capitulo 8

2.5K 262 11
                                    

Una vez que termino de ese brillo que ocasióno la piedra corrí en dirección a lo más profundo de la cueva, me dio igual de esa bestia y esa sacerdotisa ya tengo lo que quiero, lo demás no me importa.

Así que me adentre donde está  la esfera donde descansa mi compañera me acerque para tocarla a la esfera; De la nada la vieja estaba ahí.

No sé por qué pero esa presencia me alegro  escucho unos pasos y la respiración  agitada, no era necesario saber quién era me di la vuelta y vi a esa bestia y en sus brazos la sacerdotisa

-Bankotsu…No sé qué es lo que planeas con esa persona que estas –refiriéndose a la esfera –pero no dejera que Kagome desaparezca –dejado al cuerpo de Kikyo en el suelo poniéndose para atacar – ¡te quitare esa piedra como de lugar!

-¡detente bestia! –Haciendo que Inuyasha se detuviera –si peleamos aquí destruiremos el monte, cosa que va ser que no enteremos aquí-cruzándose los brazos ignorando sus gruñidos-si yo fuera tu no hubiera dejado que esa sacerdotisa tuya viniera contigo

-maldito!–guardando su espada –¡quiero que me des esa piedra!

-esta preciosidad-mostrando la piedra-no lo creo –sonriendo maliciosamente –pero l e daré un buen uso –agarra la piedra y le pone en la esfera que empieza a palpitar, la piedra se vuelve una piedra ordinaria

-con eso bastara para que despierte Bankotsu-la anciana se acerca a la esfera poniendo un poco de su poder

-Inuyasha no dejes que eso pase…-lo dice Kikyo asustada

Inuyasha no se necesitó pensarlo dos veces saco su espada y se lanzó un pequeño ataque a la esfera; Bankotsu estaba distraído pero cuando vio lo que hizo la bestia a la esfera no lo pensó dos veces y se lanzó hacia el para impedir otro ataque lo golpeo tan fuerte que hizo que se golpeara con el muro de la cueva

-ya está-se escuchó las palabras de Chizuru-se completo

Todos vieron atentamente la esfera empezó a brillar y se abrió como si fuera una flor el brillo no dejaba de ceder y se vio el cuerpo de una mujer desnuda flotando y empezado a caer cosa que Bankotsu no se quedó atrás que corrió al cuerpo antes que caiga al suelo

Inuyasha por el brillo no pudo ver con claridad a la mujer se fue donde Kikyo y la abrazo para protegerla una vez que el brillo de la esfera acabo

-Kikyo… ¿estás bien?-mirando a Kikyo

-si, estoy bien Inuyasha pero...-dirigiendo su vista a Bankotsu y la anciana

-¡OYE VIEJA! ¡DIJISTE QUE DESPERTARÍA! –Viendo a la vieja con su pipa-¡bruja porque no respondes! –pero recibió con su pipa unos golpes

-niño malcriado! esta despierta solamente que se agotó por el conjuro que hice-volvía a fumar esa pipa-al menos le trajiste ropa ¿no?-mirando la cara que puso Bankotsu

-¿eh? ¡¿Que ropa?!-mirando a la vieja con un ceño fruncido-¡usted no me dijo nada de ropa vieja bruja! –empezado sacar su capa para taparla 

-¡claro que te dije niño malcriado! –pegando otra vez con su pipa

Pero fueron interrumpidos por el sonido de una espada apuntándoles cosa que Bankotsu agarro a la mujer que tenía en sus brazos con tal de protegerla, la anciana les mira sin importarles lo que pasaba

-Ustedes son los que están atrás de esto. No sé quién es que los ordeno… ¡pero acabare con ustedes!

-vaya así que… ¿quieres pelear?–mencione Bankotsu levantándose –lastima hanyou pero hoy no podre complacerte

Unidos por la perla de shikonKde žijí příběhy. Začni objevovat