"Inocente Amor"

Capítulo 9: "No puedo estar sin ti"

La bella jovencita pelinegra se levanto consternada de su cama, salió de su habitación y bajo hasta la oficina de su padre, abrió la puerta sin tocar olvidándose de sus buenas costumbres y vio a su padre con profundo dolor en sus ojos.

¿Padre, que paso con Gokú? dijo la bella princesa con profundo dolor en su voz.

¿Gokú?, ¡ah¡, debe ser ese pobre joven que se creía con algún derecho sobre ti. Se quedo donde se debe, dijo el rey.

Padre no debiste traerme sin que yo me despidiera de él, él ha sido muy bueno conmigo, me salvo, me ha cuidado todo este tiempo, dijo la bella princesa sollozando.

Hija, fue mejor así, esa gente poco civilizada porque uno es amable con ellos luego se siente con derechos, dijo el rey.

No padre, yo tenía que hablar con él, yo....., decía la bella princesa sollozando.

Hija, olvídate de esa mala experiencia, mañana te vas con Bulma a la capital, allá empezaras una nueva vida, conocerás gente de nuestra clase, dijo el rey dando por culminada la conversación saliendo de su oficina, mientras la bella pelinegra lloraba amargamente de impotencia.

Gokú, ¡perdóname, te falle, jamás volveremos a estar juntos¡ pensaba la jovencita pelinegra mientras lloraba amargamente.

Montaña Paoz:

Un joven de cabello alborotado miraba la noche caer, mientras pensaba "no puedo estar sin ti", mientras unas gruesas lágrimas rodaban por sus mejillas.

Al día siguiente: "Fri-pan"

¿Qué tienes Milk?, pensé que estarías feliz de verme, dijo la peli azul.

Si me da gusto verte, dijo al bella princesa abrazándose a su amiga, mientras unas gruesas lágrimas brotaban por sus mejillas.

Milk, vine por ti, separe una vacante para ti en la universidad, dijo la peli azul.

¡Gracias¡ dijo sin ánimos la bella princesa.

¿Qué te paso en este tiempo?, dijo preocupada la peli azul.

Me enamore, me enamore de un muchacho maravilloso pero mi padre no quiere que lo vuelva a ver, dijo la pelinegra sollozando.

¿Cómo que te enamoraste?, ¿no anduviste perdida?, dijo la joven peli azul.

Sí, pero el joven que me salvo y me cuido, es del que te hablo, no sé si podre vivir sin él, dijo la bella princesa.

Claro que podrás, en la capital hay chicos guapísimos, ya verás que allí te olvidaras de él, dijo la peli azul.

¡No Bulma¡ no quiero olvidarme de él, en cuanto pueda volveré a buscarlo y pedirle perdón por lo que mi padre le haiga dicho, dijo la bella princesa.

Está bien Milk, pero ahora acomodemos tu maleta, porque nos vamos a la capital, dijo la peli azul preocupada por la actitud de su amiga.

Montaña Paoz:

El joven de cabello alborotado había ido a la tumba de su abuelito llevándole flores.

¡Abuelito¡ ¿qué hago?, la extraño, no puedo vivir sin ella y lo único que sé es que vive en un pueblo llamado Fri-pan en un castillo, decía el jovencito.

En eso gruesas gotas de lluvia empezaron a caer.

Sería bueno ir por ella, pensaba el jovencito, mientras las gotas de lluvia mojaban su rostro, confundiéndose con sus lágrimas.

Fri-pan:

Un gigantesco rey se encontraba en los jardines del castillo junto a una pelinegra y una peli azul.

¡Cuídense mucho¡ decía el gigantesco rey.

Tu también cuídate padrino, dijo Bulma abrazando al rey.

¿Y tu hija, no piensas despedirte?, dijo el rey viendo a una entristecida princesa.

Hasta pronto padre, te llamare cuando llegue, dijo la princesa abrazando a su padre.

Ambas jóvenes subieron al helicóptero, propiedad de la familia Brief y partieron a la gran capital.

Horas después: "Mansión Brief"

¡Bienvenida querida¡ decía una mujer rubia abrazando a la princesa.

¡Gracias señora¡ dijo la pelinegra.

Mamá vamos a instalarnos, dijo la peli azul.

Está bien hija, dijo la mujer rubia.

¿Bulma puedes prestarme el teléfono?, dijo la pelinegra.

Si, amiga, llama a mi padrino, para que no se preocupe, dijo la peli azul, subiendo a su habitación.

La pelinegra aviso a su padre de su llegada a la capital y luego subió a la que sería su habitación el tiempo que permanecería en la capital para empezar a desempacar su maleta e instalarse en la misma, mientras un profundo sentimiento de nostalgia se incrementaba en su corazón.

Montaña Paoz:

El atractivo jovencito de cabello alborotado se encontraba mirando la laguna en la que paso tantos bellos momentos junto a su amada Milk, mientras un pensamiento se le vino a la mente.

No puedo seguir así, no puedo estar sin ti, iré a buscarte para traerte de regreso conmigo, yo se que tu no querías irte, yo lo sé, pensaba el jovencito, mientras una ligera sonrisa se le formaba en su rostro, se paró de donde se encontraba sentado y regreso lo más rápido que pudo a su cabaña, busco en unos cajones de una vieja mesita de noche y encontró unos papeles doblados, los abrió y empezó a tratar de entender unos viejos mapas que alguna vez su abuelito le hizo, cuando trataba de enseñarle como llegar al pueblo más cercano.

Doblo los papeles, los guardo en los bolsillos de su pantalón, cogió un poco de frutas una pequeña botella de agua, su espada y salió de su pequeña cabaña, con un solo pensamiento: ¡volveremos a estar juntos mi bonita¡.