Strangers in the night. (CAMREN)

Capítulo 26.

- Dra. Jauregui, por aquí. – Dijo la grave voz del White helmet.

Sus ojos esmeraldas apreciaron los últimos rayos del sol que dejaban en evidencia que el atardecer cubriría de un momento a otro a la ciudad. Por su nuca corría un sudor frío que se debía a todo lo que habían tenido que recorrer por aquella zona abandonada de la ciudad, los escombros sólo eran la prueba de que hacía algunos días aquel lugar había sido atacado por los constantes bombardeos aéreos.

- Hay algunas familias que sí se quedaron luego de los ataques... Por alguna razón los rebeldes volvieron y comenzaron a tirotear contra quienes se resistieron en no dejar sus antiguas casas. – Informó.

- ¿Hay víctimas fatales?

- Un par...

Ambos caminaron intentando no tropezar con todos los materiales que estaban por el lugar. Cuando finalmente la oscuridad les cubrió el White helmet prendió la linterna que llevaba en la mano iluminando así el suelo por donde se movían.

- ¿Hay alguna posibilidad de que los rebeldes sigan por aquí? – Lauren rompió el silencio.

- Quizás...

El tono de duda por parte del hombre de ojos oscuros hizo que su respiración se agitara frente al peligro que ambos se presentaban aquella noche. Sabía que siempre existía el riesgo de que algo les ocurriera cada vez que iban a terreno... Pero aquello era más que un simple trabajo para ella, era su vocación, lo que le hacía sentirse, en gran parte, viva.

- Sólo intentaremos encontrar a quienes necesiten con urgencia ayuda médica. – Comentó el hombre. – No podemos obligarles a ir al hospital con nosotros.

- Entiendo.

El murmullo de una voz llamó la atención de ambos que se miraron de re ojo para luego mantenerse estáticos en su lugar. La anestesista abrió sus ojos de par en par al ver cómo frente a ella aparecía un chico de no más de quince años con una herida cortante en la frente.

- ¿Médicos? – Dijo con miedo.

- Sí... Hemos venido a ayudar... ¿Estás solo? – Respondió el White helmet.

- No... Mi familia...

Lauren detalló la exhausta expresión en el rostro del joven sirio que se giró rápidamente para adentrarse en el marco de una puerta que estaba a unos metros de ellos.

- Intenta no llamar la atención. – Le dijo en voz baja el hombre.

Afirmando con la cabeza ambos se encaminaron para entrar en lo que parecía ser una pequeña casa. Sólo un par de velas iluminaba el lugar, el rostro de cuatro personas le miraron con curiosidad cuando ella dejó en el suelo el bolso que había llevado al hombro.

Un alto hombre de bigote se le acercó para hacerle un gesto con la cabeza en señal de saludo, la anestesista respondió de la misma forma.

- ¿Alguien está herido? – Preguntó Lauren.

- Mi mujer y mi hijo. – Respondió.

...

El sonido del monitor cardiaco de aquel paciente siguió llamando la atención de Camila quien turnaba sus ojos entre el aparato y la historia clínica que tenía entre sus manos.

- Tendré que llamar a Evan para que le haga un lavado quirúrgico al paciente, lo más rápido posible. – Le dijo a Ally.

- Le pediré a alguien que le vaya a buscar a quirófano ahora mismo.