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El martes íbamos camino al aeropuerto en una camioneta donde cabíamos todos, en otra iban nuestras cosas, yo estaba escuchando música en el celular, distraída - pequeña dhampir ¿estás bien? - asentí
- ¿por qué la pregunta? -
- tu aura esta extraña, tienes la oscuridad de siempre pero ahora donde había otros colores es completamente blanca - me miro serio
- ¿eso es bueno no? - dije sin que realmente me importara
- bueno, si estuviera acompañada de otros colores pero parece casi transparente, no sé qué tan normal sea -
- pues yo me siento bien - dije encogiéndome de hombros
- ¿Segura? - Lissa preguntó al notarme tan indiferente 'terminaste con Dimitri y parece que no te importa' -
- estoy segura Liss y es porque realmente no me importa - sonreí antes de volver a "feeling good" en la version de Michael Bublé. Aprovechando que ahora sí tendría una habitación propia desactivaría el brazalete porque la descarga emocional sería muy grande pues lo había mantenido desde el sábado que lo hice, mire mi celular, tenía un mensaje de Liam 'te voy a encontrar' rodé los ojos y le conteste 'inténtalo'. Llegamos al aeropuerto, Tasha Ozera estaba ahí, esperándonos - Tasha ¿qué haces aquí? - pregunté
- iré con ustedes a Rusia - sonrío con superioridad mientras Lissa miraba molesta a Christian y a Dimitri
- y ¿por qué no te reuniste con nosotros en Rusia? -
- llevo una semana aquí, así que me pareció bien hacer el viaje con ustedes ¿estás de acuerdo? - me encogí de hombros
- me da lo mismo, al parecer a algunos se les olvida que no estamos de vacaciones pero eso lo hablaré con mi abuela y Abe cuando pueda - dije mirando a Dimitri - ya somos muchos - entre ignorando al resto.
El viaje duraría 35 horas con dos escalas aún así era privado, las miradas de Lissa y Adrian estaban al orden del día, también Dimitri me miraba, dejaba de hacerlo solo cuando volteaba a sonreírle a Tasha. Me quede dormida al poco tiempo para entrar en un sueño espiritual - Alistair ¿no conoces los celulares? -
- ¿acaso no es un mejor método? - no conteste - tu aura esta extraña, no denota ninguna emoción ni estado ¿ha sucedido algo? -
- nada que te importe ¿a qué debo esta visita? - se acercó a mí - ¿y tus lamebotas? -
- esta visita es privada -
- ya ¿qué deseas tío abuelo? - por primera vez lo tome desprevenido, esto pasaría para la posterioridad
- así que ya lo sabes, bien deseo obtener las almas que tienes tu -
- eso no se puede - sonreí - me perteneces a mi, son parte de mi herencia -
- aún puedes unirte a nosotros - dio otro paso a mi - es tu mejor opción, asegurarías tu vida -
- no - dije sin pensarlo
- ¿por qué? ¿Por qué no quieres traicionar a tu amada familia? -
- tengo lealtad Alistair y porque deseo destrozar a tus dos lacayos restantes -
- con esa aura y esas palabras suenas como un strigoi - lo mire aburrida - no me mal entiendas, me gusta y después de ver cómo dejaste a Stefan, deseo ver que más puedes hacer pero no permitiré que toques a mi nieta -
- es verdad Richelle es tu nieta - sonreí - bueno tu sirviente, ¿es lo único que deseabas? porque tu conversación me aburre -
- haré que desaparezca esa sonrisa fastidiosa de tu rostro y de los demás que sigan a tu abuela - bostece
- sí sí sí... como quieras ahora déjame dormir -
- eres una niña excepcional, no sé que hayas hecho pero me sorprende, no eres tan débil como imaginaba -
- digamos que soy más inteligente que tu -
- terminaras uniéndote a nosotros Rose, lo sé porque he preparado algo para ti -
- ¿en serio? a menos que sea una propuesta digna de tomarse en cuenta no veo que me puedas hacer correr a tu lado -
- ya lo veremos - desapareció.
