Capitulo 2

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Las mariposas comenzaban a desvanecerse y de mis manos desaparecían tus castaños cabellos, odiaba esa sensación por que significaba que el sonido de la alarma comenzaría a escucharse a lo lejos. Y en los sueños construidos por mi misma, siempre encontraba el camino para regresar a ti.
-Mierda- Por el fuerte golpe, el pequeño reloj cayó al suelo y no pude hacer que dejara de sonar -¡Carajo!- Me incorporé tratando de no tropezar con las sabanas que se enredaban entre mis piernas y los rayos del sol que lograban escapar por los orificios de las percianas, cegarón mi paciencia.
Ahora era cuando comenzaba a entender, por que Zachary siempre prefirió que nos quedasemos dormidos mirando televisión en el sofá del pasado apartamento.

Flashback:

-Joder Zach- Le empujé un poco provocando que casi cayera al suelo y cubrí mi boca antes de que una enorme carcajada se apoderara de mi corazón
-¿¡Que demonios, Bee!?- Se aferró a mi cintura y yo cubrí mi rostro contra su pecho, de esa forma él siempre tomaba la oportunidad de colocarme sobre su cuerpo para estar algo mas cómodos y así...yo me sentía segura.
-¿Es esto lo que querías, no es así cariño?- Besó mi frente con una sonrisa
-Es algo torpe de tu parte que lo preguntes- Dije riendo un poco para seguir escuchando sus lentos latidos y respiración. Rodeabamos nuestras piernas como si de uno solo quisieramos convertirnos, las noches en Londres eran heladas y Zachary en cada oportunidad de ir a las tiendas enormes de ropa, llenaba la canastilla con cientos de pares de calcetines de todas formas, colores y diseños. En ese entonces, ambos usabamos unas.

Fin del flashback.

Estruendosos claxons comenzarón a escucharse en la planta baja del apartamento y sabía que Carl ya se encontraba esperando afuera y yo nisiquiera me encontraba bajó la regadera.
-¡Hey!- Grité por la ventana dejando que el aire entrara a la habitación, quizá eso necesitaba y de esa manera llamé la atención del moreno quién se encontraba ligando con una atractiva chica de los suburbios.
-¿Elise? ¡Estoy aquí desde hace 15 minutos!- Gritó, por que siempre tuvo la creencia de que yo no le escucharía desde allá arriba.
-¡No mientas!- Hablé en su tono -¡Solo aguanta 10 minutos!-
Rodó sus ojos y me ruborize ante aquello por la vergüenza
-¿¡Me queda de otra!?-

No tuve el tiempo de responder y levanté del suelo las primeras prendas a la vista que tenía, incluso si no combinaban o se veían demasiado aburridas. Miré contra el espejo y era bastante decepcionante.
-¡Eli!- Escuché el grito de Carl y me apresuré al viejo ascensor que por dentro asimilaba una de las muchas reliquias que las abuelas normalmente llevan escondidas en lo mas común de las pequeñas cosas. Siempre pasaba mi dedo índice sobre los detallados hornamentos de madera en las paredes del ascensor, iba tarareando 'Annie's Song'. Era la canción que Zachary y yo solíamos escuchar durante nuestros largos viajes en carretera para ir a visitar a mis padres, mis padres 'Oh no'.

Mamá estaba realmente feliz al saber que íbamos de visita, era la primera vez que ellos conocerían a Zac y en conclusión, a un novio que se había quedado a mi lado por mas de dos semanas. Él iba bastante nervioso y pude notarlo por que sus manos temblaban contra el volante, normalmente siempre bebía en un par de segundos toda la gaseosa de su vaso de su lugar favorito en Londres. Pero esa vez fue muy diferente, por que la bebida iba derramándose a causa de que aún seguía llena.

Flashback:

-Cariño- Froté su hombro y él suspiró brindandome una de sus preciosas sonrisas que sabía con perfección, siempre se formaban cuando estaba algo distraído. -Todo irá bien- Él entrelazó su mano con la mía y besó mis nudillos -Ellos son bastante buenos, a menos que alguién rompa mi corazón- Ambos reímos
-No deben preocuparse por eso conmigo, me ocuparé...-

Fin del flashback.

