"Claro que lo sabe"

121 6 0
                                    

El saber que tenia a Isak para mi solo fue lo más placentero que había sentido en meses.

Después de tenerle lejos de mi tanto tiempo desde que me mudé a España, ese vacío en mi interior por fin desapareció cuando Isak entró en mi vida de nuevo. Quizás estaba estaba exagerando, quizás lo que sentía por él era solo atracción y mucho -muchísimo- cariño, pero qué más da. Quería arriesgarme con él, de verdad sentía que todo lo que habíamos pasado juntos valdría la pena, al menos para intentarlo. Para retarnos a nosotros mismos a encontrarnos nuestras propias almas, nuestros propios sentimientos.

Para sentirme por fin querido por alguien más allá de la amistad, -la misma que tenía con William desde hacia tanto tiempo- más allá del poco cariño que recibí de mi familia años atrás -motivo por el que me mudé de casa-, para sentir que alguien me valoraba por algo más que mi dinero y aún así era capaz de quererme.

Sabía que podía funcionar, y si. Decidí arriesgarlo todo.

Por esa misma razón decidí enviar yo el e-mail al restaurante donde trabajaba un amigo mío. Hacía tiempo que me había dicho que necesitaban personal y no dudé en apuntar "Isak Valtersen" en el correo de confirmación de datos.

-Que voy a hacer contigo Isak?- pensé en voz alta contemplando como dormía en mi pecho.

-hmm.- murmuró

-Nada.- dije besándole la cabeza y acariciándole el brazo con mi pulgar- Vuelve a dormirte.

-Qué pasa?- volvió a hablar sin abrir los ojos. Como si aquel fuera el sitio más agradable del mundo.- Sé que me estas mirando.

-¿No puedo mirarte?

-Bueno, teniendo en cuenta que Jonas nos ha pillado haciéndolo y que quizás nos mantiene separados durante un tiempo...-se acurrucó a mi cuerpo entrelazando los dedos de nuestras manos.- si, te dejo.

-¿Me das permiso?- dije bromeando ante lo que asintió -¿Cómo puedes ser tan egocéntrico?

-No es eso. M-me gusta que me mires. Me gusta sentir tu mirada en mi. Me da...me da seguridad, sabes? Es como que... Aquí.- dijo esta vez levantando la cabeza para mirarme, señalando con el dedo la distancia entre nosotros- Aquí no va a pasarme nunca nada, contigo es... como que todo va a estar bien. Todo está seguro. M-me hace sentir algo que no había sentido en mi vida. La sensación que me recorre el cuerpo cada vez que me tocas, o simplemente cuando me miras. Esa sensación son fuegos artificiales para mi.

La confesión de Isak me pilló descolocado, la verdad yo nunca me había parado a pensar profunda y seriamente lo que sentiría mi amigo por mi. A decir verdad, lo había pensado varias veces desde lo del beso pero nada más allá de la simple atracción y sentimientos encontrados.

-Me gusta estar contigo por que sé que todo va a salir perfecto. El abrazarte por la espalda, la necesidad de protegerte, Chris. Me da la vida. Es como que tengo que estar pendiente de ti todo el santo día y saber que estas bien solo para estar tranquilo. Y estar así contigo ahora mismo me llena de paz y tranquilidad. Que estemos así debajo de estas mantas quiere decir que por fin estamos bien -su mano bajó lentamente hacia mis costillas acariciando el tatuaje que ambos nos hicimos hacia unas semanas- Quiero que me perdones por mi reacción a lo del beso. Creo que no te he pedido perdón hasta ahora.

-No tienes por qué disculparte, todo fue un malentendido.

Y no mentí, de verdad quería olvidar aquello. Los malos ratos que pasamos, las semanas que peleamos. No quería recordarlo, solo deseaba poder estar ahí con él. Para siempre, acariciando su preciosa cabeza y dándole mis mejores besos esperando a que se durmiera. No podía ser más feliz.

AFTER YOU by MaybehappenOù les histoires vivent. Découvrez maintenant