La médico anestesista especialista en rescate y reanimación, Lauren Jauregui, ha decido comenzar una nueva etapa de su vida dejando atrás un oscuro pasado que sólo desea superar enfocándose en su trabajo en Alepo-Siria. En sus primeros días allí, y...
Zach Plec le miró de forma sorpresiva colgando rápidamente el antiguo teléfono que tenía en la mano derecha.
- Han pedido a un médico y a un enfermero para ir con la Unidad 00 hasta la salida de la ciudad por la zona norte. – Repitió el hombre. – La Dra. Cabello en el momento decidió que iría ella junto a Tony.
Tensando su mandíbula Lauren se movió de un lugar a otro cruzando la pequeña oficina del administrativo quien siguió con su preocupada expresión plasmada en el rostro.
- ¿Por qué no me han llamado? Yo tengo más experiencia en terreno. – Apuntó.
- Tú estabas en quirófano, y nadie podía reemplazarte en el momento... Camila tomó la decisión.
- ¡Pues no fue la correcta!... Se supone que ellos deberían haber vuelto aquí hace dos horas... ¡Dos horas!... ¿No te das cuenta en el peligro que se han metido? ¡Ni siquiera responden las putas radios!
El nerviosismo y miedo que invadían su pecho se habían instalado en el preciso momento en que Allyson Brooke entró a quirófano para informarle lo que estaba ocurriendo. Aquella mañana la ojiverde había estado a cargo de la anestesia de todas las cirugías de urgencias a cargo de Kirgyakos, sin ningún descanso entre ellas.
Cuando la enfermera le había explicado que Camila y Tony aún no volvían al hospital, y sus radios no respondían, Lauren había corrido escaleras abajo hasta la oficina donde Zach Plec ya estaba haciendo llamadas para dar con el paradero de ambos integrantes de la Unidad 00 que se suponía estaban acompañado con un grupo de White helmets designado.
- Hay que hacer algo... - Dijo nerviosa la ojiverde.
- He estado intentando comunicarme con alguno de los White helmets en terreno, pero nadie responde...
Intentando controlar su respiración la anestesista volvió a mirar el reloj de su muñeca detallando que aún quedaban algunas horas de luz, por lo menos aquello lo tenían a favor.
- Consigue una camioneta y yo misma iré hasta allá. – Ordenó Lauren.
- ¡¿Te has vuelto loca?! – Gritó Zach perdiendo la paciencia. – En primer lugar la jefa de la Unidad 00 es Camila, ahora quien está a cargo soy yo, y no voy a dejar que te vayas a la mitad del desierto sin saber qué está pasando...
Manteniéndose en silencio Lauren miró de forma desafiante al hombre de barba quien volvió a tomar el teléfono en su mano derecha para así marcar con furia los números en éste.
