Despertar cada día y vivir una zona de guerra la cual tener que enfrentar todos los días no era fácil y menos para Jung HoSeok, quien era señalado como enfermo por tener preferencias sexuales diferentes.
¿Acaso merecía tal dolor por ser diferente? ¿...
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Era otro día más y estaba preocupado.
Todo se estaba complicando.
Unas risas inundaron los pasillos del lugar, las cuales estaban acompañados de insultos y desprecio en sus palabras.
Taehyung fruncio el ceño ante aquellos raros seres humanos ─si se podían catalogar de esa manera─, los cuales estaban halando porquerías a su alrededor desde hace un buen rato y ya se había cansado.
No le gustaba lo que estaba escuchando, se sentía asqueado de ellos.
─Nada más no salgas un enfermo al igual que Jung HoSeok, Taehyung ─Gritaron algunos compañeros de clase de Kim Taehyung con algo de burla para irse corriendo.
Todo el salón sabía que Jung HoSeok, "el rarito de la universidad" como decían todos, se le había confesado.
No entendía cómo las personas hacían escándalo por eso.
¿Tenía algo de malo?
La hora de la salida escolar había llegado, por lo cual todos podían regresar a sus casas sin ningún problema y eso quería Taehyung sin ser molestado por comentarios tontos.
─Son unos cabrones ─Musitó para sí mismo el castañito enojado ─. Lo hacen cuando no hay ningún profesor presente.
TaeHyung mantenía el ceño fruncido al ser víctima de burlas desde esa mañana, sintiendo la preocupación presente en su pecho, porque si estaba pasando por ese tipo de comentarios, ¿Qué sería de su sunbae en esos momentos? ¿Estaría pasando por eso también? Tenía miedo de que algo le estuvieran haciendo.
Debía hacer algo, o encontrarlo rápidamente, así que TaeHyung ignoró aquellas burlas y siguió con su labor de sacar sus libros en su casillero a los que llevaría a casa y guardar algunos, sin inmutarse que había cierto chico mirándole de lejos tímidamente y con temor a acercarse.
HoSeok asomó su carita desde una de las esquinas del lugar, comprobando que no hubiese gente cerca del menor para hablar con el un momento y disculparse por la situación.
Estaba avergonzado, todo era su culpa.
Lo había arruinado.
Siempre arruinaba todo, todo era su culpa.
Avanzó a pasos inseguros, temiendo arruinarlo más de lo que ya estaba pero quería disculparse, seguramente el menor le estaría odiando en esos momentos por haber arruinado su reputación.
HoSeok se sentía peor que antes que cuando regreso de la casa de los Kim, porque había arruinado la reputación de la persona que tanto le gustaba y todo era su culpa.
Todo por ser un enfermo homosexual.
Así que tratando de ser valiente, HoSeok tocó el hombro del chico castañito con inseguridad, a lo que Taehyung rápidamente volteó a verlo.
─HoSeok Sunbaenim ─Exclamó Taehyung en sorpresa, para luego mostrar una sonrisa resplandeciente al ver al mayor.
Su rostro había cambiado a ver a su sunbae, Jung HoSeok, el cual no dejaba de ver el suelo, sintiendo la vergüenza recorrer todo su cuerpo.
HoSeok se sintió flaquear en esos momentos al ser tan sensible y tonto, su corazón se aceleró y sus mejillas ardieron al oír la voz del menor decir su nombre.
TaeHyung no debía sonreírle de esa manera, debía estar enojado con él, tenía que desquitarse por todo lo que había provocado.
HoSeok no solía acercarse mucho a las personas, era muy callado y tímido, ni que decir por los problemas que le rodeaban, y ahora al estar frente a TaeHyung su poca valentía se había evaporado.
Debía huir.
─Lo siento por arruinarte, TaeHyung ─Musitó arrepentido de causarle problemas al menor ─. E-Espero que puedas perdonarme ─y las lágrimas se encontraban retenidas en sus ojos, y TaeHyung se había quedado sorprendido al ver al mayor de esa manera.
─¿A qué te refieres hyung? No hay nada que disculparse.
Lo bueno que ya nadie estaba por los pasillos de la universidad, estaban HoSeok y TaeHyung solos, ya todos estaban seguramente en casa.
─Por mí culpa, ahora se burlan de ti TaeHyung, ¡L-lo siento tanto por eso! ─Hizo muchas reverencias arrepentido, tratando de sentirse mejor consigo mismo de sus errores. Por ser un maldito enfermo, TaeHyung estaba pagando un precio también.
Taehyung observo al mayor impresionado, negando ligeramente con una cálida sonrisa.
Tocó el hombro del mayor para que dejará de culparse, HoSeok observó al menor en silencio con impresión.
─No me has arruinado, HoSeok hyung. Todo está bien, no hay nada del cual tengas que disculparte.
HoSeok se había quedado congelado, paralizado al escuchar a TaeHyung llamarlo "HoSeok hyung" con tanta dulzura.
─Mañana iré a visitarlo, espere por mí en su casa ─Agitó su mano para despedirse del mayor.
Esas palabras dieron esperanza pérdida para el castaño que se quedo solo en los pasillos de la universidad, y con lágrimas en sus ojos, HoSeok observó la silueta del menor irse a casa.
Le quería tanto.
Amaba demasiado a TaeHyung, tanto que dolía.
Anhelaba que esa sonrisa fuera siempre para él.
No pudo evitar de nuevo ilusionarse, sintiendo los tontos latidos de su estúpido corazón acelerados al ser llamado de una manera tan cálida por el menor.
