Capitulo 23

9.8K 355 24
                                    

– ¡Me pueden explicar que carajos está sucediendo aquí!– Paulo no lo podía creer; acaba de llegar a la empresa a recoger a Oriana, quería aclarar lo de la pelea de anoche; por ese motivo le mando la flores pero jamás pensó encontrarla abrazada al cartero.

Sentía la rabia recorrer su ser al ver a su esposa con otro; estaba a punto de destrozar la carita de niño bueno de ese idiota, no le importa que sea su empleado.

–Su esposa se sentía mal señor Dybala; yo solo la estaba consolando– dijo Dylan tratando de calmar a su jefe mientras se alejaba de Oriana, él podía notar la furia emanar de Paulo y aunque le duela reconocerlo, en una pelea contra su jefe, el saldría perdiendo.

— ¡¿Y quién te crees tú para consolar a mi mujer?! – Paulo se encontraba a dos segundos de soltarle un golpe.

–Soy amigo de su esposa señor, si ella me necesita este seguro que estaré ahí para ella– Dylan no supo de donde llego, solo sintió un fuerte golpe en su quijada antes de caer al suelo y perder la consciencia.

Oriana al ver a Paulo golpear a Dylan soltó un pequeño grito; jamás había visto a Paulo así y por alguna razón que él estuviera indignado la enojo más.

– ¡¿Pero qué te crees que haces?! – Oriana empujo a Paulo para acercarse a Dylan; pero Paulo supo lo que haría así que la tomo del brazo y la pego a su pecho.

– ¿Qué? ¿Quieres ir a consolar a tu amante? – Le siseo con toda la furia que sentía– tu eres mi esposa...

–Por necesidad Paulo, recuérdalo, esto es solo un trato; además tú mismo fuiste el que dejo en claro que ambos podíamos hacer con nuestra vida sentimental lo que mejor deseáramos.

–Tú me dijiste que el cartero no te interesaba, – Paulo la apretaba contra su cuerpo tratando de hacerla entender, ella no podía estar con nadie más.

–Y no me interesa, solo me estaba consolando como un amigo— le refuto Oriana igual de furiosa tratando de salir de su agarre.

– Yo no consuelo así a mis "amigas"— le siseo Paulo.

–No, de eso estoy segura, ayer fui observadora de primera mano de tu forma de relacionarte con tus "amigas"— dijo Oriana con la voz rota– Te pedí Paulo que cuando tuvieras tus... encuentros, fueran en lugares privados; pero jamás pensé que meterías a tu amante a nuestra casa– dicho esto lo empujo.

Paulo accedió a soltarla y observó cómo se limpiaba las lágrimas, esto era lo peor que le podría pasar.

Oriana vio cuando él y Alisson se estaban besando ¡Demonios!, por eso estaba llorando y el imbécil del cartero consolándola.

¡Era un imbécil! Si su mujer estaba llorando era por su culpa. Había pasado tanto tiempo evitando ponerle nombre a sus sentimientos con Oriana que había cometido la estupidez de enrollarse con Antonella.

Noto como ella se apartaba las lágrimas con molestia y se maldijo por eso. Le dolía verla así; ella no merecía eso...

Alto.

Ella estaba llorando... Y muy molesta.

Si Oriana estaba llorando era porque le dolió ver lo que paso ayer, y eso significaría... que ella siente algo por él; tal vez no todo este perdido.

Oriana se agacho al lado de Dylan y le examino el golpe.

–Eres un bruto, lo dejaste inconsciente–le recriminó Orianq a Paulo.

–Que agradezca que sólo fue eso–Siseo en respuesta sin arrepentirse de lo que había hecho.

–Dylan...Dylan despierta– le decía Oriana tratando de hacerlo reaccionar.

Casada con mi jefe | Dybatini - TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora