Eres mía en cuerpo y alma ✓

Nuestro.

Sakura entró deprisa a la habitación y cerró de un portazo, observó a Sarada petrificada en su silla y se acercó.

--- ¿Se puede saber que les pasa a ambos? --- preguntó. Frunció el ceño y dejó la carpeta sobre el escritorio ---Boruto está encerrado en el baño y tú aquí sin decirme nada, estás pálida ¿Qué pasó?

Sarada se levantó y frotó sus brazos, sus ojos se encontraron con los jade de su madre y ésta se preocupó aún más, podía ver la mirada desesperada y húmeda de su hija. Sarada respiró profundo y se apoyó en el escritorio.

--- ¿Hiciste los análisis que te pedí? --- preguntó en un susurro trémulo.

Sakura asintió sin entender.

--- Saldrán en un momento, igual le hice unos a Boruto y lo revisé, Pero no parece tener nada grave... ¿Qué te pasa a ti?

Sarada no podía hablar, sentía que se rompería con una sola palabra más. Había aprovechado que su madre atendió a Boruto para robarle una prueba casera del hospital y esas dos rayitas fueron como dos bofetadas a la realidad. Comprobarlo con su chakra fue como un... No, ni sabía como describirlo...

Iba a esperar la prueba de sangre, esa no iba a mentir, Pero tenía miedo, los minutos estaban transcurriendo y no sabía si le había hecho daño...

Sakura seguía hablando, pero ni siquiera sabía de que, estaba intentando asimilar las cosas, todo indicaba que lo estaba y, Si era verdad, ¿Qué haría? ¿Cómo enfrentaría a Boruto? Habían quedado en un acuerdo, pero ambos tuvieron la culpa...

Cerró los ojos y los abrió de golpe cuando la puerta se abrió, vio a una enfermera entrar con un sobre, su madre iba a tomarlo, Pero ella se adelantó. Lo tomó y despedazó para liberar su respuesta, sus ojos recorrieron la página hasta esa palabra que sobresalía.

Positivo.

Sakura observó como palideció y esas lágrimas retenidas rodaron por sus mejillas.

--- ¿Sarada? ¿Qué pasa? Me estás asustando...

--- Estoy embarazada. --- susurró, sin aliento. Dejó caer la hoja y se llevó las manos a la cara.

--- ¿¡Qué!?

La pelirosa la miró boquiabierta, recogió la hoja y lo comprobó. Se quedó aturdida en su lugar, Pero después reaccionó. La tomó de los hombros con una sonrisa.

--- ¡Voy a ser abuela Shanaroo~!

Sus párpados se humedecieron de alegría, Pero al instante se percató de la actitud de Sarada. Cuando se enteró de que la tendría a ella si tuvo muchísimo miedo, pero se sentía feliz de llevarla en su vientre, en su lugar, Sarada estaba en shock y no tenía rastros de felicidad.

--- ¿Qué ocurre? ¿No estás feliz?

Sarada apretó los párpados mientras moría levemente la uña de su pulgar. Abrió los ojos y su mirada ansiosa se clavó en los papeles que su madre tenía.

--- ¿Cuánto tiempo?

Sakura la miró confundida por un momento y luego observó la hoja.