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Nacu:

Y cumplo con mi promesa, yo no la estoy tocando- mis ojos se abrieron como platos y las lágrimas comenzaron a salir, me había engañado.......

Llorando, este animal me lleva hasta la sala de profesores, en completo silencio. Abre la puerta y, nada más pasar el umbral, me deja en el suelo, encontrándome con todos los profesores enfrente mía. Bajo la mirada, avergonzada, temerosa de lo que pasará. Alguien se acerca a mí y me da un pañuelo para que me seque las lágrimas. Lo acepto y le doy las gracias. Es una mujer, desnuda. Ella me sonríe y se aleja, colocándose junto con 3 chicas más, también desnudas. Creo que son las chicas orfanateadas que aún están aquí. Dejo de observarlas y veo que hay otra chica, una niña más joven que yo, sentada sobre uno de los profesores, desnuda. Ella me mira y sonríe tierna. No puedo creerme que esa pobre niña esté orfanateada... Y por un hombre tan mayor... El silencio desaparece cuando el señor Trein empieza a gritar como siempre

-Desu que haces con esa!?- todos me miran sin decir nada, relamiéndose los labios. Asustada doy un paso hacia atrás, pero mi orfanateador posa una de sus manos sobre mis caderas. Lo veo y este ni me mira, tiene la misma cara de póker que siempre pone ante los profesores

-La he traído porque os quería avisar de que...- me mira rápido y vuelve la vista al frente- La voy a orfanatear así que ni se os ocurra tocarla sin mi permiso

-Pero Desu, eso no es justo...- una leve voz surge desde una esquina del cuarto. Todos vemos hacia allí y nos encontramos a Luis, el cual habla con mi acompañante pero no separa la vista de mí.

-Lo siento amigo mío- Desu me aprieta contra él- Pero esta preciosidad será solo para mí, sorry- me coge de la barbilla y me besa ante todos, un beso apasionado que consigue sacarme los colores. La puerta detrás nuestra se abre y nos separamos. Entra el profesor Raimundo y me hielo al instante. Entra muy sonriente, mal vestido, y con sangre en las manos... Sangre de Nadya... Empiezo a llorar y el recién llegado se ríe

-Tranquila pequeña, no la he matado- sigue riéndose- solo me la he follado- se ríe aún más y algunos​ profesores le siguen. Salvo Desu, Luis y Marco, el profesor que tenía a la niña en su regazo, este le dice algo y la joven sale de la sala. Las risas finalmente cesan y Luis vuelve a hablar

-Desu somos amigos... -se acerca hacia nosotros, con los ojos clavados en los míos, sin ni siquiera pestañear. Yo aparto la mirada y veo al suelo, nerviosa y aún llorando, cojo el borde de mi camiseta, lo único que llevo salvo mis bragas. Mal pijama para un momento así... Se frena ante mí- Déjame probarla...- los ojos se me​ abren como platos y busco la mirada de Desu, este no me corresponde y solo ve a su "amigo"

-Tanto la deseas que eres capaz de pedírmela? A mí?- habla serio, tranquilo, con una sonrisa arrogante, como si fuera divertido

-Sí- lo veo y este sigue con la mirada en mí, precisamente sobre mis piernas desnudas. Las junto y bajo un poco más el bajo de la camiseta, lo que provoca que él se muerda el labio- Nunca te pido nada, siempre estoy cuando me necesitas- Desu me abraza más- Nos conocemos desde siempre, sabes que nunca te pediría algo así, pero ella...- aparto la mirada otra vez y Luis da un paso- Desu, amigo, déjamela solo una vez, por favor...- veo a mi "supuesto amo" y él solo sonríe y veo que​ asiente levemente

-Está bien- casi me desmayo de la impresión- puedes jugar con ella solo una vez- los ojos de Luis se agrandan y sonríe feliz mientras que mi cuerpo tiembla

El orfanato del castigo y el placer...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora