Wonderful Storm ➳ M.Y.G;BTS

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Había comenzado a lloviznar cuando íbamos de camino. Al llegar bajamos rápido para no ser mojados por la lluvia.

Entramos.

Dejé mi mochila y me despojé de mi calzado. Él hizo lo mismo pero se fue enseguida a su habitación. Yo tomé unos segundos y luego fui tras él.

Cuando llegué a la habitación estaba sentado en el piano. Me detuve en el marco de la puerta mirándolo.

Palmeó el pequeño hueco de la banca, indicándome que me sentara junto a él.

Lo hice. El respiró profundamente y acomodó su postura.

Comenzó a tocar. Y claro, yo me perdí totalmente.

Adoraba mirarlo así, tranquilo, con los ojos cerrados, suave y ágil con sus manos en el instrumento.

Adoraba sus dos facetas. La que tenía al conducir, y la que tenía al tocar el piano.

Sin duda, me encantaba aquello, me encantaba él.

Escuchaba la melodía mirando su semblante. Su piel parecía de porcelana fina, la que se puede romper en cualquier instante. Su cabello contrastando con su piel y haciendo juego con sus pestañas y sus ojos.

Admirarlo era hipnotizante.

En un momento decidí apoyar mi cabeza en su hombro y suspiré. Aquello era simplemente tranquilizador. Podría quedarme así por mil años.

Sentí un suspiro de su parte. Después se detuvo. Su melodía había terminado.

Fijó sus ojos en los míos.

-Me gustan tus ojos Seolhyun.- dijo sin dejar de mirarme.

Sentí como me ruboricé. Bajé la mirada.

Tenía una duda en mi cabeza. Hablé.

-¿Qué soy para t...?- dije cabizbaja y con las mejillas rosadas pero fui interrumpida.

-Dale el nombre que quieras. Sé mi novia. Lo que sea.- respiró uso segundos.- Pero, quiero que estés conmigo Seolhyun.- dijo levantando mi cara.

-Quédate conmigo.- repitió mirándome y después unió ambas frentes.

Eso para mí era más que suficiente viniendo de Min Yoongi.

Ahora lo tenía claro. Éramos los dos... juntos.

Entrelacé nuestros dedos uniendo ambas manos.

Se levantó despacio y me llevó con él a la cama. Él se recostó primero después me jaló muy levemente hacia él, acabé tumbada en su pecho, escuchando su respiración y cada latido de su corazón.

Comenzó a acariciar mi cabello. Cerré los ojos ante la sensación relajante.

Mi mente comenzó a pensar en aquel día. Tenía solo un par de dudas.

-Yoongi.- hablé yo.

-Está durmiendo.- dijo seco y le di un leve golpe en el abdomen.

-¿Cómo supiste aquel día en dónde estaba y por qué llegaste con aquel chico?

Silencio.

-¿Podrías contestar?- insistí

-Yugyeom ayudó. Él es el menos mierda.- comenzó a decir.- Le busqué. Cuando supo lo que ocurría decidió ayudar.- suspiró.- Fin de la sesión de preguntas.

Asentí con mi cabeza y regresé a cerrar los ojos. El silencio reinó en la habitación por unos minutos, no era incómodo, era más bien, tranquilo aquel ambiente.

-Seolhyun.- dijo de pronto.- Tuve miedo.

Me sorprendió que dijera algo así de la nada.

-¿Miedo? ¿De qué?- pregunté

-De que algo te pasara.- dijo en un susurro y con sus ojos cerrados.

Me tomó por sorpresa y a la vez sentí un poco de alegría al escuchar aquello de quien venía.

-Estoy bien.- le dije acariciando su pecho por encima de su camiseta.

Me gustaba mucho esta cercanía, su aroma, su voz, demonios.

-Estás bien.- dijo apretándome un poco más contra su cuerpo.- Y estás conmigo.

Sonreí ante lo último.

Sentí como se movió y yo hice lo mismo para ver qué es lo que hacía.

Removió las sábanas para poder acostarse debajo de ellas, me puse de pie y lo miré.

-No quiero dormir aún.- dije haciendo un mohín.

Yoongi gruñó acostado mirando al techo. -Seolhyun, ya hemos tenido esta plática.- dijo estirando su mano para tomar la mía. Jaló haciendo que cayera en el colchón de cara.- Así que duerme y ya.

Me acomodé con mi cabeza en la almohada, Yoongi enseguida posicionó su cabeza en mi pecho usándolo como almohada, y sus manos rodearon mi cintura.

Comencé a acariciar su cabello ahora yo a él.

-Yoongi.- dije

-¿Ahora qué?- dijo como si le fastidiara. A mí me parecía divertido.

-Buenas noches.- dije y deposité un beso en su cabeza.

No obtuve respuesta. No me sorprendía así que solo decidí dormir.

-Seolhyun.- dijo pasado un momento.

-Está durmiendo.- dije imitándolo a lo cual soltó un bufido pero sentí como las comisuras de sus labios se elevaron en una sonrisa.

De nuevo el silencio. Comenzaba a quedarme dormida.

-Te quiero Kim Seolhyun.- le escuché decir.

-Y yo a ti Min Yoongi.- le respondí.