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--No me voy a ir Nicole -su mirada se suaviza y suspira frustrado.

Me mira por minutos que parecen horas.

--Si vas a decirle a mis padres, ve de una puta vez -niega con la cabeza y sus oscuros ojos se cristalizan

--No, quiero que me digas qué pasó para que te lastimáras -se sienta en la cama guardando distancia entre ambos.

--Fue un accidente -cierra los ojos tratando de contenerse

--Quiero ayudarte, no hagas esto difícil -mi hermano puede ser muy idiota a veces, parece difícil de creer pero si fue un accidente.

--Te estoy diciendo la verdad -Sus puños se aprietan y se levanté rápido de mi cama.

--Yo quise ayudarte y no te dejaste, pues ahora quieras o no vas a necesitar ayuda -¿Eh? Y sale echando humo de mi cuarto.

Todo iba normal hasta que mis padres le piden a Jaden irse a su habitación y sus miradas se posan sobre mí.

--¿Que hicimos mal? -pregunta mi padre con la voz rota, mi madre rueda los ojos y gruñe molesta

--Ya estamos artos de tus comportamientos para querer llamar la atención -se cruza de brazos mi madre y me da una mirada de reproche

¿A caso solo tiene esa mirada?

--Eso por eso que mañana mismo nos vamos, tú vendrás conmigo -sentí vía papá, mi madre solo asiente y sube a su recamara, papá me abraza e igual desaparece.

Me quedé un rato viendo televisión en la sala, mañana era lunes y el día que partía de mi país. Debería estar contenta porque iba a cambiar de ambiente, conocer lugares y gente nueva... Pero exactamente lo que no quería, no quería conocer a nadie más.

El lunes llego, hice mi rutina y entré a clases, la primera estuve sola y en la segunda apareció Sergio.

--Hola preciosa ¿Qué tal tu día? -parece que el de él iba muy bien, pues lucía muy contento.

--Bien -respondí tajante, luego me arrepentí. Él no tenía la culpa...

Las clases pasaron sin imprevistos.
Al salir  noté a una chica que decía algo muy emocionada, pero Sergio tenía los ojos sobre mí. Entonces la chica para tener de nuevo su atención, se lanzó contra él y lo beso.
Esperaba que él la alejara o se mostrará frío, pero en vez de eso le siguió aquel salvaje beso.

Ok, él también me había visto besar a Dylan, pero por muy egoísta que sonará era diferente.

Seguí mi cambio hasta llegar a casa, entrar me había deprimido solo por unos minutos. Había cajas en la sala, maletas, ya no había fotos en la pared y los muebles estaban envueltos en hule.

Mis padres y Jaden no estaban y yo no tenía mucho que hacer, así que lo mejor sería subir y hacer mis maletas.
Me disponía a hacer eso cuando tocaron muy fuerte la puerta.

--¡Nicole! -sentí un alivio al escuchar su desesperada voz llamarme.

Le abrí la puerta, lucía ansioso y parecía que había corrido mucho pues el cabello se pegaba a su frente debido al sudor.

--Creí que no te alcanzaba --dijiste después de recobrar aire y sin darme tiempo para hablar, me beso.

Me atrajo hacia él, rodeando me fuertemente con ambos brazos mientras nuestros labios se unían.

De momento todo parecía perfecto, pero la perfección no es eterna. Recordé como besaba a esa chica y me aleje asqueada.

--¿Qué quieres? -le pregunte tajante, no sé sorprendió por mi manera de hablarle, solo asintió.

--Verte -se encogió de hombros, sus oscuros ojos viajaron por toda la sala y su rostro cambio a la incertidumbre

--Ya me viste, si no te importa tengo que seguir empacando --Sergio soltó una carcajada amarga y me tomo de la mano

--Tú no vas a ir a ningún lado -sentencio, ahora yo reí

--¿No ves las maletas? -él asintió y beso mi mano dulcemente

--Dije que no te vas a ningún lado...

--No depende de mí, sino de mis padres

--Creo que no entendiste, no me importa de quien sea la decisión, no voy a permitir que te alejen de mí -me toma por sorpresa su respuesta y no puedo evitar sonreír

--No lo intentes, ni siquiera tenemos algo bien Sergio -finge estar dolido dramáticamente

--¿No tenemos nada? ¿Estás segura? -asiento

--Solo estamos "saliendo" para perder el tiempo. Siendo honestos no hay sentimientos... --en el fondo duele decir estas palabras, pero parece que mi plan de romperle el corazón estaba destinado a fallar

--Supongo que es verdad. Yo no te amo y nunca lo haré -siento mi corazón romperse y quiero llorar, gritarle que esperaba otra respuesta. Que entre toda la mierda que me pasa, él era un poco de esperanza.

--Así que deja que me largue -cierro volientamente una caja

--No -jala la cinta y abre la caja que acababa yo de cerrar.

--¿Por qué no? -le pregunto irritada

--Porque quiero seguir perdiendo el tiempo contigo. Me gusta estar cerca de ti... -ok, mi corazón late demasiado rápido para mi gusto

--¿Estás insinuando que soy una perdida de tiempo? -una sonrisa se asoma en sus labios

--Y eres la mejor perdida de tiempo... --me guiña un ojo

--¡Eres tan complicado! -bufo confundida, Sergio ríe abiertamente

--Lo sé. Pero creo que nos entendemos muy bien como para que te vayas, y aún me debes mi noche "mágica" -ah ya entiendo, el idiota no quiere que me vaya porque no me he acostado con él.

--No soy tu zorra, estás muy mal si piensas que me quedaré solo para tener sexo contigo -y entonces Jaden entra, con Dylan tras él.

Dylan lleva un lindo ramo de flores con un gran moño rojo, pero parece perdido en sus pensamientos.

--¿Que hace él aquí? -pregunta Jaden queriendo matar a Sergio, quien parece divertido

--Vine a ver a tu hermana, señor listo. --quiero reír porque eso realmente hizo enojar a Jaden.

--Ya la viste, largo -amenazo Jaden y le da una palmada de apoyo a Dylan.

--¿Y dejarla con el chico flores? Ni loco --Dylan se pone rojo y su mandíbula se tensa.

--¿En qué estábamos preciosa? --Sergio se voltea hacia mí ignorando por completo a los chicos, siento mis mejillas rojas.

¡Golpe bajo, preciosa! (En Edición) Where stories live. Discover now