Malú & Pablo López ~El Secreto~ 2 Temporada

Capítulo 39

Malu

No podía estar más feliz, que más se le podía pedir a la vida, después de tantos sin sudores que había vivido en estos meses ya era hora de que algo bueno nos pasará, y que mejor que tener a mi lado a este gran hombre.
Llegamos al hotel, estaba oscureciendo y empezaba a hacer frío, la verdad yo estaba bien podía seguí jugando con la nieve
, pero Pablo insistió en que debíamos entrar ya dentro.
Ambos entramos al hotel, el no soltaba mi mano, creo que no me soltó desde que llegamos del pueblo de al lado .
Caminamos por el pasillo que daba a nuestro ascensor, aquel hotel era tan grande que aún a 1 día de irnos aún podía llegar a perderme.

- Necesito cuando lleguemos a la puerta de la habitación ponerte esto.-Me dijo sacando un pañuelo de color oscuro de su bolsillo.

-Hay no... Pablo más sorpresas?.-Dije mirándole 

-Jefa tranquila que es bonita.-Me dijo robandole un beso.-Igual de bonito como tu.

Yo le sonreí, no era posible enfadarse con este hombre, si con una sonrisa hacía que me temblara todo el cuerpo.

-Hey!!! El ascensor.-Dije corriendo como una niña pequeña a llamarlo mientras que Pablo andaba detrás de mis pasos, mientras se reía de la escena.

-Si igualmente iba a tardar en llegar tontita.-Me dijo alcanzandome mientras me tocaba la nariz con la yema de su dedo.- y aún no llegó

En eso se abrió la puerta bajando varios de los huéspedes del hotel , sólo quedó en aquel ascensor una mujer, o eso parecía ya que iba algo tapada, supongo que a causa del frío. Los dos entramos al ascensor dejándole lado a la mujer por si iba a salir, pero al ver que no se movía Pablo le dio a nuestra planta, mientras se puso delante de mi mirándome a los ojos.

-Señora de Lope , que raro suena verdad .-El se echo a reír cosa que me hizo reír a mi también.-Tendremos que acostumbrarnos Jefa.-Le di un beso en los labios para que se callara cosa que era imposible.

- Misifu sabes que te quiero cariño mío?.-Dije sonriendo

-Me lo he merecido No?.-Me dijo con su cara de niño bueno que no podía resistirme en comermelo a besos.

-Se puede ser mas comestible por dio?.-Dije con una sonrisa, la cuál el me la había contagiado antes.

El ascensor se abrió y ambos salimos dejando a aquella señora que no había abierto la boca ni se había movido del lugar que estaba donde estaba cuando los dos entramos.
Caminamos por aquel pasillo, se me hizo eterno, mis piernas se me habían echo un poco pesadas, debido todo lo que habia andado anteriormente y a los juegos de niños que tuvimos Pablo y yo, y a que tenía algo de frio también. Pablo al ver que yo venía un poco más detrás de él caminando más despacio ahora, se paró a esperarme un poco cogiendo de mi mano.

-Uy alguien se le fueron las fuerzas de hoy.-Me dijo sonriendo.

- Ya ya voy cariños.-Dije sin poder evitar aquel bostezo sin remedio.