capitulo 28

785 35 7
                                    

-¿De verdad tiraste a Dani de la cama?

-¡Fue sin querer!¡Lo juro!

-Si, claro, lo dices para quedar bien, ¡pobre Dani!

-¿Por qué no me crees? -¿y con ese puchero como me voy a resistir?

-Si te creo bobo.

Terminamos de comernos los helados. Él no paraba de contarme anécdotas de cuando eran pequeños pero sobre todo cosas vergonzosas sobre Dani. ¿Porque Dani jamás me contó que no le quitaron el pañal hasta los 8 años? Se fue haciendo de noche y llegamos a casa. Se despidió de mi, o más bien yo de él porque no tenía prisa por llegar a casa, y entre a casa. De nuevo sola. Visualicé la casa, ¿por que mamá nunca está? Siempre esta trabajando y todo es por mi culpa, si no me tuviera que alimentar a mi, no tendría que trabajar tanto. Si yo no estuviera Dani tendría mucho más tiempo libre para irse con chicas y Jesús, Jesús no jugaría conmigo. Por favor, ¿quien en su sano juicio se enamoraría de alguien como yo? Dicen que los suicidas son ángeles que han venido del cielo, y yo solo quiero volver.

Yo ya no sé si realmente soy feliz. En la calle es muy fácil reír, es muy fácil sonreír, pero cuando estás sola, en tu casa, en tu habitación, ahí ves todo de una manera muy distinta. Todos esos colores brillantes que se ven en la calle se convierten en grises y negros, sin brillo. Te ves sola, un estorbo, y no me gusta eso. Como era una costumbre ya subí a mi habitación a por esa amiga que no me abandonaba nunca y la puse sobre mi piel.

-Pensé que no volverías a hacerlo. -se escucho una voz a mis espaldas.

Y ahí rompí en llanto, un llanto silencioso. Les estaba fallando a todas y cada una de las personas cercanas a mi, pero esta es la manera en la que realmente me sentía bien.

Él vino por detrás y me abrazó, me abrazó fuerte, como solo el sabía hacerlo. Se separó un poco de mí y me tendió su mano.

-Dámela.

Agaché la cabeza y se la di. No me apetecía lada discutir. No vi que hizo, simplemente escuche volar algo por la ventana.

-La próxima vez por cada corte que te hagas tu me haré uno yo, porque en cada uno de ellos se refleja las veces que me has necesitado y yo no he estado para ti, ¿entendido?

Simplemente asentí. De repente sentí unos labios sobre los míos que me hicieron tumbarme en la cama pero sin despegarme de ellos. Se tumbó a mi lado y apoyé en su pecho y él me tocaba el pelo.

-Maria.

-Dime.

-No lo vuelvas a hacer por favor -noté una lágrima caer por su mejilla.

-No lo haré más -dije mientras se la quitaba.- pero tu no llores mas tampoco.

-Joder. Eres lo mejor de mi vida y no se hacerte feliz, no se que hacer para que te des cuenta de que aunque tu madre a penas este en casa tienes a Dani, tienes a Inma, me tienes a mi que quiero que sepas que voy a estar ahí siempre, pase lo que pase. Si algún día decides no hablarme más te seguiré esperando con los brazos abiertos a que vengas a refugiarte en mi. Te voy a cuidar como si de mi vida se tratase.

Creo que esta novela va a llevar a su final porque tengo algunas ideas para otra nueva y a penas puedo actualizar una como para actualizar dos. siento la hora que es pero es cuando he acabado el capítulo. Os quiero💖

Pd: podéis seguirme en twitter e instagram, en las dos me llamo @mariiagiil02_

Quien se enamore pierde (Gemeliers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora