2. Furtivo Encuentro

4.9K 240 9
                                    

¿Por qué temes abrazarme?, yo que te he esperado después de tanto tiempo, ¿Merezco vivir en el infierno de tu indiferencia? Pronto me amaras, tanto así que no podrás escapar de mí.

¿Por qué temes abrazarme?, yo que te he esperado después de tanto tiempo, ¿Merezco vivir en el infierno de tu indiferencia? Pronto me amaras, tanto así que no podrás escapar de mí

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

El retumbante sonido de la música era ensordecedor, con una mezcla de almizcle en el ambiente. Camila sentía un dolor punzante en sus oídos, pero nada que no pudiera aguantar. Vestida con tacones altos y un vestido dorado de lentejuelas bastante corto, le hacían recordar a quien fue su primer novio.

Aquel malnacido, como bien había dicho Dinah.

Sin embargo, a pesar de todo, una parte de su corazón no se resignaba a dejarlo ir. Lo que significaría dejar ir todos esos momentos que pasaron, en donde de alguna forma Camila había sido feliz. Salidas a escondidas, visitas al cine, noches de fiestas, todo pasaba como flashbacks mientras miraba a una pareja al fondo del bar, besarse apasionadamente.

¿Había sido realmente feliz?

Un nudo se instaló en su garganta, al mismo tiempo que veía como el hombre agarraba el muslo de su novia con ferviente deseo. Como una punzada recordó la primera vez que Austin le pidió tener relaciones, casi a la fuerza. Camila aun podía escuchar vívidamente las palabras "cobarde" y "patética" ante la negativa de querer darle lo que tanto deseaba.

Ese maldito.

Apartó esos pensamientos sacudiendo fuertemente su cabeza y con pasos resonantes se dirigió a la mesa en donde se encontraban sus dos amigas, Dinah y Ally, tomando una clase de bebida alcohólica que no pudo reconocer.

— Estuve a punto de irte a buscar — replicó la menor, Dinah, mientras daba otro sorbo al licor de color ámbar.

— Lo lamento, había una larga fila para ir al baño — mintió. La verdad es que nunca fue al baño, al contrario, había salido del bar a tomar aire fresco, en un intento vano por tranquilizarse.

Ya veo — Dinah le dirigió una mirada entrecerrada, no creyendo en sus palabras. Camila aparto la mirada rápidamente no queriendo ser descubierta.

¡Chicas! ¿Es esa la canción de Ed Sheeran? — chilló Ally, salvándola por esta vez, deliberadamente. Camila soltó el aire que no sabía que había estado reteniendo.

— ¡Tienes razón! Me encanta esa canción, vamos a bailar — dijo la castaña, caminando hacia la pista de baile.

Era la dosis que necesitaba, una especie de inyección de energía, recorriendo su sistema y haciendo que el líquido ámbar se deslizara por su garganta con una emoción casi eufórica. 

Camila se balanceaba como una marioneta, tomando de la botella como si fuera su salvación. En su creciente borrachera llego a la conclusión de que la música era el único recurso que pudiera utilizar para calmar su dolor y agonía, estragos de una traición.

Pero, ¿De qué servir salir a fiestas con sus amigas si todo le recordaba a él?

Cada paso vacilante, cada movimiento de su cuerpo le recordaba a sus caricias, en como sus manos se agarraban a su cintura con posesión, haciéndole temblar. Lo amaba, a su estúpido ex-novio, lo amaba demasiado, tanto así, que incluso temía que se amor la consumiera, dejándola vacía por dentro.

𝑴𝒚 𝑺𝒘𝒆𝒆𝒕 𝑶𝒃𝒔𝒆𝒔𝒔𝒊𝒐𝒏 © (CAMREN)Where stories live. Discover now