rl ; "Gente timbrando"

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Pt. 2

SEOKJIN

  —Bueno... Yo... —Dijo SeokJin, no muy seguro. No quería molestar a NamJoon, pero tenía muchas ganas de hablarle. No, no era lo correcto. —Hablaré luego con él... Ahora está ocupado.

—Pues va a ser que hablarás con él sí o sí, porque se está acercando. —Dijo Baek tranquilamente, para después desaparecer entre la gente acompañada de HoSeok.

Jin volteó la cabeza, gritando un “¡¿QUÉ?!” a la vez que miraba aterrado como NamJoon se le acercaba con una sonrisa. Sintió que ya podía morir, NamJoon le había sonreído.

—¡Jin! —Dijo el menor, parándose frente a él y tapando el micrófono de su teléfono para luego comenzar a hablar. Jin ya se había montado un montón de historias en su mente, y en todas Nam quería hablar con él para decirle que estaba completamente enamorado de él. —¿Sabes dónde hay un sitio tranquilo donde hablar por teléfono? Es que la fiesta ya está en el piso de arriba y hay ruido por todas partes.

—¿E-eh? —Preguntó Jin, desconcertado, su cara fue un poema, claro que NamJoon no estaba enamorado de él, claro que no hablarían. Había sido un tonto. Con dificultad, como si hubiera algo que le retuviera, levantó su mano, señalando el jardín, donde aún no había mucha gente.

—Muchas gracias. —Nam mostró una gran sonrisa, mientras que Jin simplemente le respondió con una sonrisa falsa.

“Ojalá te caigas a la piscina” pensó Jin, mientras veía a NamJoon irse. Cuando este cruzó el gran ventanal, vio también una extraña escalera caer. Sacudió la cabeza y fue hacia dentro de la casa, pensando en que el alcohol que había tomado comenzaba a afectarle, pues creía haber visto también como NamJoon tropezaba y caía en el agua.

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KIYEON.

  La casa de BaekSeon era un caos en ese momento. Todo el mundo estaba bailando, cantando y disfrutando del DJ que habían contratado. Tanto ruido había que Baek no tenía ni idea de como aún podía escuchar el timbre sonar. Pero lo agradeció, pues tener a tu profesora favorita en tu fiesta de cumpleaños era todo lo que podía pedir. Bueno, también había pedido una pistola de confeti, pero TaeHyung le había dicho que no existían.

—¡Profa! —Baek se lanzó encima de KiYeon, dándole un gran abrazo, el cual KiYeon correspondió alegremente. —¡Me alegro que hayas decidido venir! Costó convencerte de que vinieras en vez de ver ese maldito programa de citas. —Baek frunció los labios, asintiendo levemente con la cabeza.

—No es solo un simple programa de citas, hay algo en él que me recuerda a vosotros, os quiero taaanto que ya os veo por todas partes. —KiYeon rodó los ojos. —Además, no te quejes, al final he venido. —Sonrió, levantando las cejas a la vez que sus manos, haciendo un gesto de “¿Qué más quieres?”

Si lo hubiera dicho en alto, BaekSeon hubiera respondido que una pistola de confeti, pero solo se limitó a asentir y continuar hablando:

—Bueno, en todo caso valdrá la pena, mira que buen ambiente hay. —Dijo la castaña, señalando el interior de la casa con la cabeza.

—Sí, lo bueno es que es la primera gala, no me hace falta verla. —La profesora se encogió de hombros, entrando por fin en el lugar, y observando a la gente, todos estaban animados, y entre esas personas podía divisar a algunos de sus alumnos. —Bueno, Baek, ¡Voy a arrasar con la mesa de los aperitivos! Ya te traeré tu regalo luego. —Hizo un gesto con la mano, restándole importancia.

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