Capítulo 10 cocinando en dúo

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Esa mañana me levante algo hambrienta, tenía un hambre colosal y me sentía como una bestia insaciable así que decidí hacer algo bien en esta casa y ayudar a Amy (La cual urgentemente me necesitaba) a limpiar toda la casa.

Ella y yo estábamos atareadas con tanto trabajo que hacer, la loba de pelaje lila tenía la lengua de fuera, parecía que había corrido un maratón completo en cambio yo no estaba cansada o algo así, simplemente hacia lo que tenía que hacer, o tal vez ella estaba agotada por todo es santo trabajo que ella realizaba diariamente durante su estancia en mi humilde hogar.

Mientras limpiaba tranquilamente no podía evitar fantasear con los ojos abiertos, me podía imaginar cómo sería mi futuro si lo compartiera con un macho, tomando por ejemplo a mí amigo el perro.

Una vida "normal", me imaginaba a mí y a mí amado esposo sobre una suave cama con sabanas de seda mirándonos mutuamente muy enamorados para luego ser interrumpidos por dos cachorros que entusiasmados subían por la cama meneando sus colitas y ladrando por un poco de atención. Sonaba bien ¿verdad?; del otro lado estaba mi vida si la compartiera con una hembra, aunque sinceramente me imaginaba lo mismo, despertar, ver a mi amada y luego los cachorros trepando por la cama.

_ Oye Perry._ Exclamo sacándome de mis pensamientos._ ¿Me ayudas a cocinar?

_ Bueno, si tú quieres._ Suspire quitándome el sudor de la frente._ Voy a lavarme las patas.

_Te espero._ Dijo dirigiéndose a la cocina y sacando una hoya enorme.

Mientras me lavaba las patas no podía dejar de pensar en mis raras fantasías que acaba de tener, simplemente no comprendía nada ¿Por qué esas radicales ideas se me venían a la mente?

Suspire y baje las escaleras, Amy ya tenía todo listo para cocinar y simplemente me estaba esperando.

_ ¿Qué vamos a cocinar?

_ Espagueti._ Amy me mostro un empaque de fideos.

_Bueno.

Estaba cortando los tomates, las cebollas y el ajo para la salsa, mientras que Amy había dejado la pasta hirviendo, suspire y estuve concentrada en mi simple tarea. El simple hecho de estar aún lado de ella me incomodaba mucho, me sentía muy rara y no tenía ni idea del porqué, tal vez ya era hora de considerar mi teoría del enamoramiento.

De lo que estaba segura en ese entonces era que no era lesbiana y que para nada me gustaba la simple idea de serlo, por un lado Amy era bisexual pero según ella "Le encantan las mujeres" así que si había posibilidades de que le gustara pero ¿Qué había de mí? Yo tenía posibilidades de amar a Amy. Con los trece años de vida que poseía y mi razonamiento natural de zorro pude deducir que....

Estoy confundida.

Una vez que terminamos de preparar todo nos dispusimos a cenar. Quería preguntar y calmar mis dudas sobre todo lo que sentía en ese momento pero no era algo que me quería tomar a la ligera como una plática casual o una cosa así porque hablar de sexualidad o de romanticismo con una persona que te hace dudar no es para nada sencillo o un tema ligero sin repercusión alguna.

Solo me quede callada...

Hasta que ella rompió el silencio con una sencilla pregunta...

_ Oye, has actuado muy extraño._ Dijo embolsando una sonrisa picara._ ¿Acaso te gusta alguien? 



Mi Estúpida Niñera ( EDITANDO)Where stories live. Discover now