Mis memorias habían sido interrumpidas por la ronca voz de un hombre presionando el numero 1 del elevador.
-Creo que vamos al mismo piso- Sonrió y yo también lo hice, rogando por que no se hubiese dado cuenta lo torpe que me veía delineando las paredes y tarareando esa canción, ya era suficiente con mi outfit.
-Creo que si- Acomodé un mechón de cabello detrás de mi oreja, observando como los números en la parte superior de las puertas, cambiaba.
-Soy Bill- Me brindó su mano y yo la tomé con una sonrisa demostrando confianza
-Elise pero puedes llamarme Eli- Él asintió agradablemente -Nunca te había visto por aquí, Bill-
-Oh no, es que acabo de llegar hace un par de días y he tenido grandes problemas con el camión de la mudanza-
-¿Se han perdido, no es así?-
-Así es, señorita Eli- Sonrió mirándome con atención por lo bastante interesante que seguramente se veían mis zapatillas con el resto de las prendas. El tiempo se había rotó con el sonido del elevador deteniéndose y ahí pude reaccionar.
-Creo que aquí nos despedimos, caballero- Nuestras manos se juntaron nuevamente en forma de despedida y asintió
-Un honor conocerla, madame- Inclinó su cabeza y yo caminé fuera del edificio -Quizá podamos toparnos de nuevo un día de estos-
-Digo lo mismo, Bill- Estuve a punto de chocar contra las puertas de cristal del lugar y no podía avergonzarme mas de toda aquella situación.

-¡Vaya por fin te dignas a bajar!- Dejó a la rubia mujer hablando sola para seguirme hasta el auto y ambos subimos -¿Oye pasó algo? Estas tan roja como cuando te sentaste frente a mi y Alexandra para contarnos sobre tu romantica y cachonda noche de amor-
-Callate, Carl- Rodé los ojos -Deberías agradecerme pues tuviste bastante tiempo para que esa chica te diera al menos su numero-
-¿Te burlas de mi, tonta?-
Arrancó el coche y las platicas y discusiones siguieron todo el camino. Eramos un lío, mas cuando estábamos juntos Carl, Alexandra y yo, pero era uno de esos momentos dramáticos donde ellos se las habían arreglado para no hablarse durante estos últimos meses por cosas banales y tontas, quizá eso era lo que le daba bastante sentido y nos volvía a unir al final del día, dramas, dramas y mas dramas.

-¿Ya sabes lo que harás ahí?- Pregunté con curiosidad al chico que me brindaba un vaso de café caliente
-Todos los diseños de las cartas falsas que una persona no puede escribir con sus propias palabras pero hacen feliz a la gente que las recibe- Se detuvo frente a un semáforo en rojo y yo miré al otro lado de la ventanilla del auto y el reflejo del espejo
-¿Por qué la gente es feliz a base de...- No acabé la oración por lo heladas que se habían vuelto mis manos al ver el reflejo de las personas en la salida de una de las pequeñas cafeterías de Los Angeles.
-¿Elise?- Carl se preocupó y yo seguí sin decir una sola palabra, dejé la pila enorme de papeles que el moreno me había pedido cuidar y bajé del auto, siguiendo el paso de las personas e ignorando los llamados de mi mejor amigo.
La gente iba y venía sin detenerse a decir 'Buenos días' o un tan siquiera 'Buenas noches'. Todos pisaban sus talones por que el tiempo iba orillandolos a la locura y yo solo iba siguiendo la cabellera castaña de aquel muchacho que llevaba usando una camisa tenue de vestir.
-Zachary- Mi voz salió en un suspiro que sabía, él no podría escuchar.

Todo comenzaba a dar vueltas y en un solo parpadeo, le había perdido.
Como ya lo había hecho antes.

-¡Maldita sea, Eli!- La respiración de Carl me trajo de nuevo, colocó su mano sobre mi hombro y yo le miré -¿Qué sucedió?-
-Y-yo- Miré a todos lados tratando de encontrar una razón por la cual había bajado del auto pero ya no podía entrar al edificio donde probablemente toda la gente me cegó al perderle.
-Es que- Mi voz no podía temblar mas de lo necesario y yo solo sonreí -Es que creo que te verías bastante presentable con una de estas- Señalé el puesto de corbatas a nuestro lado derecho y él no mencionó una palabra sin importar cuan raro parecía aquello
-Tienes razón-
-Vamos- Tomé la iniciativa, sabiendo que Carl conocía la razón por la cual ahora nos encontrábamos ahí, siempre la conocían, siempre me conocieron así de bien.

Nota: Si hay algun error en nombres diganmelo porque es una historia adaptada, dejen sus votos y comentarios, se los agradecería de todo corazón, gracias, habrá muchos flashbacks❤

Hard to Love (Zachary Levi)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora