Más allá del universo

Señales apagadas

Nuestros cerebros, después de todo, sólo son una masa de tejidos que pesan alrededor de un kilo y medio, con una consistencia de avena fría. Es solo cuando interpretamos las señales eléctricas, generadas por nuestro cerebro, en nuestra mente consciente, cuando creamos nuestra realidad individual. Eso plantea la pregunta: ¿Qué sucede cuando esas señales eléctricas están apagadas?

Anoche me recosté sobre la cama, puse un antifaz sobre mis ojos y audífonos en mis oídos. Esta forma simple de privación temporal, nos lleva a una realidad alternativa. Perdemos la noción del tiempo, experimentamos alucinaciones vívidas. En ausencia de una entrada sensorial, la maquinaria fábrica-mundo, elabora una realidad sin conexión con el mundo externo a su cuerpo.

Privada de dos de mis sentidos más importantes, lo que sucede es que el cerebro se apresura por entradas para los otros sentidos. De modo que te vuelves muy consciente del sabor en tu boca y de la suavidad de la cama en la que estoy acostada.

Comencé a ir a la deriva en algunos estados de ensoñación. Pero luego me percaté que mis ojos estaban muy abiertos y que estoy completamente despierta y consciente.

Cuando tus sentidos están apagados, tu cerebro crea su propia versión de la realidad. En lo personal, así como todo lo expuesto anteriormente, creo que vivimos en una hiperrealidad, creada por la sociedad, rellena de ilusiones que se han convertido más reales para nosotros, que el mundo físico que nos rodea.