Capítulo 14.

706 83 1
                                    

—¿¡Qué acaso estás loco!? —le gritó sorprendido.

—Demonios Ashley, ya te he dicho el por qué dejaré de hacerlo —resoploó Andy—. No puedo seguir mandándole notas a una chica que está saliendo con alguien —continuó él.

—No estás haciendo nada malo; no te le estás insinuando, ni mucho menos —dijo el mejor amigo del ojíazul.

—Oh vamos, tú sabes que esas notas siempre han sido en otro aspecto —se sentó sobre su cama, posando sus codos en sus rodillas, dejando descansar sus manos al aire en medio de las mismas—. Dejaré eso por un tiempo —añadió mirando a los ojos a su amigo, recibiendo de su parte, una mirada triste.

El chico de las cartas. •[Andy Biersack]•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora