AFTER YOU by Maybehappen

"Yo aún le quiero"

Desde el instante en el que nos conocimos, supe que aquello desencadenaría una muy buena y duradera amistad.

Teníamos muchas cosas en común al igual que el mismo sentido del humor, ese chaval me caía muy bien. Nuestra relación se fue estrechando cada vez más desde que Isak y Even lo dejaron porque tuve que soportar el peso del corazón roto de Isak durante mucho tiempo. Ya que Jonas no estaba ahí porque se fue a vivir a EEUU, me tocaba encargarme de él, y no lo digo como algo malo sino todo lo contrario.

Jonas a veces se desentendía y ni se interesaba por lo que le pasaba a su amigo así que ahí estaba yo, dándole toda la fuerza que podía y apoyándolo en todo lo que necesitara, ya que Isak en esos tiempos era un vaso esquebrajado a punto de romperse y yo no dejaría que eso pasara.

Empecé a descubrir mi sexualidad a raíz de que Isak me besara aquella vez, mientras reíamos y jugábamos con las palomitas tirados en su cama viendo una película, sin pretensiones algunas.

-Eh capullo desde ahí no vale!- oí a Isak mientras se escondía de mis lanzamientos de palomitas detrás de la cama.

-Claro que vale!- dije riendo.

Me subí a la cama con tal de hacerle una emboscada, a lo que agarré el bol entero de palomitas y se lo tiré por la cabeza haciéndole así reír a carcajadas. En esa época no acostumbraba ni a sonreír así que lo tomé como un logro el escuchar su preciosa risa.

Tras notar las palomitas en la cabeza intentó incorporarse enfadado pero la mano se le resbaló y volvió a caer de culo en el mismo sitio.

Me asomé al borde de la cama tumbado bocabajo, apoyando mi barbilla en mis brazos.

-Eres un patoso -afirmé riéndo

-Que va, ¡Ha sido porque el suelo estaba mojado, hace un rato que mi madre me ha obligado a fregar!

-Claro.- dije levantando una ceja y poniéndole media sonrisa.

-Borra esa sonrisa de tu cara- dijo acercándose y señalando mi boca- vas a tener que limpiarlo tu solito.

-¿Perdón? ¡Has sido tú el que ha empezado!

-Pero el que me ha tirado el bol entero quien ha sido eh?- dijo sonriendo acercándose aún más.

No sabía porque, pero tenía un ligero presentimiento de que algo pasaba entre nosotros, una chispa, algo que no me desagradaba. Sí, estaba buenísimo, pero no podía tirarme a mi hermano. Osea, no Chris. No.

A pesar de todo eso, me gustaba la relación que llevábamos, era como algo nuestro, nos contábamos hasta la más mínima tontería y eso hacía especial nuestra conexion de mejores amigos. Nos queríamos con locura.

-¿Y de quien ha sido la idea de hacer palomitas?- dije intentando buscar una excusa para no tener que limpiar.

-Señorito- dijo a pocos centímetros con retintín, ahora nuestras narices casi se rozaban- no te creas que vas a librarte de esta.

Tras lo que sin esperármelo me plantó un beso en los labios, no un beso apasionado en el que expresas lo mucho que le quieres y en el que dices que no puedes vivir sin él. Nei. Fue un beso dándome las gracias por todo lo que había hecho por él todo ese tiempo, un beso que no me transmitía ningún tipo de amor, quizás un cariño tremendo pero no era un beso de enamorados sino más bien uno de agradecimiento.

No me molestó la idea de que Isak me estuviera besando, ya que sabía perfectamente que ninguno de los dos estaba enamorado del otro.

Seguí el beso tranquilamente mientras saboreaba sus labios entrelazándolos con los míos y hundiendo así mis dedos en sus rizos rubios evitando que se separara de mi, sabía tan bien...