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—¿Acaso necesito decirlo en rumano? Porque hace unos segundos me pareció que entendías perfectamente el español.

—¿Perro porr qué? ¿Acaso ya tienes parreja?

—Eso a ti no rẹ incumbe. Confórmate con saber que no iré contigo.

El chico de Durmstrang se retiró, no sin antes mirar mal a Theo y Blaise, quienes se reían entre dientes a unos pasos de la escena.

——Ni  una palabra —dijo Vega pasando junto a ellos para marcharse.

—Éste es el número ¿qué? ¿Cinco? —dijo Theo entre risas—. Merlín, apenas y ha pasado un día desde el anuncio del baile.

—¿A cuántos más crees que deba rechazar antes de que Amorcito se decida a invitarla?

—No muchos. Ya debe haber escuchado el rumor sobre los corazones que Vegs ha roto hasta ahora.

—Yo no he roto ningún corazón —dijo Vega rodando los ojos—. Sólo les digo que no estoy interesada. Ellos sin los que se ponen intensos y luego no tengo más opción que ponerlos en su lugar —añadió chasqueando los dedos en la última frase.

—¿Y a Amorcito? ¿También piensas ponerlo en su lugar? —preguntó Blaise imitando el gesto de la pelirroja.

—Si se pone intenso, sí.

—Sí, claro.

Vega miró mal a Theo, pero la llamada de Lyra desvió su atención. A la pelirroja no se le había escapado lo embobada que se veía su hermana la noche anterior, mucho más de lo normal. Malfoy tenía que estar tramando algo.

—Los veo luego —dijo Vega a Theo y Blaise, quienes asintieron antes de caminar hacia la sala común.

—¡Oh, Vega, soy la chica más feliz del mundo! —exclamó Lyra con una enorme sonrisa.

—Y la más tonta —murmuró Vega en voz baja antes de esbozar una sonrisa fingida—. ¿Ah, sí?

—Parece que Draco al fin se olvidó de ti —dijo la rubia más calmada, pero sin borrar la sonrisa de su rostro—. Vega, durante años pensé... pensé que Draco jamás iba a dejar de quererte y que tarde o temprano tú te darías cuenta del gran partido que es, y que terminarías aceptándolo.

Vega no pudo evitar hacer una mueca al escuchar las palabras de su hermana. Draco Malfoy no era más que un hijo de papi, un niñato engreído y retorcido que disfrutaba con humillar a los demás. Ella jamás estaría con alguien así.

—¡Pero eso ahora no importa! —siguió la rubia ignorando los gestos de desagrado de su hermana— Vega, ¡Draco y yo somos novios oficiales!

Vega se quedó en blanco por unos segundos. Lyra estaba bromeando. Debía estar bromeando. Ella sólo era un juguete para Malfoy, una pieza más en su plan. Pero Vega no tenía ni idea de lo que el albino planeaba. Hacer a Lyra su novia bien podría ser parte de ese plan...

—¿Él te lo pidió? —preguntó la pelirroja sin saber qué más decir.

—B-bueno, no exactamente... —balbuceó Lyra poniéndose nerviosa de repente— ¡Peto el punto es que ya lo somos! Iremos a juntos en el próximo viaje a Hogsmeade. Será nuestra primera cita oficial.

—No me digas.

—Y también iremos juntos al baile... Y ya me enteré de que tú no irás...

—¿Ah, no?

—Toda la escuela dice que has rechazado a todo el que te ha preguntado...  —dijo un poco insegura— Así que quería pedirte que me des el vestido que ibas a usar...

Las Mellizas Prince [Harry Potter/Draco Malfoy]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora