¿Qué tanto conoces sobre el bien y el mal?
Ángeles, demonios, arcángeles, espíritus y más; todos ellos se mezclan entre nosotros, pero de una manera sutil, casi imperceptibles para algunos, aunque demasiado evidentes para otros.
Existe una especie b...
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-¿Estás bien?- le pregunto mientras sus pupilas se mueven en toda las direcciones y con su mano intenta acomodar algunos mechones de su cabello.
-Yo... solo... pues tú... estabas muy agitado... y entonces... sudabas mucho y bueno... entonces te la quité... necesito un té. Mejor recupérate... descansa- diciendo esto sale deprisa de la habitación y cierra la puerta de golpe.
Me siento en la cama limpiando un poco el sudor de mi frente -se comportó bastante extraña, pero eso no es importante ahora, lo que me preocupa es que el mismo demonio Baal hubiese trasladado el alma de esta chica hasta el infierno. Mientras medito un poco tratando de predecir el próximo ataque, mi mirada se nubla y me mareo un poco.
-Estoy bastante cansado... será mejor que descanse- me recuesto nuevamente y sin darme cuenta mis ojos se cierran, caigo fácilmente en un sueño profundo.
Ahora veo mi mano sosteniendo a Amatista, por más fuerza que ejerzo en ella, su muñeca se desliza entre mis dedos y cae al vacío; sus ojos se cristalizan y sus labios se mueven "debes protegerlos de la traición".
Martes 10:40 pm
Despierto de inmediato y agitado, creo que han pasado algunas horas. Nuevamente esta pesadilla con ella... el único portador a quien no pude proteger y que era el más importante para mí. Definitivamente los demonios están recibiendo una ayuda muy poderosa.
Desde su muerte ella utiliza mis sueños para comunicarse, para dejarme mensajes que me ayuden a ejercer mejor mi labor, pero últimamente han sido más frecuentes. No es buena señal.
Aún permanezco acostado en la cama observando el techo decorado con muchas figuras geométricas sobrepuestas, pero al detallarlas descifro que se no son solo figuras, realmente se trata sellos protectores de magia blanca y proyección astral.
No debo pasar por alto la advertencia de Amatista, debo trata de averiguar qué sucede realmente. Me concentro y desdoblo nuevamente mi ser; voy ubicando a todos los portadores, uno por uno. Ámbar es la más cercana y se encuentra a salvo, luego sigue la chica que es compradora compulsiva... ahora hallo a Paolo; no está muy lejos de aquí y se encuentra bien... los demás están mucho más lejos; debo concretarme más. Al esforzarme un poco más, la encuentro, ¡Es Katherine! Está luchando con un enemigo muy poderoso. Ha creado un símbolo de luz protectora, pero éste se va desvaneciendo con su energía... el demonio extiende su mano hacia ella, creo que está tratando de persuadirla.
–Tienes más poder del que te imaginas y a nuestro lado lo desatarás-. Le dice mientras intenta atravesar la barrera.
-No lo hagas, sabes que no puedes confiar en ellos- intervengo y fortalezco su ritual de protección. La luz recobra su fuerza y estalla en energía, el demonio no retrocede a pesar del poder que emana del círculo. De inmediato la transporto de nuevo a su cuerpo, pero antes de esto el demonio le dice algo. No logro escucharle.
