Niall no dijo nada, solo me rodeó con su brazo y me estrujó contra el besando mi frente, luego me dio la mano entrelazandola con la mia. Estábamos a dos metros de la puerta, tenía miedo, muchísimo miedo, apreté de Niall más fuerte haciéndole daño, pero el no se inmutó, solo me susurró "Tranquila pequeña, no te van a tocar." Dos, tres pasos y estábamos fuera, Ken se le fue la sonrisa al ver que salía con Niall, Harry cambió la cara, yo seguía a Niall y el no iba hacia el coche, si no que hacia Harry, se plantó en frente de el.
-Harry, ¿era tu gran amor y ahora le vienes a pegar? - rió- Que sarcástico, ¿no? Eres un cobarde. Vuelve a tocarle un pelo y serás tu quien te quedes sin rizos. - se giró Niall hacia los demás. - Y lo mismo os digo a vosotros.
Con la amenaza que les hizo Niall, salieron corriendo, pero un "Niall no estará siempre contigo" se dejó caer en el aire, cuando los perdí de vista a lo lejos miré a Niall y le abracé.
-Ya está, Lauren, se han ido, tranquila. - dijo acercandome más a el.
-Pero... dijo que volverán. - dije muy asustada.
-Shht, no les hagas caso, voy a estar contigo siempre, y ahora te llevaré a casa, te quedarás ahí con el cerrojo puesto, y yo iré a matar a Louis y descuartizarlo.
Reí.- Va en serio, Lauren. - se puso serio.
-No, eh, te quiero. - dije abrazandole.
Me llevó a casa y se quedó a cenar conmigo.
(...)
Pasó un mes de aquella semana de mierda, seguía sola, bueno con Niall, el me defendía y nadie se metía con el, su padre era el policia jefe. Bueno, pues las amenazas no cesaron, encontraba notas en mi taquilla de "Niall no estará contigo ese día." "No te librarás, puta." "Estás sola por algo, muerete." Y más cosas que no quiero recordar, por que comenzaría a llorar y ese no es el plan. Voy de camino a una pizzería en el auto de Niall, el no sabe nada de las amenazas, ni quiero que lo sepa.
Este mes han pasado, además de eso, más cosas, como que ahora Louis y Eleanor están juntos, la primera vez que los vi el mundo se me vino abajo, yo aún le quería, el me engañó, pero a decir verdad se le veía súper feliz con ella, siempre andaban juntos, cuando el la miraba se le veía un brillo en los ojos que yo nunca vi, la primera vez que los vi juntos me dieron ganas de partirle la cara, pero me quedé quieta, viendo la sonrisa de el, viéndole feliz, como me hubiera gustado verle conmigo.
A Harry no le volví a ver, pero a decir verdad no quería volver a ver en mi vida, no quería saber nada de el.
-Babe, estás muy callada. - dijo Niall quitándome de mis pensamientos.
-No, solo que estaba pensando. - dije intentado sonreír.
-¿Estás segura que quieres ir a la pizzería? ¿No quieres nada mejor para tu cumpleaños? - dijo.
Sí , hoy era mi cumpleaños.- Sí, como los viejos tiempos, solo que sin mis padres y contigo.
-Está bien. Tú mandas cumpleañera.
Llegamos al estacionamiento, no habían a penas coches, raro ya que era domingo por la tarde. Estacionó justo en la puerta y me ayudó a bajar.
Una chica nos abrió la puerta y nos acompañó hasta la mesa, luego cada uno pidió una pizza, yo de atún y el de cuatro quesos. La chica no le quitaba ojo a Niall, era guapa, alta, morena, ojos azules, y Niall estaba loquito por ella.
-Te ha molado, eh. - reí.
-No, no. - se puso rojo.
-Niall, quiero darte las gracias por todo, por defenderme, por estar ahí, y quiero pedirte perdón por no haber confiado cuando me distes la oportunidad. Siento ser una tonta, haber cambiado, y que te preocupes por mi, no quiero que me tengas como una carga. No quiero que te preocupes por mi, solo quiero que seas feliz, que aún estés conmigo pero que encuentres a una chica que te quiera. - Sonreí.
-Cuando tenga que buscar a una chica lo aré, de mientras voy a estar contigo, ¿si? A demás no eres ninguna carga, eres mi hermana de diferente sangre. - sonrió. - Lauren, disculpame tengo que ir al baño.
-Yo iré a fumarme un cigarro. - me levanté y el hizo una mueca, pero yo le sonreí.
Cogí el paquete de tabaco y el mechero y fui hacia la salida, me puse en el muro de la puerta trasera, apoyada y me lo encendí.
Estaba contenta, sabia que Niall nunca me dejaría tirada, nunca me intentaría pegar, ni nada. Solo me controlaría, me apoyaría y me defendería como un hermano mayor.
Estaba en mis cosas, mis pensamientos cuando Ken apareció, también estaban sus secuaces.
-Te dije que no siempre estaría Niall. -dijo Ken.
-Te equivocas, está dentro. -dije intentando ir al restaurante.
-Dentro está Sam, no le dejará salir, lo sabes. -me cogió de la muñeca volteandome hasta el. - Eres nuestra, Lauren.
HOLAAAAAAA, AHORA 'RAYITA' SERÁ LAUREN, SERÁ MÁS FÁCIL DE LEER.
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