68. Amor

2.9K 328 106
                                    

Alex dejó su celular en el sillón, apagó el televisor y se dirigió a la puerta trasera que daba al patio de su casa.

Afuera, en el patio de su casa, estaba Frank en traje, de pie y sonriéndole.

Detrás de él había una pequeña mesa redonda con un mantel blanco, velas y dos platos de macarrones con queso.

Al menor se le formó una sonrisa mientras se encaminaba hacia su pareja.

- ¿Cocinaste esto tu solo? – Preguntó burlón, Alex.

- Sí. – Respondió altaneramente el otro. Los dos callaron unos segundos. – Bueno, tal vez Eva me ayudó un poco.

- ¿Enserio?

- Bueno, tal vez me ayudó bastante.

- Frank...

- ¡Bien! ¡Tal vez ella me hizo la cena!

El menor río ante la incompetencia de su novio en la cocina. Se puso en puntillas de pie junto sus labios en un suave beso.

- Aun así esto es un lindo detalle de tu parte, Frankie – Alagó el menor de forma melosa, cosa que no acostumbraba a hacer.

Los dos fueron hacia la mesa y se sentaron, se miraron una vez más con la típica sonrisa de enamorados en sus rostros y comenzaron a comer.

- Yo solo digo que Peppa parece un pene por la forma de su cabeza, ¡no puede ser que no lo veas, Alex! – Le dijo Frank al menor, ya que los dos estaban discutiendo sobre la cabeza de Peppa.

- Pues yo digo que parece un elefante, tú dices eso porque eres un pervertido. – Atacó Alex, riendo.

Ahora que Frank lo pensaba, amaba su risa. No, no solo eso, amaba todo de él. Amaba las pequeñas arrugas que se formaban en sus ojos cada vez que se reía; amaba que por culpa de su estatura tenga que ponerse de puntitas de pie para besarlo; amaba su tan sexy y besable cuello; amaba su rara y hermosa risa, que según Rubén, era risa de castor; sus ojos; la pequeña barba que siempre se dejaba, hasta amaba el tono blanquecino de su piel. Amaba absolutamente todo de su pequeño. Sería capaz de dar la vida por él, y aun así no se arrepentiría de nada.

Frank estaba perdido en amor por Alex.

Y Alex estaba perdido en amor por Frank.

Llegó el momento que estaba preparando, enserio estaba nervioso, temía que él otro se arrepintiera y se vaya, dejándolo solo y triste. Pero Alex no era así, y no tenía que echarse para atrás en este momento.

Vio su bolsillo, nervioso, ahí se encontraba el regalo que le daría a su novio.

Cuando terminaron la cena, Frank se armó de valor para sacar aquel pequeño objeto de su bolsillo y dejarlo sobre la mesa, frente a Alex.

El menor miró sorprendido el objeto que segundos antes su pareja había colocado en la mesa.

Era una pequeña caja, negra, nada más.

Levantó su vista un segundo para ver a Frank, quien le hacía señas para que abriera la caja, se le notaba en la cara que estaba nervioso y algo sudado, Alex rió en sus adentros.

Agarró la caja con manos torpes y lenta, muy dolorosa y lentamente empezó a abrir la caja.

Frank no podía desesperarse más por la lentitud del menor.

Alex abrió completamente la caja, no podía creer lo que había en ella. Un anillo, en ella había un anillo, de oro.

Abrió los ojos como platos y abrió la boca levemente, para dirigir su vista hacia Frank, otra vez.

El mayor lo miró nervioso, tenía que hacer la pregunta.

- Amm...Y-yo... Alex, sé que llevamos un año de pareja y n-no es que quiera ir t-tan rápido, pero es que... Llegué a la conclusión de que amo cada detalle de ti. Amo tu sonrisa, tu personalidad borde, los lunares en cada parte de tu cuerpo, amo tus ojos. – Tartamudeó, tomó la mano de su pequeño, dispuesto a hacer lo que había planeado ya hace meses. – Alex, cariño, ¿quisieras casarte conmigo?

--------------------------------------------------

Ya, ya paren diciendo que hoy, me dan miedo :'v

Ay tienen sus capítulos mushashas xd

~ Retrasada Mental ~ :3

Mensajes || STAXXBY ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora