CAPÍTULO 10 - Ámbar

23 2 0
                                    

Todo ha sido muy repentino, el ataque de los demonios sombra en mi casa; realmente su aliado debe conocer todos mis ritos para haber burlado los sellos de protección; pero no lograron acceder más que a una parte de ellos; es decir, que no pudieron...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Todo ha sido muy repentino, el ataque de los demonios sombra en mi casa; realmente su aliado debe conocer todos mis ritos para haber burlado los sellos de protección; pero no lograron acceder más que a una parte de ellos; es decir, que no pudieron romper todas mis protecciones.

La llegada de mi señor fue muy oportuna, aunque la presencia de esa chica enmascarada que le acompaña me inquieta bastante y a eso debo agregarle que también es un Arconte.

Siento algo húmedo y viscoso entrar en mi oído sacándome de mis pensamientos; cierro los ojos y respiro profundo para no explotar, pero siento como se sigue moviendo entro de mi oído, así que sin abrir los ojos lanzo un fuerte golpe a mi izquierda acertando justo en su estómago.

-Paolo, no vuelvas a hacer eso ¿Cuándo vas a madurar?- me responde con un respirar ahogado producto de impacto en su estómago.

-¿Por qué tienes que ser tan violenta? Solo era mi dedo- yace doblado abrazándose el cuello.

-¿Sí? Pero tu dedo untado de saliva, eras un asqueroso- suelta carcajadas ahogadas mientras se cubre con uno de sus brazos al ver que le intento acertar otro golpe.

Oye, esa chica no me agrada del todo; dime qué tipo de energía percibes en ella- le pregunto mientras fijo mi mirada en Ary, la chica Arconte.

-La chica tiene un gran poder, no solo espiritual, sino también mental. Es capaz de generar protecciones, no solo para ella, sino también para el Cardenal. Apuesto que Tiffa no es capaz de entrar en su mente- me explica en tono intelectual y algo egocéntrico.

-Ya veo, eso arruina mi plan de pedirle que lea su mente- presiono mis labios mientras los muevo de lado a lado como si eso me ayudara a pensar en un plan B.

-¿Por qué crees que el Cardenal quiso hablar solo con nuestro guardián?- me pregunta mientras analiza los gestos de ambos que conversan a unos metros de nosotros.

-No es solo con él, lo hará con todos nosotros; aunque pienso que inició con el Arconte por lo ocurrido con Amatista-

-¿Aún no lo supera?- Pregunta en tono sorprendido.

¿Cómo puede ser tan insensible? Con mi mirada le hago caer en cuenta de la gran imprudencia que acaba de decir. Ellos se amaban y ella era mi mejor amiga, fue una gran pérdida y es algo que jamás superaremos.

-Eh... lo siento. Pero lo que quise decir es que la muerte de ella no fue su responsabilidad. El culpable fue Kleint y bueno, ya pagó con su vida por ello; debería estar más tranquilo-. Cruza los brazos soplando uno de sus cabellos que caen sobre sus ojos.

-Es verdad, pero al ser nuestro protector, jamás se lo perdonará; se culpa al no poder percatarse de la traición de uno de nosotros y la historia se está repitiendo, por eso se encuentra tan tenso últimamente.

El Portal de los DemoniosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora