Sirena enamorada (Natsu x Kagura)

Capítulo 4: El poder del fuego y la sirena

Los dos magos fueron acercándose poco a poco al lugar, eran cautelosos y caminaban agachados, aprovechaban los trastos del lugar para no ser vistos.

  — Bien, solo hay uno vigilando la entrada— la joven miraba a los alrededores pero no parecía haber nadie mas.

— Me lo cargo y entramos a golpe limpio— Natsu se crujía los nudillos.

— No, eso alertara al resto...déjalo inconsciente y lo amarremos con estas cuerdas— indico Kagura sosteniendo una que ha cogido del montón.

El joven asiente, se acerca despacio y por detrás para después darle un fuerte golpe en el cuello que deja inconsciente en un momento, lo arrastra hasta su compañera y entre los dos lo atan para luego ponerle una mordaza en la boca por si despertaba pronto. Por último lo dejaron oculto para que nadie pudiera encontrarlo y avisar a la autoridad.

Ambos entraron despacio mirando a todos lados, allí no había nadie, por lo menos en la entrada así que continuaron la búsqueda en la parte interior. Pronto tuvieron que esconderse porque vieron a unos tipos muy sospechosos, iban vestidos de marineros pero había algo que no encajaba, tal vez su piel blanca cuando de normal al trabajar de sol a sol los marineros eran más morenos.

  — Parece que el experimento en la aldea ha fallado pero por lo menos aquí no ocurrirá lo mismo— dijo uno de ellos.

— Varios niños han desaparecido ya, los tenemos ocultos en la parte trasera, si los resultados son buenos podemos llegar a crear un ejercito de monstruos a nuestras ordenes— el otro parecía frotarse las manos con la idea.

— ¿Les zurramos ya?— pregunto Natsu impaciente.

— Veamos...son uno, dos, tres...diez...de acuerdo vamos a ello, pero no destruyas la máquina— ordeno la maga.

— ¿Porque?— parecía molesto.

—La llevaremos a Blue Pegasus que son expertos en este tipo de cosas, podemos hallar pistas o información valiosa— aquel argumento convenció al dragon slayer. 

Al contar tres saltaron rápidamente pillando desprevenidos a estos, Natsu lanzo un rugido al grupo de tres quedando estampados contra la pared, Kagura uso su poder de presión para hacerlos volar contra el techo. Quedaban solo dos y con su espada unido a su velocidad la maga los dejo K.O.

  — Ha sido muy fácil, esperaba más resistencia— dijo el mago decepcionado.

— Estos solo son parte de un grupo poderoso, vamos, ayúdame a atarlos— ordeno mientras tomaba las cuerdas.

Luego llamaron a la autoridad quien tardo poco en subirlos a los carruajes para ir a la prisión, también ayudaron a cargar en uno la máquina que necesitaban para obtener información.

— Hemos estado muy bien— comentaba la maga satisfecha.

— Yo no...quería pelear más tiempo— refunfuñaba este.

— Natsu...es igual— no quiso seguir con el tema.

Regresaron a Magnolia y pasaron por Blue Pegasus a dejar la máquina, luego llegaron a Fairy Tail donde el joven reventó la puerta de una gran patada mientras saludaba a todos.

  — Ya hemos vuelto— dijo  entrando alegre.

  — ¿Ya habéis resuelto todo?— pregunto Makarov bebiendo.

— No, aún no, hemos encontrado una máquina que los de Blue Pegasus tienen que estudiar— respondió Kagura.

Erza se acerco y les dio un gran abrazo, se alegraba mucho de verlos felices.

— One-chan— susurro avergonzada.

— Erza me haces daño— el mago sentía la fuerza de su compañera.

Se sentaron a comer un poco debido al largo viaje, le explicaron a Gray, Lucy y Erza de que trataba la misión y como han ido hasta ahora sus investigaciones.

— Se trata de un asunto bastante serio— comento Lucy preocupada.

— Tratar así a niños...— Erza dio un golpe sobre la mesa al pensar por todo lo que paso ella.

— De momento descansaremos un poco, necesito despejar mi mente con este asunto, hasta que los de Ichiya no me envíen nada quiero desconectar— suspiro la maga bebiendo.

Aquel día Natsu volvió a casa y se tiro encima de su cama, el viaje ha sido tan largo y agotador que se encuentra sin fuerzas, esperaba enfrentarse a gente más poderosa que esos del muelle, mientras trataba ademas de adaptarse de la forma de actuar de la maga de Mermaids dado que él estaba acostumbrado a entrar rompiendo todo y esta vez fue más silenciosa.

Kagura se quedo con Erza, estaba avergonzada de dormir en la misma habitación que ella, veía que tenía muchas armaduras y libros, aunque cuando leyó algunos títulos decidió dejar de leer debido al género al que pertenecían.

— Aquí tienes Kagura— dijo ella sirviendo una taza.

— Gracias One-chan— ella trataba de no sonrojarse.

Aquella noche ambas pudieron ponerse al día dado que en los Grandes Juegos Mágicos no pudieron debido a la guerra contra los dragones. Charlaron alegremente recordando su infancia, el entrenamiento, como se unieron a sus respectivos gremios y finalmente sobre como va Jerall en sus misiones derrotando gremios oscuros.

Tras esto se acostaron y Erza abrazo como una niña pequeña a la maga a la cual le costo dormirse, en cambio Natsu durmió del tirón.

Continuara.

En el próximo, Capítulo 5: Vuelta a la misión.