©El Reformatorio ||Ticci Toby|| [PAUSADA]

Capitulo 8

Narra Toby

Una sonrisa enloquecida de labios rojizos fue lo primero que vi, luego las ojeras bajo sus ojos, mejillas pintadas con un ligero rubor rojo y su cabello rubio. ¿Era cosa mía o parecía una versión adolescente de Harley Quinn?

-¿Quien rayos eres tu? ¿Porque te me apareces así? -Dije con el ceño fruncido observando a la pequeña chica.

Contrariamente a Tara, esta parecía una muñeca frágil, aunque se me hacia que no lo era realmente. Se veía más delicada. Mientras que mi chica mala era otra historia, no mostraba debilidad alguna y yo sabia bien que me patearia el trasero si me atrevía a decirle que era linda. Absurdo, pero así era.

-Bueno, me llaman Harley -Declaró sonriente, no parecía muy cuerda que digamos.

Quien viene a hablar de locura ¿no?

-Me imagino porque -Murmuré- Aun así no respondiste mi pregunta

-No lo se, te vi oyendo a escondidas y quise aparecerme -Soltó una risita.

Estaba por decirle algo más cuando la vi quedarse con la mirada perdida hacia el frente.

-Ehm... ¿Harley? -Le pase una mano frente a los ojos pero parecía no reaccionar- ¡Hey!

Nada. Se quedó así unos segundos más y luego parpadeó, mirándome, volviendo a sonreir.

-Heey -Saludó, como si recién estuviéramos empezando a hablar.

-¿Que te pasó? -Cuestione curioso.

-Ah, nada, Mr. P me hablaba -Rió nuevamente.

¿Mr. P? ¿Algo así como Mr. J?

-¿Quien es Mr. P? -

-Él es una voz en mi cabeza -Dijo alegremente, para luego dar un giro sobre si misma.

Decidí mejor alejarme de esa niña, perdía el tiempo. Debía ir a asegurarme de que Tara estaba bien. Si alguien la dañaba...

-¡Hey! ¡Espérame! -La escuché caminar más rápido hasta alcanzarme y enlazó su brazo con el mío, apoyándose ligeramente en mi.- ¿Donde vas?

-Ni siquiera sabes quien soy ¿porque me sigues? Suéltame -Gruñí, parecía que esta niña se me iba a pegar como una lapa el resto de mis días por como me sujetaba.

Narrador omnisciente

-No, no, no, no me dejes sola. Ellos quieren hacerme daño -La muchachita comenzó a temblar aun aferrándose al brazo del castaño.

-¿Ellos? ¿Y a mi que me importa? -Él intentó sacudirsela nuevamente pero la pequeña rubia clavó sus uñas en su extremidad de forma que no pudiera hacerlo.

-Por favor, dejame ir contigo... -Alzó la vista para que él lograse contemplar sus ojos grisáceos con lágrimas contenidas.

Sinceramente, Toby estaba tan confundido... Tanto por la conversación que había oido como por la actitud de aquella chica. Así que al final suspiró, rindiendose en su intento de librarse de ella y la dejó acompañarlo de regreso al comedor. Ahora debería averiguar más sobre la pequeña Harley.

-Bien -Aceptó de mala gana y ella sonrió sin soltarlo.- ¿Como que edad tienes? ¿Cinco?

-De hecho tengo quince -Ella rió dulcemente, tenía un cierto aire aniñado que le desconcertaba.

-Eres una niña -Murmuró retornando el camino, con ella pegada a su brazo.- No te había visto antes ¿en que sector estas? -

-Soy del sector C -Ella declaró como si nada.