Desperté después de muchas horas, mientras el resto dormía, estaba adolorida completamente del viaje - al fin despiertas - Christian estaba asomado hacia mi lugar - eres la que más a dormido en este viaje-
- todos están dormidos - le dije señalando lo obvio
- tú te dormiste desde que comenzó el vuelo y faltan dos horas para llegar - me había despertado en pequeños ratos pero volvía a dormir - ¿de verdad estás bien? - preguntó con genuina preocupación - esto, lo de mi tía no sabía que vendría, Abe le dijo dónde estábamos -
- no te ofendas pero sí somos muchos ya en este viaje y Abe no tiene derecho a decidir sobre él, lo siento pero tu tía no podrá continuar aquí durante mucho tiempo más -
- entiendo - miro a Dimitri - debe ser incómodo para ti-
- ¿qué? ¿Qué Belikov me haya visto la cara de imbecil? no realmente, es algo que sucedería tarde o temprano, con excepción de mi madre, Grace - aclare pues él no solía escucharme llamarla así - todas las demás Hathaway hemos hecho malas elecciones con respecto a los hombres - sonreí - es como una maldición -  lo pensé mejor - aunque en este caso puede que él haya tomado la decisión correcta - mire a mi camarada.
                                                            (...)
Bajamos del avión, tomamos otra camioneta, todos íbamos ahí, Tasha se sentó en el asiento de atrás con Dimitri, Demir iba manejando y Scarlet iba de copiloto, los demás íbamos dispersos en el resto de asiento, mi abuela marco
- hola su majestad - conteste tranquila - justo estaba pensando en ti abuela- sentimos un golpe en la camioneta dado por otra sin embargo esta siguió su camino cuando nos detuvimos, el celular se cayó cuando Demir frenó - Lissa toma la llamada - sentí nauseas - chicos hay strigoi aquí - les dije, Demir trató de avanzar mas la camioneta estaba estancada con algo - Adrian, intenta arrancarla - le dije al ver unos strigoi salir de entre los árboles, Demir descendió del vehículo, Scarlet también estaba lista para todo y justo cuando yo iba a hacerlo Dimitri me detuvo el paso
- quédate aquí - me burle de él - hablo en serio - un strigoi lo tomo del cuello justo en ese momento y yo no le avise, aprovechando la distracción que generaba tener a un hombre tan grande como Dimitri, le lance una llama al rostro, quemando incluso parte del cabello de mi camarada, lo soltó y este aprovechó para estacarlo, deje de prestarle atención y regrese a la batalla, dos strigoi me tomaron por las brazos, no tenían mucho tiempo de haber sido despertados, los jale a ambos haciendo que chocarán, nunca perdí mi sonrisa en él proceso, como si fuera de lo más divertido, en cuanto me libere de ellos estaque al más nuevo, el otro me tiro a la nieve haciendo que chocará con el lado frontal de la camioneta, me moví de ahí tirándolo a él del mismo modo en que lo hizo conmigo, sin perder tiempo lo estaque. Mire al rededor, Dimitri terminaba con dos, Scarlet con uno y Demir tenía a tres encima, corrí hacia este quitándole una amenaza, era un chico joven, no tendría ni los quince años pero como todo strigoi era muy fuerte, sobre todo por el tiempo que tenía de conversión que era bastante al notar el tono de la piel, este me tomó por los hombros levantándome como cualquier cosa, coloque mis manos en sus brazos quemándolo poco a poco
- ¡bruja! - me grito
- lo dice el de los ojos rojos - levante las cejas, corrí saltando encima de él quemándole es rostro pero me baje antes - así no es divertido - tome la estaca y comencé a pelear sin magia hasta que lo estaque - sip, no fue divertido - mire a los guardianes que terminaban con lo último, Adrian seguía sin poder sacar la camioneta hasta que Dimitri y Demir le ayudaron, cuando me subí, Lissa me miraba como sí fuera un bicho raro - ¿sucede algo? -
- tú no te alteraste ni un poco - miraba a mi alrededor - ¿Rose qué hiciste? -
- nada, tal vez voy muy bien en mi control, con todas las clases de Dimitri seguro soy una experta - sonrío y ya no dijo más pero su preocupación estaba ahí
Llegamos a la casa que Abe rento para nosotros - bueno el lugar al menos es decente- entre a la casa, era mucho más grande que la otra, según Abe había dicho tenía ocho habitaciones con baños propios, subí con mi maleta - ¡pido la más grande! - les grite, entre a una de ellas, la cama era king size, con una colcha blanca, bonita, tenía dos mesitas de noche, en cada una de ella una lámpara, las cortinas hacían juego con el resto de la habitación, un sofá al lado de la ventana y una alfombra terminaban la decoración, me acosté sin sacar mis cosas pues no pensaba pasar muchos días aquí. Tocaron la puerta - ¡a menos que sea importante no estoy! - grite, volvieron a tocar - adelante - dije, Dimitri entro serio - ¿pasa algo? - pregunté sin interés real
- tu actitud, eso pasa - se sentó en la cama
- no entiendo, deberías hablar de una vez porque tengo sueño -
- fuiste grosera con Tasha antes de subir al avión y te lanzas a una batalla como si nada, ni siquiera me advertiste del strigoi que tenía atrás ¿qué te sucede? -
- no me pasa nada, hice lo necesario para vencer a los strigoi, a demás te defendí - lo mire seria- si no te gusta puedes irte con ella cuando quieras -
- Por poco me quemas el rostro, Roza te conozco y sé que no eres así - me coloco las manos en mi hombro -si esto es por lo que pasó con nosotros debes saber que...-
- nada, no tengo que saber nada y tampoco tiene que ver, no te confundas Dimitri a mí no me interesa lo que pasó entre nosotros ni ahora ni nunca - mis palabras le dolieron, sus ojos se tornaron vidriosos
- todos estamos preocupados por ti - sonreí
- no deberían, jamás me he sentido mejor, ahora ve a tirarte a tu novia igual y eso le ayuda a no pensar en mis palabras y a ti a no meterte en lo que no te importa guardián -
- no me iré hasta que me digas qué pasa - pasó su mano por mi mejilla - esta no es mi Roza - me reí fuerte
- jamás he sido tu Roza, ahora vete que necesito dormir - se acercó en un intento de besarme, yo no me moví, sentí sus labios y me quedé estática mirándolo - ¿lo ves? No soy tu Roza - salió sin verme, suspire poniendo seguro a la puerta, eran las dos de la mañana pero todos estaban cansados así que seguro estarían listos para dormir un rato, coloque una capa de aire, volví a suspirar.
- catalena - al inicio no sentí nada, pero poco a poco una serie de emociones mezcladas comenzaron a llenarme, jamás había sentido esto era como si me ahogara y no hubiese pensamiento racional que me calmara, mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas, mis sollozos se volvieron gritos desesperados que ya no manejaba yo, lo que sentí cuando vi morir a mis tíos, cuando me torturaron, el dolor de la indiferencia de Janine, las palabras que dijo Mikhail a Sonya cuando pensó que no lo escuchaba en el funeral, la llegada de mis padres ausentes, el dolor de perder a Dimitri, todo llego golpeando lenta y tortuosamente en mi, sentía que quería desaparecer del mundo, grite mil veces tratando de calmar el dolor pero no sucedió, ya sabía que esto pasaría porque las emociones y sentimientos no desaparecen solo se acumulan para estallar, poco a poco un dolor se extendió por mi pecho, mis ojos ardían y mi cuerpo temblaba, no sabía de dónde salían esas lagrimas ni esa cantidad pero estaban ahí, sentí furia, tristeza, miedo, locura, alegría e histeria, todo en un mismo instante, volví a gritar entre lágrimas mis ojos ya no podían más y mi alma menos, cuando por fin se descargo todo lo que tenía dentro quedo un vacío en mi pecho, algo que no podía llenar con nada. Me tumbe en la cama intentando compensar el hueco abrazando una almohada pero no funcionaba. Mi celular comenzó a sonar,
no quería responder porque los temblores seguían ahí, mire la hora, ya eran las siete de la mañana, creo que la descarga emocional fue más larga de lo que imagine, entre a ducharme, mi cuerpo se sentía raro, pesado así como mis ojos, después de salir me vestí con ropa abrigada pues tenía mucho frío y el guardapolvo de Dimitri ya no estaba disponible para mí - catalena - dije, el dolor se fue pero ese hueco seguía ahí, había cosas que ni siquiera ese hechizo podía socavar. Baje a la sala donde todos ya estaban
- Rose, te guardamos algo para comer - Lissa me miraba preocupada - fuimos a un 24hrs - sonrío - compre muchas donas de chocolate -
- gracias - sonreí secamente 'tienes los ojos hinchados' me dijo por el vínculo, la mire sonriendo - quiero ir a buscar el alma de Irina -
- ¿no sería mejor descansar un poco? - Demir preguntó - el vuelo fue pesado y después de esa lucha... - asentí
- entonces iremos mañana Demir, tú irás conmigo - me sentía cansada de una manera muy mala, el desgaste emocional estaba ahí - le avisaré a mi abuela del plan - entre en el comedor, me prepare un café americano mientras hablaba con mi abuela, ella seguía preguntando si estaba bien y la respuesta era no pero era mejor a que todos vieran un derrumbe emocional, me mantendría firme hasta donde pudiera. Iba caminando hacia el patio cuando vi a Dimitri con Tasha ella lo tenía abrazado por el cuello y lo peor... Lo peor era que se estaban besando, me quedé inmóvil observando cual masoquista, de nuevo no sentí nada, Dimitri noto mi presencia y yo me aleje, él no me siguió ni nada se quedo con ella. Tome las llaves de uno de los coches y salí a conducir, no era lo más inteligente pero me daba igual, cuando arranque escuche a Lissa gritarme pero la ignore, conduje por un camino desolado sin detenerme. Este hechizo me estaba costando mucho emocionalmente, cuando lo tenía activado no sentía nada, ahora tenía un hueco pero mis emociones no salían a flote, el problema estuvo en el tiempo en que lo tuve activado, ahora ya no importaría porque lo desactivaría todas las noches y ya no sería tan fuerte. Dimitri era un maldito que pensaba en todo menos en mi, ya era hora de que esto se acabara, aunque ocultos mis sentimientos estaban deshechos por la situación. Estuve manejando un buen rato después regrese a la casa, todos estaban en la sala, entre ante las miradas de reproche - Rose ¿dónde estabas? Te llamé por el vínculo - me miro
- te escuche las cien veces Liss pero olvide el celular aquí - dije distraída - voy a practicar un rato - mientras venia de regreso pensé en algo, mi estado de animo podía influir en mis poderes, si yo deseaba liberar lo del brazalete que mejor que ocuparlo en mi beneficio, salí al patio trasero - catalena - antes del derrumbe emocional comencé - levanta la fuerza y pasión de fuego, danza con la belleza y tranquilidad del agua, elévate en el esplendor de la sabiduría en el aire, tráeme el equilibro y fortaleza de la tierra- mis emociones golpearon con una fuerza descomunal, los elementos se alzaron a mi al rededor como nunca había sucedido, sentí como el dolor y la furia se apoderaban de todo, la última vez había durado apenas tres minutos pero ahora me sentía capaz de mantenerlo de por vida, levante más los brazos haciendo que creciera aún más, sé que fueron más de veinte minutos antes de que mi fuerza flaqueará, los deje caer - catalena - alcance a decir antes de golpear contra el suelo.

Academia de Vampiros - EL LIBRO OSCUROOù les histoires vivent. Découvrez maintenant