[38]

1.4K 168 159
                                    


Para Zayn el resto del día fue un martirio. No volvió a ver a Liam después de que discutieron y tenía la horrible sensación de que lo que tenían había terminado, aunque nada hubiese sido dicho.

La última clase del día se hacía eterna y su rabia crecía conforme los minutos pasaban. La rabia y la ansiedad lo consumían, quería volver a ver a Liam y hablar con él, pero también tenía unas ganas enormes de encontrar al bobo Ismail y aclararle un par de puntos.

Cuando finalmente las clases terminaron y salió del salón, corrió en busca de Liam. Grande fue su decepción cuando el castaño ignoró su presencia y se apresuró a montarse en el auto de la mamá de Harry. Zayn respiró, más no sirvió de mucho porque lo siguiente que sabía era que estaba ingresando a su casa hecho una furia.

—¿Todo bien ahí?

Zayn, que se había quedado apoyado contra la puerta cerrada, tratando de calmarse para no preocupar a su madre, giró en su sitio y se encontró con Ismail en la puerta de la cocina. Trató de ignorarlo, vio hacia la escalera y se imaginó a sí mismo subiendo por ellas y encerrándose en su habitación. Pero no lo hizo.

—Nada está bien desde que estás aquí. —Zayn respondió.

Ismail notó que su pequeño medio hermano se encontraba más raro de lo normal, así que sin volver a dirigirle la palabra retrocedió y regresó a la cocina; tomó la taza de té que acababa de prepararse y se dirigió al patio trasero. Mientras más alejado del camino de Zayn se encontrara, mejor. No quería que el chico se sintiera más incómodo con su presencia.

Zayn, por otro lado, no dejaba de pensar en que todo lo malo empezó cuando ese tipo llegó a sus vidas. Estaba harto, quería que todo volviera a ser como antes, quería a sus padres juntos y a sus hermanas tranquilas.

Dejó su mochila en la entrada y siguió a Ismail a la cocina, lo observó salir al patio y tomar asiento en los escalones del pórtico. Su aparente calma y buen humor lo irritaba aún más.

—Le dijiste a Liam que salgo por las noches, —el menor habló mientras se acercaba. —¿Tratas de ponerlo en contra mía también?

Ismail giró y se puso de pie en cuanto lo vio acercarse.

—Sólo hice un comentario, Zayn. —Ismail mostró sus palmas, tratando de sonar sincero —No quería ser chismoso, pero Safaa–

—No te creo. Querías que Liam supiera.

—¿Por qué querría eso?

—¡No te hagas el idiota! —Zayn gritó —Desde que llegaste aquí no has hecho más que complicar las cosas.

—Escucha, para nada intento complicar tu vida. —Ismail trató de hacerle entender —Se que es difícil, para todos. Allah sabe que es complicado para mí también, pero papá insistió–

Zayn no le dió tiempo de terminar. No supo en qué momento, ni tampoco lo que pasó por su mente, sólo reaccionó.

—¡Javadd!

El grito de Yaser lo hizo reaccionar. Ismail estaba sentado sobre el césped sosteniendo su mandíbula, una mirada de total sorpresa en su rostro, mientras un pequeño hilo de sangre brotaba de la esquina de su labio.

—¡¿Qué sucede contigo?! —Yaser gritó mientras ayudaba al mayor de sus hijos a ponerse de pie. —¿Has perdido la cabeza, hijo?

—Estoy bien, —Ismail calmó a su padre, mientras Zayn volvía a la casa. —Ve a hablar con él, creo que necesita de ti.

—Te juro que él no es así. —Yaser inspeccionó la herida en el rostro de Ismail y negó resignado. —Ponte hielo en eso. Es momento de hablar con Zayn.

Don't Talk to Me  »ziamWhere stories live. Discover now