30 Days Spideychelle

Día 27

En uno de sus cumpleaños

—¡Feliz cumpleaños a ti~!

MJ observó con una sonrisa cómo su esposo soplaba las velas del pastel hecho por May. Peter recibió regalos y felicitaciones de parte de sus compañeros de los Avengers. Thor lo abrazó fuertemente, tan fuerte que Peter se puso rojo.

Peter fue hacia su esposa, sosteniendo los regalos que le habían dado.

—¿Necesitas ayuda con eso?

Peter rió.

—En realidad, sí, por favor.

MJ tomó algunos de los regalos que Peter sostenía y fueron a la habitación de los dos. Dejaron los regalos encima de la cama y MJ se inclinó y besó a su esposo.

—Feliz cumpleaños, Petey.

—Gracias, señora Parker.

—Peter, llevamos cinco años casados. No es necesario que me digas así... especialmente por la parte de «señora», tan solo tengo veintiséis y me estás haciendo sentir vieja.

Peter rió.

—Lo sé, perdón, es que no puedo evitarlo. Simplemente amo como suena.

MJ rodó los ojos y rió y volvió a besar a Peter.

—Hey, al menos cierren la puerta, ¿no?

Ambos se sobresaltaron y voltearon a ver a la puerta, con las mejillas muy sonrojadas. Pietro Maximoff los veía de manera burlesca, apoyado en el marco de la puerta.

—Si quieren algo de privacidad, puedo decirle a Tony y los demás y nos iremos...

—¡Oh, cállate!—Dijeron Peter y Michelle al mismo tiempo y Pietro se fue riendo. Michelle suspiró y fue a cerrar la puerta, luego miró a su esposo.—hice una reservación para nosotros dos en nuestro restaurante favorito ésta noche.

—¿El restaurante al que fuimos cuando los chicos te conocieron?—Preguntó, y con «los chicos» se refería a los Avengers. Michelle asintió, con una sonrisa.—Oh, MJ, no tenías que...

—Sé lo que dirás: «no tenías que hacerlo», «no era necesario», «con solo pasar mi cumpleaños contigo será suficiente, MJ, mi princesa, mi bella esposa, mi amor...»—Habló haciendo una mala imitación de la voz de Peter, quien soltó un bufido y se sonrojó.—Peter, eso no me importa. No hemos podido ir a citas tan seguido ya que ambos siempre estamos ocupados... además, sé que ese restaurante es muy caro, pero eso no será un problema para nosotros. El estar casada con el socio laboral de Tony Stark tiene sus privilegios.

Peter se puso una mano en el pecho, fingiendo estar ofendido.

—¡Michelle Josephine Parker-Jones! ¿¡Acaso te casaste conmigo por el dinero!?

Michelle soltó una fuerte carcajada, pero luego vio a Peter con una mirada severa.

—¡Hey! ¿Qué te dije de mencionar mi segundo nombre?

—Que si lo hiciera... dormiría en la sala con el gato... a pesar de que Mentita llevaba perdida varías semanas...