9. Impulsos.

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El problema de ver una película en la noche recae en el simple hecho de cuanto has hecho durante el día. Si no has hecho mucho, por no decir nada, es muy probable que en realidad, después de haber visto una película, quieras ver otra porque no tienes sueño (además por estudio extraño que dice que la luz emitida en las pantallas en realidad hace que tu cerebro se despierte aún más); por otro lado, si has hecho muchas cosas, por mucho que te guste la película, comenzaras a quedarte dormido o dormida en cualquier momento.

Louis comprendía la situación en que se encontraba, más o menos. Charlie había estado trabajando desde muy temprano, aparte de ese manojo de emociones que había tenido, y la salida a la que se había visto forzada a hacer con él, y todo lo demás; era comprensible que ella estuviese tan cansada como para dormirse en esa escena e incluso antes.

La película estaba en esos momentos en la escena post-créditos, y Louis no se había percatado. Después de que Thor había tratado de sacar el Mjolnir, Charlotte había dejado caer su cabeza en el hombro de Louis repentinamente. A Louis casi le dio un ataque al corazón por el sorpresivo movimiento, pero entonces se dio cuenta de que era ella e intento no darle mucha importancia.

Honestamente, eso no resulto. Comenzó a preocuparse de que su hombro a lo mejor no era demasiado cómodo, que probablemente le dolería el cuello a Charlie y un montón de cosas más. No es que él estuviese realmente interesado en ella, por supuesto que no lo estaba, pero ella había hecho mucho, y estaba cansada, y él era el culpable de aquello. Si hubiese rechazado la propuesta de ver la película, si no hubiese pedido ayuda para buscar una carpeta, probablemente ella no estaría tan casada.

Louis se dio cuenta de que la película había terminado por completo cuando Netflix automáticamente le llevo a otra película. Entonces se dio cuenta de la realidad: eran cerca de las doce de la noche, Charlotte no daba señales de querer despertarse y el trasero ya le estaba doliendo.

Con mucho cuidado y lentamente, Louis deslizo una mano entre la mejilla de Charlie y su hombro y se movió hasta quedar en el piso, acomodando a Charlotte de manera que quedara recostada en el sofá. Sentado sobre sus talones, se dio cuenta de que su rostro quedaba a la misma altura que el de Charlotte. No se apartó, sin embargo, mas bien se acerco dos milímetros mas a ella. Luego tres.

Ella en realidad es bonita, pensaba Louis, mirándola fijamente. La luz de la pantalla le daba en el rostro, y sus pestañas se veian un poco mas largas. Louis se dio cuenta que las puntas de sus pestañas eran mucho mas delgadas, por eso a veces se veian mas cortas. Tenía un poco de pecas, tambien, muy pocas. 

Louis estaba aun mas cerca, y se encontró mirando sus labios. No muy gruesos o grandes, como esta de moda, pero estaban acorde a las proporciones de su rostro y en realidad se veian perfectos en ella. Sacudió su cabeza, y luego se levantó del piso, dejando salir un largo suspiro después.

Habían opciones: tomarla y llevarla a su habitación, dejarla dormir allí o simplemente despertarla y ya. La primera opción era la peor, eso estaba realmente prohibido (él no era ningun desquiciado, sabia que subir las escaleras con ella terminaría en una ida al hospital); la segunda en realidad era muy cruel y la tercera, que sonaba muy coherente (en realidad era la mejor) de alguna manera no le agradaba en absoluto.

Ojalá sus brazos fueran mas fuertes, pensó, levantandose del suelo. Él en realidad preferia llevarla a su habitacion. De cualquier manera, Louis se acerco  al futon de la sala y lo acomodó, colocando frazadas y cojines por todos lados, como si estuviese preparando la cama para un bebe o un niño pequeño que tiende a caer de la cama. Volvio a la sala donde Charlie dormia intentando no hacer ruido, casi de puntitas y rogando para que ninguna de las tablas del piso sonara. 

Dio un silencioso suspiro cuando llegó junto a Charlie, y lentamente se inclinó para tomarla. En realidad ella no pesaba tanto. O tal vez sus brazos no eran tan debiles como pensaba. Pero era mejor no pensar que era Hulk y asegurarse llevandola al futon y no caer por las escaleras intentando ser algun tipo de principe azul o algo asi. Lo que sea. Louis tampoco queria serlo. Él simplemente estaba ayudando a una chica, que era lo que siempre le habia enseñado (y que estaba arraigado a él por tener un monton de niñas a su alrededor) su madre. 

Con mucho cuidado, Louis acomodó a Charlie en el futon, asegurandose de que su cuello quedara bien ubicado y que sus manos no quedaran cruzadas en su pecho (superticiones, ya sabes). Le quitó los zapatos antes de taparla con las frazadas, y estuvo bastante tentado a acurrucarla como lo hacia con sus hermanas cuando eran mas pequeñas. 

Sin siquiera darse cuenta, otra vez estaba mirandola fijamente, y estudiando cada uno de los detalles de su rostro, pensando en lo linda que es y en todo eso. Los deseos de besarla volvieron, mucho mas intensos, aunque no menos controlables. 

¿Qué era lo que le sucedia? Charlotte era su enemiga, no alguien a quien quieres alegrar o besar. Todo esto de compartir lo estaba volviendo loco, en realidad. Tal vez solo era la confusion por la pelicula y haberla visto triste cuando ella siempre era alegre. De cualquier manera, no era necesario darle importancia. Ella era su enemiga, y así será hasta el final de los tiempo.

A pesar de sentirse así, se inclinó y le dio un beso en la frente, sintiendo su pecho contraido y un extraño cosquilleo en el estomago. Una vez se dio cuenta de la locura que habia cometido, se apresuró a apagar la luz y salio practicamente corriendo de la habitación.

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el capitulo es mucho mas corto que los demas, a pesar de que deseaba con todo mi corazón hacerlo un poco mejor. Whatever, dicen por ahí que a veces menos es más. (la ortografia no está revisada, lo siento)

Madre mia, habia olvidado lo tiernos que pueden llegar a ser los mangas shoujo o josei xD 




Piano Forte; l.t auWhere stories live. Discover now