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[6] Música vacía

Diario de Johann von Schäfer

Si hay algo que realmente puedo disfrutar hacer estando sordo, eso es dormir. Como no puedo oír nada, nada puede despertarme, nada puede distraerme, y aunque tenga sus desventajas cuando tengo una familia excesivamente puntual, para mí tiene muchos lados mejores que eso. Lo único que puede llegar a molestarme es el clima, pero eso me da igual.

Cuando duermo, a veces puedo volver a escuchar. No, esa no sería... No puedo volver a escuchar. Pero puedo imaginarme los sonidos. No sé si eso tenga mucho sentido si lo pongo así. Pero sí, eso sucede cuando duermo. Cuando despierto, y todo está silencioso, me dan ganas de volver a enrollarme adentro de las sábanas y así poder seguir.

Qué cosas escribo cuando no estoy de humor de mierda, huh. Mi hermano no apareció en la casa en todo el día, mi madre tampoco, y eso es suficiente para mí. La clase de álgebra con el profesor de los power points se me hizo corta, por algún motivo, y al abrir el cuaderno de apuntes, ahí estaban las palabras que había escrito el frentón. Su letra de profesora de primaria no debería tenerla un chico de secundaria. Es demasiado... redonda. ¿Me dirá su nombre en algún momento? Yo pienso que se llama Timothy. Tiene cara de Timothy.

Diario de Dean Kipling

Otro viernes, y otro día con reuniones del consejo de estudiantes. Anotar todo es algo agotador cuando tienes que escribir a cuatro manos, pero en realidad lo único que tengo que sacrificar para llegar a tiempo es mi letra. No entiendo cómo hay personas que no se preocupan por la manera en la que escriben, ya sea ortográficamente, o el estilo de letra. La cursiva es bonita y práctica.

Hoy decidí quedarme en el patio de la casa un rato más. La luz del sol me es más cómoda a la vista que la luz de una lámpara, y no me lastima ni siquiera sin estar a la sombra. El pasto está algo húmedo, pero el viento fresco y el sonido que hacen las hojas no lo puedo describir. Solía haber un perro en este jardín. Se llamaba Oso. Era pequeñísimo. Siempre estaba mordiendo las cosas, y mi padre amenazó con echarlo varias veces, pero nunca dejamos que se fuera de casa. Falleció unos años atrás... Ya no tenemos perros.

Diario de Johann von Schäfer

No sé qué tiene mi madre con los gatos sin pelo. Tenía uno en Alemania, pero lo tuvimos que dejar porque estaba demasiado débil como para seguir el viaje. Ahora tiene uno nuevo, y no puedo evitar pensar en un pollo pelado cada vez que lo veo. Al menos no anda soltando pelos por toda la cada. Mi hermano y ese pedazo de piel se adoran por algún motivo. Tiene ojos demasiado saltones.

Al final no se llamaba Timothy. Qué pena. Hoy vino de nuevo a la biblioteca, y yo no me enteré que estaba sentado junto a mí hasta que escribió una nota en una hoja rayada mientras yo resolvía ejercicios de química. Ahora me pregunto cuánto tiempo estuvo allí, sin acordarse que no iba a poder oírlo.

"Hey."

"¿Qué quieres?"

"¿Cómo te llamas?"

"¿Y ahora me lo vienes a preguntar?"

Era demasiado extraño que recién en este momento se preocupara por eso. Me pregunto cómo se habrá referido a mí en todo ese tiempo que no lo supo. ¿El niño sordo?

"Es mejor que no preguntarlo. Me llamo Dean."

"Estás queriendo decirme algo con eso. "Claro. Como no se lo pregunté, soy el culpable yo ahora. Tomé el cuaderno antes que él pudiera contestar. "Me llamo Johann. No me importa como lo pronuncies pues no lo voy a escuchar."

"¿Como yojan?"

"Digamos que sí." No entiendo por qué su preocupación en una pronunciación, si ni siquiera estábamos hablando. Nomás escribiendo. "No tienes cara de Dean."

"Tú sí tienes cara de Johann."

"Es porque soy ario, ¿cierto?"

"No, no sé exactamente por qué. ¿Qué estabas estudiando?"

"Química. No es muy difícil."

"Pues no parecía poco difícil cuando mirabas la hoja."

Su expresión se seguía viendo alegre, incluso si yo lo miraba como "no-puedo-creer-lo-que-dices".

"Llevas como tres semanas con esto. Si tanto quieres ayudarme pues explícame para qué sirve sacar el volumen de esta fórmula." Ni siquiera un profesor para sordos podría hacer eso sin usar lenguaje de señas.

"Pues, sirve para conseguir la medida escalar del volumen, no hay mucho mas para decir," dejó la lapicera un segundo. "¿Necesitas saber cómo calcularlo?"

"No sé qué es eso de la medida escalar. ¿Me estás hablando en chino?"

Omitiré todas las explicaciones conceptuales, que no sé cómo demonios hizo para que yo pudiera entender algo. No sé cómo hace para no perder la paciencia ni ser tan molestamente cordial con alguien tan grosero. Si estuviera queriendo solamente ser amable, ya se habría espantado hace tiempo. No tiene absolutamente ningún motivo para seguir aquí, y sin embargo se queda. ¿Qué demonios espera conseguir estando conmigo?

Se toma el autobús como cualquier persona mundana, mientras que yo ni siquiera puedo cruzar una calle. Qué cosas. Ahora tengo que reorganizar mis pensamientos para dejar de llamarlo Timothy. Es una revelación demasiado grande para mi cabeza.

No siempre sueno con sonidos. A veces todo está en silencio, y ese silencio es el que me recuerda dónde estoy. En un cuarto gris (no, no es una metáfora, las paredes están pintadas de gris, no tenía ganas de elegir un color) con un hermano bebé, una madre ausente, un padre que a veces está, y un puto gato con forma de pollo. Ufff, cómo adoro mi vida a veces. Es taaaan perfecta y glamorosa como creí que sería cuando tenía once. Ojalá nada de lo que siguió hubiera pasado. Quizá seguiría en Alemania, con mis recitales, y mi fama, y no siendo un ciudadano más en un lugar como este. ¿Pero qué puedo decir? Así fue cómo me fue en la vida. No sé si me lo merecí, o si fue completamente injusto, pero no quiero pensarlo demasiado. Ya fue suficiente.

***

Semana pre parciales, y ando publicando a la madrugada de sábado :') la vida de un universitario es súper (?

Música vacía [Gay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora