La Profesora De Matemáticas (Camren)

26. Tiempo

Lauren

Suspiré y me deje caer de forma estrepitosa sobre la silla de mi oficina en la escuela, de forma casi automática mis ojos se llenaron de lágrimas y el corazón se me encogió

¿Cómo es que en tan poco tiempo me había enamorado de esta forma?

¿Cómo es que a pesar de que esa mocosa malcriada me hacía rabiar, también hacía que mi corazón latiera tan rápido por ella?

Cerré los párpados y me tragué todo, como siempre lo hacía desde que tenía memoria

Debía seguir con el trabajo y mis responsabilidades como profesora, saqué del cajón de mi escritorio una paquete de exámenes sin calificar y empecé a corregirlos, pasó un tiempo determinado y escuché la campana indicando que debía volver a clases... No tenía idea de lo monótona que se volvería mi vida cuando me obligará a mi misma a sólo pensar en el trabajo para alejar mis pensamientos de la chica de ojos marrones que hasta hace poco pude llamar mi novia

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- ¿Qué hay de esta chica? La que mencionaste una vez - Preguntó la castaña mientras se llevaba un bocado a la boca

Me mantuve en silencio mientras repetía la acción de mi amiga, Keana y yo estábamos en un restaurante cerca del instituto, era al menos la décima tercera vez en dos semanas que me pedía que almorzaramos juntas, después de tanta insistencia no podía negarme y rechazarla una vez más

Continúe comiendo en silencio como si no hubiese escuchado su pregunta, pues al oírla todos mis pensamientos iban directo a... Camila

Si no lograba distraerme con otra cosa, el poco avance que había tenido en estas dos semanas de post ruptura se iría por la alcantarilla

- Laur - Habló la chica de ojos miel - Te pregunté sobre la-

- No quiero hablar de eso - Conteste rápidamente sintiendo como se me cortaba casi de inmediato la voz

- Está bien - Tomó mi mano - Está bien - Repitió ahora susurrando - Entiendo si no quieres hablar, pero cuando quieras hacerlo y desahogarte sabes que estoy a una llamada o mensaje de distancia...

- Lo se - Dije desviando la mirada

- Lo siento por preguntar, no quise ser inoportuna, sigamos almorzando ¿Te parece? - Sólo asentí y seguimos comiendo

Keana llegaba a ser tan comprensiva y excelente persona que me sorprendía como podía seguir siendo soltera o bueno, como seguía sin conocer a alguien que la valorara y quisiera como ella se lo merecía, sin mencionar lo hermosa que era físicamente, claro está

Aveces me sentía fragil y sola en mi apartamento y a la primera persona a quien recurría en estos casos era Keana, ella siempre llegaba unos minutos después y me consolaba en silencio, ni una palabra salía de mi boca, aun así ella interpretaba perfectamente todo y sabía cuando quería un vaso de agua, una pizza familiar y coca cola o un abrazo... Eso era lo que más me gustaba de aquella chica, que se había convertido en mi apoyo en tan poco tiempo

- ¿Cómo va todo en el trabajo? - Pregunté para disipar un poco el incómodo momento por el que había pasado unos minutos atrás - Hace unos días dijiste algo sobre unos modelos a escala que debías entregar

- Oh si - Se limpió la comisura de los labios con una servilleta - Tuve que desvelarme un par de noches seguidas pero valió la pena al ver la cara de satisfacción de los clientes, tu mas que nadie sabes lo que es vivir por tu trabajo y la felicidad que este te trae - Me mostró su mejor sonrisa