Naruto: Un viaje al futuro. [Reeditando]

¡Por fin!

-Tía Sakura... ¡Ven rápido!- gritó desesperadamente Boruto.

-¿Qué pasa?

-Sarada de pronto sé puso más palida, su respiración disminuyó.. ¿Se va a morir?- Boruto sentía cómo las lágrimas se juntaban en sus ojos, pues su mejor amiga y a parte de ser la chica que más amaba, estaba desapareciendo.

-Boruto... Necesitó qué salgas de aquí ahora.- Sakura trató de Sacar a Boruto de las cortinas que dividían el cuarto y la cama de Sarada, pero fue imposible, él no quería irse.- Sasuke, necesitó que saques a Boruto de aquí ahora.

Sasuke entró y sacó al pequeño Uzumaki, pues Sakura necesitaba hacer todos los chequeos a Sarada para verificar que todo estuviera en orden.

-Bien Sarada... Aquí vamos.- Temperatura, presión, pulso, respiración, dilatación de pupilas. Todo estaba en perfecto orden, su respiración había disminuido pero todo estaba bien, los ritmos cardíacos en excelente estado... Sólo su brillo iba desapareciendo cada vez más y con ello, era más difícil para Sakura recordarla.- Mejórate pronto pequeña.

Las horas pasaban, Sakura se mantenía al lado de Sarada para observaciones y Boruto esperaba impacientemente afuera. Todo lo tenía harto, ¿porqué el mini tío Sasuke y la mini tía Sakura no arreglaban sus problemas y todo volvía a la normalidad?

Sakura salió para informar como estaba, después de unas cuántas horas en observación no había cambios. Boruto podía regresar a su lado, talvez hablándole podría recuperarse un poco.

-Adelante Boruto... Cuida de ella.- Sakura le sonrió y él sólo asintió para regresar al lado de su amiga.

Boruto la observaba, conectada a esos aparatos, a esos tubos.. Ella no era Sarada, ella era una maquina.

-Sarada... Sara-teme... Yo se que puede que me escuches o puede que no, pero ojalá si lo hagas.- Un nudo enorme se formaba en su garganta y dudaba mucho en poder seguir hablando.- ¿Recuerdas la primera vez que nos vimos? Cómo me odiaste-ttebasa, aunque solo éramos unos niños de apenas dos años eras muy inteligente. ¿Recuerdas mi cumpleaños número cinco? Hiciste un berrinche enorme porqué yo apague las velitas y tú no. ¡Oh! ¿Y la vez de la piscina? ¿Cuándo Himawari se estaba ahogando y tú la enseñaste a nadar? Eres excelente nadadora.

Boruto recordaba todas aquellas cosas con mucha nostalgia, pues su mejor amiga estaba perdiendo la batalla y el lo sabía muy bien. De algo estaba seguro, aún así fueran cinco minutos los que le quedaran, los disfrutaría al máximo todo por ella.

-El primer día de la académia es algo que no puedo olvidar, lloraste tanto por que el niño extraño de cabello blanco que al tiempo se volvió nuestro compañero Mitsuki se había sentado junto a mí y no lo habías hecho tú. ¿Te acuerdas por qué nos empezamos a odiar? Yo sí, todo fue por qué soy tan estúpido que siempre quería llamar la atención y ganarte en todo, eso hizo que comenzaramos a ser rivales y...

-Por eso te enamoraste de ella.

-Tío Sasuke...- Boruto se sorprendió, pues Sasuke estaba parado frente a ellos y esté ni cuenta se había dado- ¿Escuchaste todo lo que dije?

-La mayor parte, aunque no me arrepiento de haberlo hecho.- Boruto se ruborizó y agachó su mirada, pues esa parte cálida no la conocía nadie.- No debe darte vergüenza, tal vez y Sarada este escuchándote y eso haga que ella pueda volver más rápido.

-¿Tú lo crees tío Sasuke?

-Sí, muchas veces hablandole a la persona querida aunque está no nos escuche o nos hable, reacciona lentamente.- Boruto dirigió su mirada hacía la inconciente Sarada.- No pierdas la fé Boruto, continúa con lo que hacías.