: epilogue : parte uno :

5.6K 407 49
                                    

PARTE UNO 

Fue en Londres donde se encontraron otra vez. 

Ese día, Luke asistió a un festival de música independiente, porque desde que había salido con Calum que apreciaba esa música y había arrastrado a Lena y Ashton para que lo acompañen. Calum y yo fuimos juntos, porque cada tanto salíamos a divertirnos como en los viejos tiempos. 

Habían pasado siete meses desde que no se supo nada de Luke Hemmings, porque de un día para el otro anuncio que se retiraría del fútbol por un año o quizás más, y eso en la vida de un deportista es muchísimo. Significa perderse temporadas, dinero e incluso entrenamiento. 

De Calum tampoco se supo mucho. Logró su trabajo soñado, pero cuando estuvo en Nueva York por una semana, descubrió que le hacía falta la calidez que la fría Londres le entregaba y volvió a trabajar para Callaway diez días después. Él pidió no tener los trabajos principales, hacer columnas y reportajes pequeños; nadie supo el por qué de su retroceso inesperado, pues tampoco quería destacarse en el mundo del periodismo. 

De repente, los focos de las noticias se centraron en distintas hazañas. Guerras, arte, avances tecnológicos, política... y ya nadie le tomó importancia al hecho que Luke Hemmings y Calum Hood parecían haber desaparecido de la faz de la tierra. 

La diferencia entre ellos dos, es que de alguna u otra forma Calum seguía vivo ante el mundo, pero nadie sabía el paradero de Luke, ni siquiera Lena Hemmings, quien en una entrevista dijo que no veía a su hermano hacía un tiempo, entre otras declaraciones. Vale aclarar que Lena fue entrevistada porque la historia de la separación del clan Hemmings salió a la luz y todo el mundo se enteró del supuesto asesinato de Lisa Hemmings a Lenin Connor, lo que le costó a Lisa su reputación y varios llamados al juzgado. La noticia se publicó en el diario de Callaway, un miércoles, dos semanas después de la desaparición de Luke. No tenía ningún crédito adjudicado, pero Calum juró y perjuró, no solo a mí sino también a Lena, que él no tenía nada que ver y que no había enviado la información. 

El escándalo de los Hemmings también fue trascendental en estos meses; muchas personas decían que la razón por la que Luke había huido era esa, se había enterado que su hermana era una asesina y no quería enfrentarse a los medios. Otros decían que necesitaba descanso. Y la mayor parte de la gente creía que estaba en rehabilitación por drogas. Fueron muchas las versiones, las hipótesis, sobre el porqué de su partida y cuál sería su paradero. Algunos hasta se atrevieron a decir que Lisa lo había matado a él también. 

Pero Lisa no mató a nadie. Al menos, eso fue lo que declaró las seis veces que fue llamada al juzgado, lo que le dijo a Calum al teléfono y lo que comentó a los medios. Ella dijo que conocía a Lenin, que le hubiera gustado verlo triunfar en el fútbol y que tal vez su suicidio hubiese sido producto de la presión que sentía en el momento. Muchas personas no aguantan más y piensan que es la mejor opción, dijo como respuesta al diario de Callaway. 

Poco a poco, el tema fue dejándose de lado hasta que nadie habló más ni de Luke, ni de Lena, ni de Lisa, ni de Lenin Connor. Claro, eso fue hasta que Luke salió de las cavernas y fue fotografiado en la noche, en un festival independiente de las afueras de Londres. 

Calum y yo estábamos disfrutando de la música de Little Comets, cantando a los gritos Adultery porque era la mejor canción que ellos tenían y la disfrutábamos mucho. A los dos nos recordaba cuando nos conocimos, porque estaba de moda en ese momento. Bailamos un poco y él volteó para un lado, entonces lo vio. Y él estaba mirando hacia donde estábamos. 

Era imposible no distinguir la figura de Luke entre la multitud. Era demasiado alto, rubio -aunque tenía una gorra hacia atrás en la cabeza- y nos miraba también. Ashton tenía a Lena subida sobre sus hombros y el mundo se paralizó entonces.

