Eh, tranquila.

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Llevaba como 3 horas ahí metida, con los profes comiendome la cabeza, que si bla bla bla. Cuando acabé lengua fuí a la cafetería, cogí una bandeja con la comida y me fuí directa a mi mesa, mi mesa con Ken y los demás. Por sorpresa mía no había ningun asiento para mí. Genial, ahora todos estaban enfadados conmigo, me dirigí a la mesa vacía de el fondo. Comencé a comer un poco, y cuando levanté la vista pude ver a Louis derecho a mí, pero pasó por la mesa de Ken y alguno de ellos le puso el pie para que cayera al suelo. Todo el mundo se reía de el, yo me levanté y fuí corriendo a el, le ayudé a levantarse y quitarse la comida que llevaba por la cara. Le cogí por un brazo y lo llevé a mi mesa.

-Gra-gracias. - dijo sacudiendose la camiseta.

-No es nada, tienes que aprender a no cruzarte en el camino de ellos. - dije seria.

-Lección aprendida, ¿tengo en la cara? - dijo señalandose.

-Si, ahí. - le señalé pero no se encontrba la mancha, me senté a su lado y le ayudé.

-Me haces cosquillas. - dijo y reimos.

Volví a sentarme enfrente de el, acabamos de comer, y no parabamos de hablar, por muy empollón que fuera me hacía reir. Al fondo de la cafetería ví a Ken acercandose a la mesa.

-Que pasa parejita. - dijo mirandonos.

-No somos pareja. - dije levantandome.

-Ya claro, ¿que? ¿te has hecho pupita? - dijo haciendole burlas a Louis.

-Dejale en paz. - dije empujandole.

-Eh, tranquila. Lauren, has cambiado, no eres la misma, ¿que coño te ha echo ese rubio? ¿Tanto te ha echo para que te ajuntes con frikis? - dijo Ken.

-Soy la misma, Niall no me ha echo nada, solo me ha hecho recapacitar, nada más. Y me he dado cuenta de como eres. - mientras que hablaba yo, el empezó ha hacerle cosas a Louis. -Que te pares joder. - dije empujandole hasta que se cayó al suelo.

-Te enterarás Lauren, lo harás. -dijo corriendo.

Me senté con Louis, el solo me miraba, yo miraba a la mesa y las lágrimas comenzaban a salir por mis ojos de nuevo. Salí corriendo de la cafetería hasta llegar al patio trasero, nunca había gente, y yo me sentía libre. Me senté encima de la mesa de ping pong y saqué un cigarro de mi bolsillo, lo encendí y le dí una fuerte calada. Estuve como media hora, sola, llorando y fumando. Hasta que noté que alguien entraba al patio y se ponía a mi lado. Giré para verle de reojo. Él me sonrió, yo le devolví la sonrisa.

-¿Estás bien pequeña? - dijo Louis.

-No, ¿para qué mentirte? No estoy bien, estoy jodida. - dije.

Last first kiss.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora