Fallen Angels ©

Capitulo; 1

Peter se sintió cayendo y cayendo, parecía no haber fin de eso. El viento se arremolinaba alrededor de su pequeño cuerpo, sus pequeñas extremidades girando y agitándose mientras su frágil figura seguía descendiendo.

Luego de caer y caer, Peter se estrello contra el suelo. El suelo debajo de el era frió y áspero, raspando la piel delicada del pobre ángel, lo que causaba una muecas de dolor por el malestar. Justo cuando Peter esta por levantarse escucho un ruido fuerte y luego sintió el peor dolor de su vida.

Luego cayo de nuevo al suelo, Peter escuchaba voces y gritos a su alrededor. Se deslizo en la inconsciencia y un solo pensamiento
"La vida en la tierra es un verdadero asco"

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-Señor, juro que no tengo ni idea de donde vino, Yo solo conducía y de la nada cayo en la calle

-Ethan los chicos no caen mágicamente en la calle, Solo por que lo atropellaste no puedes dar excusas

-Pero no lo hago de verdad, cayo de la nada en el medio de la calle

Peter abrió bruscamente adaptándose a su nuevo entorno, Mira hacia abajo y nota que esta en una cama con unas matas rojas y una cantidad exagerada de almohadas de color dorado, las paredes de la habitación eran rojas decoradas con unos extravagantes cuadros de pinturas, que parecían ser reales. El chico parpadeo varias veces para poderse adaptar ya que a tierra es mas oscura que el cielo, por lo que le tomo mas tiempo acostumbrarse.

-Oh, has despertado- dijo una voz desde un rincón de la habitación.

Peter rápidamente gira su cabeza y ve a dos hombres parado detrás de el. Uno de los dos hombre era bajo y no tan delgado pero tampoco era gordo era un poco rellenito, tenia una mirada de culpa en su hermosa cara y un pelo liso brillante. El otro hombre era un poco mas alto que el primero, lucia tranquilo y con una cara amable, tenia el pelo rizado y se le notaba que esta recién cortado por la nuca. Peter les sonrió a los dos hombres. Ambos eran casi tan hermosos como los ángeles que solía ver, cosa que lo puso mas cómodo.

-Hola- dijo el hombre de pelo rizado, su voz era áspera y ronca, muy diferente a la dulce y melodiosa voz de Peter -¿Estas bien?

Peter intento asentir con la cabeza pero solo sintió un doro punzante en el cráneo, E solo grito y se agarro la cabeza haciendo un hermoso puchero. El hombre pelo rizado solo se rió un poco.

-Ta vez tu cabeza solo duela un poco, ya que fuiste golpeado con un auto- explico el hombre tranquilamente- ¿Recuerdas tu nombre?

-Peter- gimió el chico, todavía con la cabeza palpitante- Peter Ángel Forester

-Ha, esta bien, ¿Peter puedes decirnos cuantos años tienes o donde vives? -pregunto el chico de pelo liso. -Peter solo negó con la cabeza haciendo que su puchero creciera aun mas.

-¿Por que no? ¿No te acuerdas?- le volvió a preguntar el hombre al chico. Y Peter negó con la cabeza una vez mas.

-Yo no te puedo decir mi edad, por que eres un extraño- Dijo Peter con un tono de seguridad, el no sabia mucho sobre la vida de los humanos, pero cada vez que los observaba, veía a las madres decirles a sus hijos que no le dieran información personal a los extraños. El ex ángel pensó que eso era un conducta humana

-Oh... bueno- dijo el hombre pelo liso, tratando de no reir por las respuesta del tierno chico -Mi nombre es Carlos Idol. tengo 30 años y trabajo como abogado personal. Y este chico de aquí es Ethan Dredor y es un chófer, y fue la persona que te atropello. Ambos trabajamos para Emil Mondarnos, el dueño de la casa donde te encuentras en este momento.