Capítulo 14

57 7 0
                                    

Victor.

Íbamos camino al restaurante, no sabía porqué iba él caminando detrás de mi, pero, sentí que me sujetó del brazo, voltee a verlo, se había detenido y tenía los ojos cerrados. Era inevitable, me acercaba a él cada vez más, hasta que... lo besé. En eso abrió los ojos.

Jase.

1, 2, 3, 4, 5. Y abrí los ojos, miré a Victor y sentí sus labios en los míos, me puse muy rojo, y él se separó. -ah- fue lo único que pude decir, y él se sonrojó. -Porqué hiciste eso?- preguntó. -Amm... Gemma me dijo que lo hiciera- dije. -Esa niña- murmuró. -Lo siento, no creí que te molestarías- dije, se acercó a mi y puso su mano en mi mejilla con su pulgar en mis labios. Me sentía nervioso. -Nunca dije que me molesté- dijo sonriendo y me volvió a besar. Poco a poco, me gustaba más ese beso, así que también le respondí, y comenzó a llover. -Volvamos a mi casa- dijo en mi oído.

Llegamos a su departamento y nos quitamos los zapatos, fuimos a su habitación y me recostó en la cama. -Victor- dije nervioso. -Qué pasa?- dijo sobre mi. -No lo sé... Nunca había hecho esto antes- -A que te refieres con eso?- -Bueno, es que...- -Aún eres virgen?- dijo y me sentía peor. Si le digo que si se reirá, y si le miento diciendo que no, quizás se moleste. -Emm...- -Entiendo, aún eres, y me gusta que estés lleno de sorpresas- dijo a mi oído. Besó mis labios otra vez y pasó a mi cuello. -Victor...- -No digas nada.... Jase- -Sii?- -Te quiero- me dijo al oído, me sonrojé y sonreí. -Yo también te quiero Victor- dije. Me siguió besando y lo abrazaba.

Victor.

Luego de un largo rato que hice el amor con él, se quedó dormido a mi lado. La luz de la luna entraba por la ventana, mis sentimientos hacia él fueron respondidos, también siente lo mismo que yo, y eso me hace muy feliz. Sólo que... Porqué Gemma le habría dicho que hiciera eso? Bueno, creo que no me puedo enojar con ella, ya que nos ayudó mucho, más bien, le estoy agradecido. No sé que vaya a pasar después de esto, pero me gustaría seguir al lado de Jase. Miré la hora en el reloj, y era media noche, así que decidí dormir también.

Our HistoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora