t r e s

2.1K 174 30
                                    

Suni

Desperté gracias a una suave caricia en mi pierna izquierda y pequeños besos en mi hombro, JungKook se portaba de lo más lindo durante las mañanas. Me levanté y salí del cuarto con cuidado para no despertar a JungKook, entré a la regadera, me desvestí y apresuré a bañarme, pues podría despertar en cualquier segundo. Cuando terminé de bañarme, me puse mi ropa interior y una de las playeras de JungKook, cuando terminé de vestirme, fui a la cocina y busqué algo en la nevera para preparar el desayuno. Hace días no volvía a casa, tampoco había recibido alguna llamada de mi familia, así que no había prisa alguna por regresar. Con lo que encontré en el refrigerador preparé el desayuno con un poco de prisa, pues pretendía sorprender a JungKook.

— Buenos días princesa. —murmuró cerca de mi oído, rodeo mi cintura con sus fuertes brazos y apoyó su mentón en mi hombro.

— Yo planeaba llevarte el almuerzo a la cama. —hice un puchero.

— Puedo ir a la habitación y fingir que estoy dormido. —reí y negué.

— No tiene caso, será otro día —mordió el lóbulo de mi oreja derecha, yo me quejé—, el desayuno está casi listo, ve a darte una ducha y bajas a desayunar.

— Bien —besó mi mejilla y fue a ducharse. Mientras se duchaba, terminé de preparar el desayuno y preparé un poco de té para JungKook y café para mí mientras lavaba los trastes que había ensuciado, cuando escuché unos pasos cerca, serví nuestro desayuno. Nos sentamos el uno frente al otro a comer en silencio, mientras veíamos algo en la televisión.

Cuando terminamos de comer, ambos lavamos los trastes y ordenamos un poco su casa. No teníamos ningún plan para hoy, tampoco teníamos ganas de hacer alguna actividad en casa además de la limpieza, así que fuimos a la sala de estar a ver algún programa mientras nos besábamos y abrazábamos. Aproveché que habían hecho una pausa para comerciales y fui a la cocina a prepararme un poco más de café, entonces sentí como rodeaban mi cintura fuertemente, me giraban sobre mis talones y besaban mi cuello, a la vez que me subía a uno de los muebles de la cocina.

— Es hora de mi postre. —dijo JungKook con voz ronca, antes de unir nuestros labios. Su lengua recorría cada lugar de mi boca, sus manos apretaban con un poco de fuerza mis caderas y se pegaba completamente a mi cuerpo, entonces puse mis manos en su pecho y lo separé de mí.

— Necesito que me respondas algo —asintió mientras besaba mi cuello— Es cierto que te gusto, ¿No? —asintió de nuevo y lo alejé de mí— Pero no me dijiste para que te gusto. 

— ¿Qué? —frunció el ceño.

— ¿Para que te gusto? —pregunté— ¿Para solo sexo? ¿Para tener algo serio?

— ¿Crees que eres solo un juego para mí? —observé el suelo, estaba un poco nerviosa y asustada por la respuesta de JungKook— No lo eres Suni, me gustas para tener algo serio. El simple hecho de imaginar que no estés a mi lado cada mañana me da miedo, nunca había experimentado algo así. Suni, me gustas para ser mi novia —tomó mi mano y alcé la mirada— para ser mi esposa y madre de mis futuros hijos —besó mi mano y mis mejillas se tornaron de un color rojo carmesí—. Lamento haberte hecho pensar que lo nuestro solo era para tener sexo, no era mi intención. Es solo que, cuando te veo... —acarició lentamente mi cintura— Usar mi ropa, dios.

—reí avergonzada— No digas nada más —asintió avergonzado, se acercó a mi y besó la comisura de mis labios, sonreí y pegó nuestras frentes.

— Por favor, no te separes de mí. —suplicó.

— No tengo intenciones de hacerlo. —me sinceré. 

© Rain; jjkWhere stories live. Discover now