Vendida A Un Mafioso Mujeriego

No Me intimidas

Celia Stepanov

En un segundo sentí debilidad al estar tan cerca de mi esposo.

Miro Asia un punto fijo ya la familia de Williams se había retirado los tíos de Williams se mudaron de casa cosa que hicieron para no incomodar, no querían estar presentes en los malos momentos que podrían acontecer.
Eso de cierto modo me alivia.

Camino por la sala de estar como algo incómoda no se que me sucede siento tantas cosas que no puedo explicar que no las puedo contar a una amiga o a mi madre la soledad es mi única compañía de ahora en adelante. 

Williams me sorprende con un abrazo apretando mi cintura con su abdomen me tense en un segundo pero luego relaje mi cuerpo al sentir el aroma de su perfume.

-Celia: tienes la mala costumbre de causar extrañas sensaciones en mi.

-williams: me encanta que sientas cosas por mi, me da algo de fé.

-Celia: quiero que me agas tuya.

-Williams: estás segura de lo que me pides.

-Celia: demuestra me que me amarás solo a mi, que nunca me engañaras.

-Williams: nunca más te engañaria, quiero estar siempre a tu lado.

Mi venganza esta empezando le demostraré falsos sentimientos y cuando el no pueda estar sin mi ya no pueda alejarse lo dejaré le are pagar todo el daño que me produjo.

Le tome el rostro entre mis manos acaricie con mis dedos sus labios y mejillas en cuanto el tocaba mi espalda acariciaba mis muslos, yo lo mira como se excitaba con tocarme y con pequeñas caricias, le di un beso de aquellos lujuriosos me tomo en brazos subiéndome rápidamente al cuarto allí nos desnudamos y comenzamos a besar tan intensamente que nuestros labios pedían a gritos que los dejáramos descansar Williams estaba sobre mi froto su duro miembro sobre mi sexo eso me éxito al nivel de pedirle a gritos que me penetrara este al sentir mi sexo húmedo aprovecho de penetrarme suavemente me embestía en curve mi espada por el placer me estaba por ir al igual que Will se apresuró cada vez más en cada embestía   al punto de llegar a nuestro clímax juntos.

Como un adolescente me pregunto.

-Williams: te gusto¿?

-Celia: me a fascinado mi amor. Pero Will no me estoy cuidando y bueno tú sabes lo que puede pasar.

-Williams: sería lindo un hijo, pero si tú no quieres te puedo comprar la patilla del día después.

-Celia: si amor, aun no me Siento preparada.

Me entregué a los brazos de Morfeo soñando me estaba en la casa de mi madre corriendo por los pasillos algo apurada por que sabía que iba tarde al compromiso que tenía con los huérfanos siempre avía querido adoptar uno o dos niños o niñas en cuanto me casara creía que lo aria con mi alma gemela compartiríamos todo.
Que equivocada estoy.
Pude sentir que alguien me observa y allí lo vi a el mi esposo mirándome desde una ventana mire asía otro lado como si no lo hubiese visto, Seguí jugando con los niño y niñas.

Desperté algo confundida Williams lo conocía desde el orfanato tan solo que nunca conversamos el era el que me miraba el que me seguía.
Me siento muy mal acosada intimidada estoy casada con un psicópata.

¿No puede ser?

Miro a mi lado y esta abrazándome con una mano en mi vientre y otra debajo de su almohada me atrae demasiado estoy enamorada de él pero a la ves lo odio el no ara que caiga en su juego solo es un contrato un estúpido contrato el buscaba una esposa desde mucho antes me seguía para poder realizar un espectáculo creíble para sus padres todo para heredar dinero y los negocios de su familia se aprovechó de la desgracia que pasaba mi madre con su empresa me siento terrible es algo terrible estar así dormir con alguien que solo me quiere para aparentar un feliz matrimonio.