que por la paga, estoy feliz de que gracias a mi esfuerzo y de todos mis subordinados en ventas terminamos mi proyecto. El que halla pasado noches enteras sin dormir o renunciar a cualquier tipo de hobby solo me hace sentir aún más orgullosa, valió la pena.

Haciendo los labores de siempre el tiempo se me pasa volando y en menos de que me diera cuenta ya todos estaban en recepción cobrando.

Hago mi fila como debe de ser, Rafaela me dice que me cole detrás de ella ya que yo era la última en la fila y ella ya estaba solo a tres personas de recepción. Pero yo le digo que no y espero mi turno.

Me la paso viendo uno que otro archivo en la tablet con su bella funda para distraerme mientras espero y ya cuando estaba cara a cara con la recepcionista de la nada todos aplauden.

-¿Y ahora qué pasa? ¿a quién debo de aplaudir?-cuestiono totalmente confundida y les sigo la corriente aplaudiendo yo también .

-A ti, tontita ¿qué no te diste cuenta?-me responde Rafaela haciendo que voltee hacia donde estaba ella y así dándome cuenta que todos los trabajadores me estaban rodeando.

-¿Y ahora qué hice? El que sea la última en la fila no significa que he llegado tarde o que no me interesa la paga-pregunto más que intrigada.

-No has visto las gráficas ¿no es así?-me dice Julián

-No-contesto como haciendo otra pregunta.

-Todo ha salido mejor de lo que esperamos, Miranda, las ventas han subido como la espuma y todo gracias a ti-Me responde Mariano para luego abrazarme por la espalda.

-Otro aplauso para ella-vienen esas serias palabras del señor Jason.

-Ah no, por favor, yo sólo di una idea y si no fuera por todos los de área de ventas ni siquiera hubiéramos empezado-contesto aludida

-Jefe perdónale, es muy modesta-dice Mariano sin dejar de abrazarme el cuello estando detrás de mí.

-Dijo que la volvieran a aplaudir ¿qué están esperando?-pregunta un accionista que solo Dios sabe de donde salió

-No hace falta y si me disculpan voy a ... -respondo volteando hacia la recepcionista.

-Sí hace falta-dice Gian... el señor Kifari que también venía hacia acá.

Y así todos vuelven a aplaudirme, la verdad en vez de sentirme halagada sólo me siento avergonzada y espero pacientemente que se detengan y que Mariano me suelte.

Cobro y después todos me dan la mano felicitándome y yo muy cordial les agradezco.

Veo como todos se van, y me dirijo a mi oficina a guardar mis cosas para irme y noto que alguien sigue ahí parado como tonto mientras todos ya están rumbo a sus casas.

-¿Sucede algo?-le pregunto-Será mejor que nos vayamos retirando, sí me disculpa me voy a mi oficina, con permiso.

Siempre soy la única tarada que se queda, me demoro una eternidad en solo ordenar y acomodar mis cosas para irme y no sé por qué.

Cuando por fin termino tuve la desfachatez de dejar la puerta abierta y ¡oh! sorpresa, sigue aquí. V-e-t-e

-Felicidades y muchas gracias por hacer que gastar millones en una empresa desconocida totalmente haya valido la pena-me contesta cuando me dirigía a la puerta.

ERROR (Pausada)Where stories live. Discover now