Love Yourself [MYG] COMPLETA

~Capítulo 7~

Cuando YoonGi llegó a casa había conseguido todo muy limpio y ordenado, era como si el departamento hubiera cobrado vida, todo estaba iluminado, por lo general él siempre dejaba las luces apagadas, pero llegar y encontrar gente en su hogar le agradaba. Olía a limpio, era evidente, cerró detrás de sí dejando el bolso en el sofá, Hyeon salió del cuarto sonriendo al verlo, fue corriendo a él abrazándolo con fuerza.

— ¡Llegaste! ¿Cómo te fue? —sonrió—Oh, cambié algunas cosas y las limpié, ahora tienes más espacio—señaló el lugar. YoonGi fascinado veía cada rincón centrándose luego en su chica, tomó su mano atreviéndose a ser sincero.

— Hyeon, anoche...yo perdí el control, no debí besarte ni tocarte así—acarició su mano—Nunca permitas que ningún hombre te obligue a nada.

Hyeon ahora estaba seria.

— ¿Hice bien al empujarlo?

— Así es, lo hiciste bien, lo siento, te juro que no pasará—la abrazó besando su cabeza.

🌸🌸

Por la mañana la rutina fue la misma, pero en la cocina encontró dos comidas empaquetadas. Tenía una nota con una letra que conocía muy bien, al tomarla decía...

"Esto lo preparé ayer así que está fresco, tienes tu desayuno y tu almuerzo listo para el trabajo"

PD. No te preocupes, vi algunos vídeos en YouTube sobre cocina, ¡Lo estoy haciendo bien!

YoonGi sonrió negando con la cabeza, guardó aquello en su bolso y salió del departamento.

🌸🌸

Hyeon iba a preparar el desayuno cuando se dio cuenta que Suga ya no tenía, mordía su labio pensando que hacer, no quería llamar a YoonGi para molestarlo, tampoco podía dejar que su mascota muriera de hambre. No podía ser tan difícil salir de casa y venir sola, ella podía. Confiaba en sí misma, se cambió de ropa abrigándose, le dejó suficiente agua a Suga prometiendo llegar rápido. Recordó donde YoonGi le decía que guardaba el dinero, tomó lo que creía aceptable y salió del departamento apresurándose.

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YoonGi comía gustoso aquel almuerzo que estaba igual de delicioso que el desayuno, Hyeon realmente se había esmerado. Sonreía cuando pensaba en ella negando con la cabeza, esa chica podía hacerlo por su cuenta. Revisó en el computador del trabajo mientras comía sobre los cursos para ella, había uno no muy lejos de casa, eso le gustaba, el horario era flexible podía escoger mañana o tarde, por supuesto que prefería el de la mañana, así Hyeon no pasaría tanto tiempo sola.

Debía investigar más a fondo, pero lo haría en casa.

🌸🌸

Cuando el chico llegó al departamento se encontró a Hyeon sentada en el suelo con una bolsa de comida para Suga en sus brazos, ella veía sus botas de invierno y tenía una caja a su lado. Preocupado se acercó temiendo lo peor.

— ¿Qué demonios pasó? ¿Qué haces aquí?

— Oppa—se levantó de inmediato sin soltar la bolsa—Perdí las llaves del departamento, estoy preocupada, Suga no ha comido en todo el día y yo no he desayunado, tengo hambre además de frío...

— ¡¿Estuviste todo el día aquí afuera?!—se alteró asustándola. Hyeon miró sus botas asintiendo—Mierda, Hyeon, pudiste llamarme, cielo, ¿Sabes el frío que hace aquí...? —su atención fue a la bolsa y la caja—¿Qué hacías afuera?

Hyeon no lo miró, mantuvo sus ojos en el suelo escuchando su estómago rugir. El chico prefería meterla al departamento y hacerle algo de comer, esa chica no tenía nada en su estómago, eso no era bueno.

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— ¡Te dije que no podías salir sola! —alzó la voz muy serio— ¿Sabes qué pasaría si te sucede algo en la calle y yo no estoy? ¡Tu hermano me mataría! —movía sus manos al hablar. Hyeon terminaba de comer, Suga ya tenía el estómago lleno y se había ido a dormir—Hyeon—dijo su nombre agachándose a su lado—Suga tenía comida aún, estaba sobre el refrigerador.

— ¿Qué? —la chica miró allí notando que era cierto—No sabía—bajó la vista a sus fideos—No quise llamarlo porque no quería molestarlo.

— Es preferible que me molestes a que pases todo el día afuera con este frío—acarició su cabello negro—No vuelvas a asustarme así y sobre las llaves sacaré otra copia—suspiró—Mañana quiero que vayas conmigo al trabajo.

— ¿Por qué?

— Haremos unas cosas, Suga tendrá que quedarse—advirtió—Y otra cosa, esta vez yo haré el desayuno y el almuerzo—Hyeon sonrió contenta.

— ¿Le gustó, oppa?

— Me encantó, estuvo delicioso—besó su mejilla haciéndole sentir orgullosa y contenta con su propio trabajo.