No se paralizó para mí, claramente. Pero sí para Calum, quien dejó de cantar tan emocionado como segundos antes estaba haciendo y se quedó boquiabierto. Luke le sonrió un poco, como si hubiese esperado este momento por mucho tiempo. 

El ambiente se volvió como una mezcla entre incómodo y cómodo, algo que a ti te incomoda pero que sabes que al resto no. Como cuando estás fuera de lugar, como cuando ves la película desde afuera por más que eres parte. Entonces capté todo, preguntándome como no me había dado cuenta antes. 

En los ojos de Luke había amor. 

No me parecía raro entonces el porqué de su ataque de celos en la boda, ni porqué parecía complacer siempre a Calum. Y supuse que la ruptura entre ellos dos debió ser la razón por la que desapareció. Supuse también que él había venido con la esperanza de verlo, porque sino no habría razón para venir a este tipo de festivales. 

— ¿Estás bien? —le pregunté a Calum y él solamente asintió con la cabeza. 

No habíamos llegado a la mitad de la canción cuando Luke le tocó la espalda a Ashton y comenzó a caminar hacia donde estábamos. Su paso era confiado y decidido, y observé a Calum temblar un poco. 

En todo el tiempo que lo conocía, nunca me había fijado en detalles como estos. Su respiración se agitó un poco más de lo normal, pese a la adrenalina por el lugar en el que estábamos y suspiró con pesadez justo cuando Luke se plantó en frente.

Y lo siguiente que hizo fue abrazarlo. Lo abrazó y cerró los ojos, y pude entender que todo lo que había ocurrido en estos meses era por amor, ese amor que uno no sabe como demostrar pero que eventualmente termina mostrándolo.

No dije nada porque no quería interrumpir el momento, y agradecí que Luke no me hubiese visto porque me di la vuelta y me fui.



Fue en Londres, también, donde Luke había estado viviendo. Descubrí eso casi por casualidad, porque tres días después de su reencuentro casual con Calum, fui a Camden Town y terminé en Black Cap con un grupo de viejos amigos que no veía hace tiempo. Me llamo la atención ver a Luke ahí, solo. Me acerqué y le pregunté cómo estaba. 

  — Exclusiva a ti —me dijo—. ¿Periodista, verdad? Vaya, tengo mala experiencia con ellos.

Su aliento emanaba alcohol y supe, por el bartender, que había estado bebiendo whisky escocés por un rato largo. También me dijo que él vivía en Camden ahora, en un apartamento pequeño a media cuadra de allí y que ellos esperaban hasta pasadas las seis de la mañana para llevarlo; me preguntaron si podía acercarlo a su casa y me dieron la copia de su llave. Aparentemente, me reconocían de algún lado. Les dije que no tenía problema y acerqué a Luke a su casa. 

Vale aclarar que el trayecto hasta allí no fue cómodo, pero el tiempo pasó rápido. 

La verdad es que su apartamento era bastante pequeño, diría que incluso más que mi anterior departamento. No tenía nada, ni siquiera televisión. Era un lugar lleno de cajas, y estas cajas tenían revistas y periódicos; la cocina era bastante vieja  y su habitación solo tenía una cama y un espejo. Me llevó a pensar qué motivaría a una persona con semejantes ganancias a dejar de lado todo su estilo de vida lujoso y pasar a esto... y realmente no hallé respuestas. No es algo que yo haría. 

Después de dejar —a duras penas— a Luke en su cama, observé con mayor dedicación su casa y descubrí que, en la mesa de la cocina, había una carta a medio escribir. Decía así: 

Querido Calum: 

Hace tres días nos vimos y no puedo dejar de pensar en ti. No pienso con claridad y todo en mi mente es borroso porque ya no sé como hacer para estar lejos, ni como he hecho en este tiempo. No sé escribir estas cosas y me resulta complicado, no tengo las mismas habilidades que tú para esto, pero solo quiero que sepas que 

Y la carta terminaba ahí. Y yo nunca pude saber que quería decirle Luke a Calum. 

Ni tampoco cómo continuó la historia. 


adivinen ustedes quien lo escribió. 

me veo obligada a cortarlo aquí pero no se preocupen, hay parte dos. 

besitos 

aldana xx 

players; cake.Where stories live. Discover now