Los resultados del juego

1K 148 130
                                    


—¿Quieren explicarme lo que está pasando aquí? —Lin estaba sentado en uno de los sillones de la oficina de Banba, con el resto de sus compañeros de equipo rodeándolo. Aunque no entendía en qué momento habían llegado. Se fue sólo por unos minutos a comprar vendas que le había encargado el de lentes, y al regresar, estaban todos ellos ahí; esperándolo.

—Las personas que los atacaron no tenían ninguna relación con el plan —soltó Jiro—. Es una pena que los contratistas den poca información a sus empleados, siempre se pueden cometer errores. Confundir personas porque sus nombres o apariencias se parezcan... qué barbaridad.

El rubio alzó una ceja sin entender. Saeki había dicho que Banba tardaría un poco en despertar, había perdido mucha sangre, pero su vida no se encontraba en riesgo. Si quería escucharlo a él explicarle el asunto tendría que esperar. Por lo que hasta el momento entendía, las personas que los habían atacado habían ido en realidad por una chica rubia extranjera, la cual había huido por la situación que ellos armaron.

Enokida había sido el que había hecho la llamada falsa donde se escuchaba la voz de Banba, y la persona corriendo en ese momento era Jiro disfrazado, y tanto el anciano como Yamato habían actuado. El de lentes había alejado al castaño de Sayuri para que el engaño fuera más creíble en el momento justo.

—Nuestro plan la salvó, pero terminaron involucrados —Hernandez suspiró—. Sólo pensábamos que discutirías con Sayuri-san.

Parecía que ignoraban las intenciones iniciales de Banba cuando crearon ese plan que haría que "ambos se sinceraran", o eso había dicho Misaki. Una pequeña ayuda que les querían ofrecer como amigos y compañeros de equipo. Aprovechándose del esperado fracaso del plan del castaño, crearon una situación casi infalible. Por supuesto, todo había sido idea de Enokida. Al descubrirlo, Lin no puedo evitar fulminar al de corte de hongo con su mirada.

—Bueno, ¿qué más falta? ¿algo más que quieras saber? —parecía divertirle la confusión en el rostro del contrario—. Hace algunos días Banba me preguntó mi talla, al parecer quería usarla de referencia para comprarte un vestido. Pensé que sería divertido involucrarme, y al darme cuenta de lo que sucedía me aproveché de la situación.

—Pero pensar que serían sacados de verdad... —Yamato sacudió la cabeza—. Sin duda algo desafortunado.

—Aunque nunca hubiéramos adivinado que algo así pasaría —aportó Misaki.

Lin regresó su atención al de corte de hongo.

—¿También era parte de su plan la información que me diste y los datos del asesinato? —preguntó esperando una respuesta afirmativa—. ¿Por eso dijiste que la información era gratis?

Enokida lo miró como si fuera sorprendente que él no lo hubiera concluido aún. El de cabello largo bufó ante la mirada.

—De hecho Banba-san me envió un mensaje diciendo que te diera datos de Sayuri. Ah... de hecho fue por eso que decidimos actuar —bostezó, parecía haber perdido el interés en responder las preguntas del otro—. Conociéndolo, imaginé que cometería algún error que nos beneficiara. Fue una total coincidencia ese encuentro en realidad, había ido hasta ahí para enviar información de una empresa que me habían pedido con anticipación, y luego recibí el mensaje, justo antes de que tú entrarás.

Tras asentir un par de veces, uniendo la información que tenía, Lin se levantó y caminó hacia la habitación del castaño ignorando a los invitados atrás. Sólo quedaba escuchar su versión de las cosas, dudaba obtener más información relevante del resto, aunque quería confirmar algo.

—¿Ya despertaste, Ban-baka? —el susodicho estaba acostado con una expresión laxa. Parecía estar feliz de ver al más bajo—. Tienes que decirme algunas cosas.

Vida, muerte o amor (BanbaxLin) (Hakata Tonkotsu Ramens) (yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora