31

121 10 2
                                    

Silvia

Restriego la mancha de sangre del suelo, notando como poco a poco mis manos se van tiñendo de un color carmesí intenso. Froto fuerte la mancha aunque parece que este incrustada en el suelo de tal forma que no sale. Oigo como la puerta se abre, para después ver a Alex entrar en la cocina. Se agacha a mi lado, agarrando mis manos entre las suyas.

-Silvia, déjalo-Le miro viendo como esta tan sereno-No quiero que te hagas daño.

-¿Como puedes estar tan sereno después de haberlo matado?-Paso el dorso de mi mano por mi frente llevandome conmigo algunas gotitas de sangre que ha salpicado al cortarle el cuello.
-Será mejor que vayas a ducharte. Ya termino yo esto-Alex habla tranquilo y en su mirada puedo ver algo de remordimiento por lo que acabo de presenciar.-Después te lo explico, ¿Vale? Pero ahora ves a ducharte.

Me levanto del suelo para después caminar hasta las escaleras. Las subo lentamente, llegando al piso de arriba. Camino despacio hasta llegar al cuarto de baño de nuestra habitación, parandome frente al espejo.

-¿Que has hecho, Silvia? ¿Dónde te has metido?-Susurro viendo como pequeñas gotitas de sangre adornan mi rostro y parte de mi cuello.

Me desvisto rápidamente, metiendome en la ducha. Abro la llave del grifo, dejando que el agua caiga sobre mí, consiguiendo así que mis músculos se relajen.

Coloco una toalla alrededor de mi cuerpo, para después cepillar mi cabello mojado. Abro la puerta saliendo a la habitación a por ropa, encontrándome a Alex sentado encima de la cama.

-Pensé que te había pasado algo, llevas más de 1h ahí dentro.-Alex se levanta caminando hacia mi.

Me giro cogiendo una camiseta y unos pantalones holgados del armario. Alex me quita la ropa de las manos.

-Déjame a mi-Su voz suena como un susurro que hace que se ponga la piel se gallina.

Me hace girar mientras sus manos deshacen el nudo de la toalla dejándome desnuda delante de él. Se arrodilla delante mía, comenzando a vestirme.

-¿Porque haces esto?-Digo terminando de ponerme la camiseta.

-Aunque no lo creas yo si te quiero Silvia y... Puede que no haya sido muy buena persona desde que nos encontramos aquí, pero ahora quiero intentarlo.-Alex me mira a los ojos mientras habla.

-¿Porque lo hiciste?-Pregunto mirandole fijamente.

-Creeme que no quería que vieses eso, pero...

-Me refiero a porque me robaste-Alex baja su mirada al suelo.

-Estaba dolido porque preferias a ese médico antes que a mi.

-No. Según Miguel lleváis meses planeandolo. Y tu y yo nos encontramos un mes antes.

-Vale. Era mi forma de vengarme por la manera en la que me dejaste cuando acabamos el instituto.

-¿Robandome?-Mi voz cada vez va subiendo más de volumen.

-Si. Yo nunca he tenido nada, en cambio tu siempre tenias todo lo que querias. Era hora de que supieses lo que es no tener nada.

-¿Sabes que?-Alex me mira-Yo no me puedo casar con alguien que es capaz de robarme y engañarme después dejándome un dinero que me pertenece.-Me doy media vuelta pero su mano en mi muñeca me impide seguir caminando.

-Tu no vas a ir a ningún lado. Te vas a casar conmigo como acordamos.

-¡Pues ya no quiero!-digo encarandole, pero su mano impactando en mi mejilla hace que vuelva a ver en él, esa persona del principio. Esa persona a la que es mejor tener miedo.

Solamente túNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