Bromance [💘CHANBAEK💘]

❣Capítulo 10

El olor a colonia masculina fue lo que lo despertó, acompañado de una calidez en su cuerpo. Se sentía pegajoso. Unas caricias se le eran ofrecidas en sus omoplatos, trazando cada línea que estos hacían, se sentían tan familiares.

Abrió los ojos, sin saber que unos hermosos ojos afilados le veían con ternura, una ternura que ablando su corazón... y que al mismo tiempo lo altero.

Quiso levantarse rápido por la sorpresa, pero un dolor en su espalda baja se lo impidió, no teniendo más que simplemente mirar mal a su acompañante de cama. De un momento a otro se dio cuenta de que no estaba en su casa, y que tampoco traía ropa, todo eso sumado al dolor de su espalda hacía todo más obvio.

— No mames — salió de su boca.

— Buenos días a ti también — expresó ChanYeol con una mueca infantil en sus labios —, ¿quieres tomar una ducha? — ofreció.

BaekHyun no sabía que decir. Había tenido sexo con su jefe y ex-primer-amor, maldita sea justo lo que no quería que pasara. Lo miró aún sin saber que decir.

— ¿Te sientes bien? — puso una mano en su frente, asustando un poco en el proceso a Byun —, ¿te duele algo?

Mierda estaba siendo tan atento, pero no sabía si era sólo otro de sus juegos.

— Haré el desayuno — se levantó, dejando ver su cuerpo completamente desnudo y musculoso.

BaekHyun no sabía si ver aquel cuerpo tan cambiado lleno de músculos, o no ver por la vergüenza de la noche anterior.

Bajó la mirada inconscientemente, haciendo sonreír al más alto cuando se iba a voltear para arrojarle una de sus camisas.

— Puedes bañarte si eso quieres — se puso sus boxers, los cuales estaban en algún lugar de la habitación regados —, te esperare si quieres.

Salió del cuarto.

Ahora sí, podía entrar en pánico.

Se levantó de nuevo rápido, y de nuevo sintiendo ese dolor en su espalda baja. Dejó salir un quejido gracioso, tomó la camisa que le había lanzado el alto, y la miro por unos momentos. Era un poco extraño el tener las prendas de nuevo del chico en sus manos.

Era como si hubiera viajado en el tiempo.

Quería salir de ahí, pero no tuvo el suficiente coraje ya que su cuerpo se sentía tan pegajoso y sucio, no iba a rechazar la ducha que le ofrecieron.

ChanYeol siempre se veía guapo haciendo el desayuno, le recordaba a aquellos días en los que ambos eran novios, lo que le desbordaba una calidez en su corazón, tan hermosa como una caricia en su mejilla.

Ese momento, no era bueno para recordar cosas.

Tomó su ropa sucia, llena de la misteriosa procedencia blanca en sus calzoncillos, sintiéndose falsamente indignado de haber intimado con el chico que lo enamoraba inconscientemente cada vez que se veían.