Aleación [SANGRE & ACERO #3]

Epílogo 1/3 - Hunter Walker

Esperé en el mismo sitio de siempre.

El silencio era absoluto, como de costumbre. Observé el reloj en mi muñeca derecha, había llegado puntual, así que no debería tardar.

Justo a la misma de siempre, Aurora se asomó a la puerta.

- Hunter. - Llamó con una sonrisa, sus ojos no tardaron en posarse en mi, era el único esperando. - Puedes pasar.

Llevaba el mismo vestido hasta las rodillas blanco de siempre, el que utilizaba para trabajar. Su pelo, ya blanco por las canas, se recogía en un sencillo moño en lo alto de su cabeza, resaltando sus pequeñas arrugas que ya comenzaban a salir.

Me levanté y me acerqué a ella. Ambos entramos en la habitación, totalmente de madera, siempre había pensado que le daba un toque cálido al ambiente.

- ¿Que tal estos días? - Preguntaba mientras iba a buscar su libreta.

- Muy bien, en mi familia nadie puede aburrirse. - Confesé tumbándome cómodamente en el sillón.

- ¿De veras? ¿Que hay de nuevas? - Su tono de voz era cálido y sutil, se sentó en el sillón justo enfrente del mío.

- Bueno, Jayce y Savannah se van a casar, por fin, llevan tiempo queriendo hacerlo.

- ¡Eso es genial! - Ya apenas apuntaba cosas en su libreta, pero la llevaba de todas formas. - Hoy es un día especial, ¿No es así?

Desvié la mirada, sabía que quería hablar del tema.

- Sí, lo es. - Suspiré.

- ¿Que día es hoy? - Preguntó.

- Lo sabes de sobra. - Respondí cortante.

- Hunter, tranquilidad. - Me regañó. - Sólo quiero que lo digas.

Resoplé y volví a posar mis ojos en los suyos.

- Hoy hace cinco años desde que Sophie murió.

- ¿Y como lo llevas? - Preguntó.

- Mejor cada año. No deja de ser doloroso, para todos.

- Entiendo. - Murmuró mientras apuntó algo en su libreta. - ¿Te importa que hablemos de ella?

- Preferiría que no, ya hemos hablado mucho sobre ella, te sabes la historia de memoria.

- La mejor opción para superar una pérdida es actuar con normalidad, Hunter, no lo hagas un tema tabú.

Desvié la mirada, sabía que tenía razón.

- Adelante.

- ¿Que era Sophie para ti? - Preguntó.

- Todo. - Respondí rápidamente. - Soy quien soy hoy en día por ella. Comencé a venir aqui por ella. Se lo prometí.

- Y te cruzaste con la mejor psicóloga de la ciudad. - Bromeó. Ambos reímos.

- Era increíble. - Comencé. - Valiente, carismática, humilde, generosa .. Jamás he conocido a nadie como ella. Y no pude salvarla.

- No fue tu culpa, Hunter.

- Debería haber insistido, debería haber ido con ellos, podría haberla salvado, pero me dejé influenciar por él, está muerta por sus celos.

Alzó las manos al cielo, indicándome que me estaba comenzando a poner nervioso. Suspiré profundamente y me tranquilicé.

- ¿Lo culpas? - Me preguntó. - A Ryan.

- Solía hacerlo, joder incluso intenté matarlo cuando me enteré de todo. Fue cuando me lancé a su cuello, cuando no respondió mis golpes y simplemente me miró serio cuando me di cuenta que ya estaba muerto, Ryan murió aquel día, junto a ella.

- ¿Cómo lo lleva? Ryan.

- No lo sé, no lo veo mucho, cuando lo hago siempre tiene la misma mirada de siempre, cómo si no quisiera vivir, pero también hay algo que lo mantiene vivo, esperanza.

- ¿Esperanza?

- Nadie lo entiende, Grayson no puede entrar en su mente, és como si tuviera la mente en blanco todo el tiempo. - Expliqué. - Ya no lo culpo, dejé de hacerlo hace tiempo. A Sophie no le hubiera gustado.

- Los Price, tengo entendido que se han convertido en un fuerte apoyo.

- Sí. - Contesté. - Compartimos el dolor, así es más fácil sobrellevarlo. Intentamos dejar de verlo como una desgracia, y empezamos a celebrarlo. Anna lo llama el dia de Sophie. - Sonreí. - Es nuestra fiesta nacional.

- Hoy celebráis el día de Sophie, ¿verdad?

- Sí. En cuanto salga de aquí voy a casa de los Price, vamos a estar todos, como cada año.

- Sois fuertes, Hunter.

- Lo somos, gracias a ella. - Sonreí.

En una hora el siguiente epílogo.