Diario de un suicida ®

Cariño.

Yo te escucharía, lo haría toda la noche si fuera necesarioYo estaría ahí para ti, yo no te mentiría, no soy como el resto, y creo que has podido darte cuenta de ello, yo sí pasaría mis ratos libres a tu lado, intentaría ayudarte en todo lo posible, te abrazaría hasta que uno de los dos se quedase dormido después de que me contases qué es lo que te atormenta para poder ayudarte o simplemente después de pasar horas hablando, yo sí te acompañaría en tus paseos nocturnos, en tus noches admirando las estrellas, de verdad que lo haría. Pero... ¿es lo que tú quieres? ¿Quieres que esté a tu lado? Has apartado de ti a cada persona que se te ha acercado, has huído lo más lejos posible, te has escondido, te has escondido a ti y a tus miedos, a tus pensamientos, a todo lo que te forma lo has encerrado bajo llave y finalmente has lanzado esa llave al mar donde nadie pudiese encontrarla. Al principio no lo entendía, no entendía por qué hacías eso, por qué escondías tu ser de esa forma en la que nadie fuese capaz de encontrar la llave que tú misma lánzaste al mar, pero después me di cuenta de todo, después lo entendí, te entendí, tienes miedo, no sé exactamente de qué, pero tienes miedo, miedo de que te hieran, de que te abandonen, de que te conozcan, de hacer daño, miedo, ese miedo que algunos dicen que no existe es el causante de que tu vida sea ahora así. Pero puedes cambiarlo, puedes vencer esos miedos, puedes encontrar la llave si realmente pones empeño en buscarla, tú la tiraste, tú eres la única capaz de encontrar su ubicación, la única capaz de abrirlo todo de nuevo, de empezar de nuevo, pero sabes, dicen que nunca viene mal un poco de ayuda, dicen que las cosas son más fáciles de esa forma, que no se hace tan duro, el mar es muy grande, así que dime, ¿quieres que esté a tu lado? ¿quieres encontrar la llave? Porque si la respuesta es que sí, te prometo que no me apartaré de ti hasta que lo consigamos.