Capítulo 17

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Foxy debía aprender a tener algo más de cariño para darle a los demás. Y creía que gracias a ella podría aprender los actos de la palabra amable, pues poco amable había sido con sus propios amigos (Sin contar a los Toy).

Pero debían entenderlo. De vivir una buena vida con sus padres, sus abuelos, sus primos y tíos, a vivir encerrado entre cuatro paredes con sus amigos, los cuales eran su única familia de ahora en adelante; en el fondo, era un gran cambio.

Mangle había salido de la cueva pirata frotándose un ojo con el dorso de la mano. Había dormido fatal y estaba muerta de sueño. En esos momentos se arrepentía el no haber aceptado dormir en la cama del capitán. Fue a acercarse a Toy Bonnie para saludarlo, cuando Toy Freddy la cogió de los hombros y le hizo dar media vuelta, para que volviese por donde había vuelto.

—Oh no, Mangle. Tienes que ver algo que a partir de ahora te pertenecerá...— Le dijo el oso Toy, con un tono serio pero con un poco de diversión.

Ella, al estar medio adormilada y cansada, no comprendía nada. Por eso movió la cabeza hacia Toy Bonnie pedirle ayuda con la mirada. El conejo peliazul solamente se encogió de hombros.

Los Toys caminaron de nuevo hacia el pasillo que llevaba a las cuevas, especialmente a la Kid's Cove. Se pararon frente a la nueva cueva, la cual, desde fuera era igual que la Pirate Cove; es decir, unas cortinas impedían ver el interior de la cueva. Salvo que éstas cortinas eran de un tono rosado, con adornos en forma de estrellas, corazones y algunos puntitos al igual que la Pirate Cove.

—¿Qué hacemos aquí?— Preguntó Mangle algo confundida, mirando a sus compañeros.

—Tu cueva ya está terminada— Informó Toy Freddy, con una pequeña sonrisa.

El Capitán se acercó a las cortinas, con la intención de salir, pero unos murmuros que provenían de fuera de su cueva llamaron su atención, impidiendo que diese un paso más. Quedándose quieto, agudizó el oído, centrándose en la conversación.

—¿Ya?— Preguntó ella con ilusión, dando unas pequeñas palmadas de alegría.

A Toy Bonnie le encantaba verla tan ilusionada. Directamente le encantaba todo de ella, tanto su mentalidad algo infantil como su inocencia. Se había quedado embobado mirando a la animatrónica, y recibió con codazo de Toy Chica, la cual podía deducir qué era lo que le pasaba al peliazul con su amiga.

Mangle se acercó a la cueva y abrió las cortinas. Estaba con todos los juguetes listos para actuar. En el suelo se podía encontrar una alfombra (la cual ocupaba casi todo el principio de la cueva, donde jugarían los niños), aunque esta era un poco más gorda por si algún niño se caía no se hiciese daño. En la pared habían unas cajas (dos en la pared izquierda, y dos en la derecha) con decoraciones de animales, donde dentro habían juguetes y títeres que ella utilizaría. Al fondo, en la pared derecha habían una especie de armario incrustado en la pared con una mesita de noche al lado. El "armario" era de color rosa y decoraciones blancas. Y en frente, en la pared izquierda, dos cofres tipo pirata (uno más grande que otro), en los cuales podría guardar sus pertenencias.

Mangle estaba bastante impresionada y contenta. Le encantaba la cueva y como estaba decorada. Era bastante espaciosa, solo faltaba el elemento clave: la cama.

—Y... ¿Y dónde está la cama?— Preguntó un poco extrañada, mirando a su jefe.

Toy Freddy se acercó a lo que ella pensaba que sería un armario. Cogió una maneta y tiró de ella hacia abajo, dejando a la vista una cama grande.

—Es para que tengas más espacio dentro de la cueva. Así los niños no tocaran nada— Comentó Toy Freddy, cogiendo un borde de la cama y subiendo de nuevo la cama, dejando que se camuflase siendo un armario.

Mangle se acercó a la cama y bajó esta. Por suerte alcanzaba sin tener que ponerse de puntillas. Se dejó caer en la cama, soltando un suspiro de gusto.

—Me encanta...— Respondió la pelirrosa, cerrando los ojos unos segundos.

—Te dejaremos para que te acostumbres a la cueva— Prosiguió el oso, mirando a Toy Bonnie y a Toy Chica. Ellos asintieron y salieron de la cueva.

Menos Toy Bonnie, el cual se acercó a su amiga y se sentó sobre la cama, a su lado.

—Me gusta más que mi habitación. La mía es muy simple: una cama, una mesita de noche y un armario...

—-Es porque yo cuido a los niños aquí dentro— Respondió ella, incorporándose en la cama y sentándose a su lado.— Y tú... Tú solo tocas la guitarra. No pidas más— Dijo con un tono divertido, señalándolo. Le dio un suave toque en la nariz con el dedo índice, juguetona.

Toy Bonnie cogió sus manos, acariciando sus dedos con los pulgares.

—Al final, ¿actuarás hoy?— Le preguntó, mirando sus ojos.

Ella simplemente asintió, con una sonrisa en los labios.

—Entonces nos vemos después de la actuación— Prosiguió y se levantó, caminando hacia las cortinas rosadas.— Hasta luego, Mangle— Se despidió de ella, antes de marcharse.

Mangle movió la mano en señal de despedida y lo miró marcharse, con una sonrisa en los labios. Parecía que se le había ido el sueño de golpe. Se levantó de la cama, subiendo esta de nuevo a su sitio y se acercó a las cajas de juguetes, abriendo estas y mirando un poco los juguetes. Después se levantó y se acercó a los cofres piratas, los cuales seguramente serían solo para ella, para guardar maquillaje, cepillos, cosas importantes para ella, etcétera. Se acercó al cofre grande y abrió este. Pudo observar una tela blanca perfectamente doblada. Sacó ésta y abrió un poco los ojos al ver que era un tipo de gabardina pirata, solo que blanca con adornos rosas. Nunca había tenido tantas cosas. Ilusionada, se puso la gabardina, para después cerrar el cofre y acercarse a las cortinas.

En cambio, el Capitán escuchó toda la conversación entre Mangle y sus compañeros Toys (aunque no la de Toy Bonnie y Mangle). Como acto reflejo miró el sofá donde había estado durmiendo la pelirrosa las últimas noches y soltó un pequeño suspiro, pasándose la mano izquierda (la única que tenía, claramente) por el pelo, sacudiendo la cabeza después.

Iba a volver a quedarse solo, lo veía venir, y no tenía idea de cómo remediarlo.

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NO OS ACOSTUMBRÉIS A ESTAS ACTUALIZACIONES TAN SEGUIDAS.
Me sentía generosa hoy, así que aquí tenéis, un capítulo rico rico. (?)

Mangle ya tiene cueva y su propio sitio para dormir, y Foxy va a volver a quedarse solo. Uuuh.

Comenta lo que quieras que pase:
A) Que Foxy se haga el duro y haga como si no le importase.
B) Que Foxy vaya a ver a Mangle.
C) Sorpréndenos.

Vamos a ver que tal sale (?

Nos vemos en el próximo capítulo.~

PD: Para que entendáis como es la cama de Mangle, os dejo una foto de lo más similar. ;)

 ;)

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Mangled Girl [Foxangle]Where stories live. Discover now